Convertir la basura en fuente de recursos es el gran reto de nuestra sociedad. El desabastecimiento de materias primas a nivel global ha puesto hoy en relieve la necesidad de realizar una trazabilidad de los residuos. Precisamente esa palabra, trazabilidad, tiene un gran recorrido en el mundo de la alimentación o el textil, y empieza a ser tendencia en la gestión de los desechos para garantizar su reutilización.
Para sacar el máximo potencial hace falta una profesionalización del sector y nuevos cargos relacionados con los ingenieros químicos, industriales e informáticos. La trazabilidad del residuo es el ADN que nos permite saber, en un mundo de materiales heterogéneos y todo tipo de tratamientos, de qué y cómo está hecho un residuo para poder recuperarlo.
Como asegura Miguel Varela, CEO de Teimas, empresa especializada en el desarrollo de tecnología que reduce la huella ambiental de las compañías, la trazabilidad se erige como un elemento “vital para garantizar un correcto tratamiento" de los residuos, lo que permite "que no termine en países en vías de desarrollo creando problemas ambientales”.
"Una correcta gestión de los residuos de las baterías supone no seguir contaminando" explica Toni Dorado, investigador principal de Biometallum
En Teimas, como afirma Varela, desarrollan un “software que puede certificar que un residuo va de un punto A un punto B". También puede analizar los tratamientos a los que ha sido sometido ese residuo para su correcta reconversión en materia prima.
Desde Galicia ofrece programas digitales ad hoc a más de 700 centros gestores de residuos y a buen número de las empresas del IBEX 35, a las que forman en la gestión responsable de los residuos que generan. Entre sus clientes, por ejemplo, se encuentra Telefónica, que gracias a la digitalización mediante la herramienta GReTel (Gestión de Residuos de Telefónica) fomenta la economía circular con la recogida de sus terminales, mejorando la eficiencia en el uso de recursos y disminuyendo la dependencia de materias primas.
Las 'come móviles'
Por su parte, el proyecto Biometallum de la Universidad Politécnica de Cataluña se centra en la recuperación de los materiales valiosos de las baterías de los móviles. Una investigación que lleva ya una década estudiando a las come móviles, unas bacterias con las que los investigadores están desarrollando un protocolo que permita, a gran escala y en procesos cortos de tiempo, recuperar los minerales que escasean en Europa y que son fundamentales para la creación de las baterías: cobalto y litio.
Esta innovadora técnica es extrapolable a las baterías de los coches eléctricos, lo que supone un doble impacto positivo: “Una correcta gestión de los residuos de las baterías supone no seguir contaminando con estos materiales altamente tóxicos y revalorizar estos minerales con infinitas vidas”, explica Toni Dorado, investigador principal de Biometallum.
"El proceso con bacterias trabaja a temperatura ambiente y mantiene las propiedades de los minerales", señala Dorado.
Este proyecto de la Universidad Politécnica de Cataluña ha recibido el premio a la mejor iniciativa de desarrollo empresarial de La Caixa y cuenta con un estudio empresarial en el que la tasa de retorno de la inversión es inferior a 3 años. "Al ser un proceso bio tiene ventajas tanto medioambientales como económicas", asegura Dorado.
Y añade: "A diferencia de las técnicas convencionales que trabajan con hornos a altas temperaturas, este proceso con bacterias trabaja a temperatura ambiente y mantiene las propiedades de los minerales a elevada pureza".
Pero como cada batería y cada dispositivo –incluso de la misma marca– pueden ser muy dispares, especialmente si son de diferente año de fabricación, su trazabilidad es vital. Sólo así, conociendo exactamente sus componentes, será posible gestionarlos adecuadamente cuando se convierta en residuo.
"Dona tu móvil a la ciencia"
Para incentivar que la gente pueda hacer llegar su teléfono, el proyecto Biometallum trabaja con Revivack con el concepto “Dona tu móvil a la ciencia”: donar el móvil para que sea invertido en tecnologías que en el futuro den una solución a esta problemática.
Revivack se encarga de ayudar al consumidor en el retorno y a las empresas en la gestión del mismo. Por un lado, es una acreditación que certifica que las marcas son capaces de recibir y almacenar sus productos, para ser posteriormente recuperados. Por otro, en una app que facilita a los usuarios el retorno individual con la obtención de información y descuentos.
"La tecnología influye superlativamente en la gestión de residuos", explica María José Pedragosa, CEO de Revivack
“Y en una tercera instancia pone en contacto a marcas y centros de recuperación para acompañarlos en el proceso de desmontaje, reciclaje o renovación de las piezas que componen el producto, así como trazar el camino inverso del producto a su conversión en otros materiales para hacer nuevos productos” explica María José Pedragosa, CEO y fundadora de Revivack. “La tecnología influye superlativamente en la gestión de residuos".
“El hándicap es la huella de CO2 del retorno (emisiones de CO2 del transporte de envío) versus el CO2 ahorrado en la recuperación del material. Pues a veces puede pasar que no merezca la pena hacer viajes muy largos, por lo que encontrar centros de recepción cercanos a los consumidores hará que el retorno se convierte en un éxito” añade.