Todos los sistemas de becas comedor de las comunidades autónomas tienen "carencias". Así de contundente se muestra el último informe Recetas que educan presentado hoy, martes 5 de septiembre, por la oenegé Educo. En él, aparte de señalar los puntos débiles de los planes de ayudas autonómicos, se presentan "los 10 ingredientes de una buena política de becas y ayudas al comedor escolar".
Porque, explican desde Educo, en España, 1 de cada 3 menores de 18 años vive en riesgo de pobreza. Es decir, el 27,8% de los niños y adolescentes españoles se encuentran en situación de vulnerabilidad. Sin embargo, las becas y ayudas públicas al comedor solo llegan al 13% de los que significan. "Eso significa que alrededor de 1 millón de niños y niñas que deberían recibir una beca comedor se quedan sin esta opción", aseguran desde la oenegé.
“El comedor escolar garantiza que niños y niñas reciben una comida completa al día, algo básico cuando el precio de los alimentos sigue disparado", explica Pilar Orenes, directora general de Educo. El problema está en que los complejos sistemas de becas y ayudas de las diferentes comunidades autónomas no son "eficientes" a la hora de cubrir las necesidades de la infancia más vulnerable.
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Asegurar el acceso a los comedores escolares, asegura Orenes, "forma parte de su derecho [el de los menores] a la educación porque, además de comer, aprenden hábitos nutricionales y sociales, comparten tiempo de ocio, gestionan conflictos y están acompañados y cuidados". Y recuerda que muchos de los niños y niñas que se quedan sin becas comedor "terminan comiendo solos en casa porque las personas adultas de la familia están trabajando".
Desde Educo, añade su directora, reivindican que "nadie debería quedarse fuera de este espacio que garantiza la igualdad de oportunidades".
Diferencias entre CCAA
Cada comunidad autónoma, denuncian desde Educo, utiliza fórmulas diferentes para definir la población infantil que puede beneficiarse de las ayudas al comedor escolar. Esto, aseguran desde la oenegé, provoca situaciones disparatadas, como que dos familias con los mismos ingresos bajos accedan o no a las becas, dependiendo de la CCAA en la que se encuentre su municipio.
Por ejemplo, una familia formada por dos adultos y dos menores, deberá ingresar menos de 12.000 euros anuales para acceder a una ayuda del 80% en la Comunidad de Madrid. En Cataluña, la misma familia tendría que ingresar menos de 14.321 euros para recibir una beca del 100%.
En Extremadura, la beca completa se puede solicitar con ingresos inferiores a 15.329 euros. En Galicia, con menos de 28.000 euros. En el caso de Castilla-La Mancha, la renta baja a los 6.717 euros. En Castilla y León sería de 15.039 euros.
"Hay territorios en los que una familia tiene que tener unos ingresos realmente bajos para tener la posibilidad de recibir beca comedor", lamenta la directora de Educo. Además, desde la entidad proponen que se use como baremo el umbral de pobreza que establece el Instituto Nacional de Estadística (INE): los 20.023,92 euros anuales para una familia formada por dos adultos y dos menores de 14 años.
En su informe, Educo también alerta de que Baleares, Cantabria, Comunidad de Madrid, La Rioja y Navarra "no dan nunca el 100% de la beca". Y que en Canarias, Cataluña y Comunidad Valenciana "el 100% está condicionado a otros requisitos, como que existe una valoración por parte de los servicios sociales".
Oneres lamenta esta situación, pues la experiencia de Educo, trabajando con escuelas, demuestra que muchas familias "que reciben una beca parcial no pueden hacer frente al pago de la diferencia". Esto, recuerda, provoca que los niños solo acudan al comedor el día que lo tienen cubierto por la ayuda o que, directamente, renuncien a ella.
Por otro lado, Recetas que educan recoge que en Aragón, Asturias, Baleares, Canarias, Castilla y León, Comunidad Valenciana y Murcia las becas se conceden por concurrencia competitiva. "Eso quiere decir que se dan según la disponibilidad de presupuesto que haya para ese fin, dejando a niños, niñas y adolescentes sin ayudas aun cumpliendo los requisitos", explican desde la oenegé.
¿Y la diversidad familiar?
El informe también pone el foco en la manera en que las CCAA cubren la diversidad familiar. "Solo Andalucía, Galicia y País Vasco ofrecen el 100% de la beca a las familias monoparentales que están justo en el umbral de la pobreza, ya tengan uno, dos o tres hijos", asegura la oenegé.
Sin embargo, en otras autonomías este tipo de familia puede recibir el 50%, el 60% o el 75% de la beca. "También se tiene en cuenta de manera muy dispar las situaciones de enfermedad, dependencia o discapacidad de alguno de los miembros de la familia", lamentan desde Educo.
Además, la oenegé denuncia que los trámites para pedir las becas son complejos, poco comprensibles para las familias y requieren demasiadas gestiones administrativas, sobre todo cuando la situación de la familia que ya tiene beca comedor no ha cambiado de un año para otro.
Los 10 ingredientes básicos de las becas
Según Educo, estos serías los ingredientes esenciales para cocinar un sistema de becas y ayudas que no deje a ningún menor vulnerable sin comedor:
1. Derecho. Para Educo, las becas son un derecho subjetivo.
2. Igualdad. Los sistemas de becas y ayudas deben usar la misma definición de pobreza.
3. Gratuidad. Las becas deben cubrir el 100% del coste para las familias en situación de pobreza.
4. Progresividad. Las familias que están saliendo de la pobreza también deben recibir apoyos.
5. Diversidad. Las becas deben llegar a todos los modelos de familia.
6. Inclusividad. Las becas deben tener en cuenta la discapacidad o la enfermedad en la familia.
7. Simplicidad. Los trámites para obtener becas tienen que ser simples.
8. Transparencia. Las ayudas tienen que ser explicadas de manera sencilla.
9. Agilidad. Hay que facilitar la renovación anual.
10. Calendario. El calendario de tramitación y pago de las becas debe ser el adecuado para las familias.