Biden busca desbancar a la UE en la lucha climática: "Si se financia el carbón, también la energía verde"
Por su parte, Europa está centrándose en el debate sobre recompensar a los países en desarrollo más afectados por la crisis climática.
12 noviembre, 2022 00:16El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha comparecido este viernes en la COP27 asegurando que su país "está actuando y todos tienen que actuar" para intentar frenar la emergencia climática, y ha incidido en que, "si se puede financiar el carbón en países en desarrollo, no hay razón para no financiar energía verde" en ellos.
La intervención de Biden ha sido el plato fuerte de la quinta jornada de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, que se está celebrando estos días en la ciudad de Sharm el-Sheikh en Egipto. Estados Unidos es uno de los países que más emisiones de CO2 emiten a la atmósfera, por eso su papel es clave en las medidas que se acuerden en la cumbre para enfrentar la crisis climática.
El presidente estadounidense ha expuesto que, "para doblegar la curva de emisiones, todos los países tienen que actuar", y ha alentado a que los países concurrentes en la Cumbre sean capaces de "renovar y elevar nuestras ambiciones climáticas. Es un deber y responsabilidad de liderazgo global", ha remarcado.
Apoyo a los países en desarrollo
Biden ha mirado hacia los países en vías de desarrollo, que por sus circunstancias económicas tienen muchas más dificultades para implementar políticas orientadas a la transición energética y la reducción de las emisiones de gases nocivos: "Quienes están en posición de ayudar deberían estar ayudando a los países en desarrollo para que puedan tomar decisones climáticas decisivas".
En concreto, Biden ha desvelado algunas de las medidas que su administración piensa llevar a cabo en las naciones económicamente menos desarrolladas, como la aportación de 50 millones de dólares adicionales al Fondo de Adaptación, o la entrega de 150 millones de dólares en ayudas para acelerar el Plan de Emergencia del Presidente para la Adaptación y la Resiliencia (PREPARE) en África.
El líder norteamericano también ha remarcado el compromiso de su país con el cumplimiento de los límites de emisiones, y así "evitar el infierno climático" del que advirtió el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, hace tan solo unos días.
Además, Estados Unidos reforzará las regulaciones nacionales propuestas sobre el metano en el sector del petróleo y el gas para que las emisiones de este gas de efecto invernadero bajen en el país un 87% respecto a 2005.
"Los desafíos son grandes, pero nuestra capacidad es mayor que el desafío. Así que pongamos el futuro en nuestras manos y hagamos el mundo que deseamos [...] Por eso estamos aquí y podemos hacerlo. Estoy seguro", ha concluido.
Recompensas a los más perjudicados
Antes de la llegada de Joe Biden, el jefe de la delegación de la Unión Europea en las negociaciones de la COP27, Jacob Werksman, ha insistido en iniciar un diálogo sobre sobre pérdidas y daños, y posibles reparaciones económicas a los países en desarrollo más afectados por el cambio climático.
En una conferencia de prensa al margen de las conversaciones formales, Werksman abordó el contenido de los diálogos que desde el pasado domingo transcurren a puerta cerrada y que a partir de la próxima semana entrarán en su fase de resolución.
"En el caso de perdidas y daños hemos tenido muy buenos intercambios para desarrollar arreglos para la financiación y responder a las pérdidas y daños", ha comentado el representante de la UE, que ha valorado esas charlas como "útiles para entender las expectativas" de todas las partes.
Werksman asegura que esas partes están divididas en dos grupos. Por un lado los que "están comprometidos a compensar las pérdidas y daños, y creen que es mejor hacerlo fortaleciendo las estructuras ya existentes", y quienes "están centrados en establecer un nuevo fondo" de ayuda.
Los países del norte global estarían en ese primer grupo, mientras que el segundo lo integrarían la mayoría de los países en vías de desarrollo. "Ambos grupos de países están cerca de entenderse, pero han parado hasta que lleguen los políticos para ver qué puentes se pueden tender para acordar una solución", ha remarcado Werksman.
Movilización joven
Apoyar a los países desfavorecidos que más sufren las consecuencias del cambio climático es una de las demandas de las múltiples protestas de jóvenes de todo el mundo que, a la par que las comparecencias en la COP, están teniendo lugar tanto en el exterior del recinto de Sharm el-Sheikh como en diversos países del globo.
Muchos manifestantes ven injusto que los países que menos han contribuido al calentamiento climático estén pagando la misma factura que quienes más contaminan debido a su alto nivel de industrialización.
Por primera vez, este año el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico español (MITECO) ha llevado a la COP27 representantes de la Generación Clima, una iniciativa para la que lanzó un concurso de ideas de proyectos de resiliencia y adaptación al cambio climático, temas centrales en esta cumbre.
El grupo español asegura que un mecanismo de pérdidas y daños —asunto que ha conseguido entrar en el programa oficial de las conversaciones— sería una buena forma de atajar al mismo tiempo la justicia climática internacional y la justicia climática intergeneracional, pues coincide que muchos de los países que tienen una población más joven son también los que más están sufriendo las consecuencias del calentamiento global.
Nuevo acuerdo para descarbonizar
En la sesión de este viernes en la COP, los gobiernos de los países que suman más de la mitad del PIB mundial han acordado un plan de acción —a un año vista— para acelerar la descarbonización del transporte por carretera y la siderurgia, intentar aumentar la producción del hidrógeno verde e impulsar la agricultura sostenible.
El plan, que ya se fijó en la anterior cumbre en Glasgow, incluye más de 20 nuevas acciones para abaratar las tecnologías limpias, reducir rápidamente las emisiones e impulsar la seguridad alimentaria de miles de millones de personas.
Estas acciones están dirigidas a sectores que representan más del 50% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero, a los que en la COP28 se unirán los de la construcción y el cemento, dos de los más contaminantes a nivel global.
En concreto, se pretenden construir en todo el planeta al menos 50 plantas industriales de cero emisiones. Además, se buscará establecer una fecha común para la eliminación de los vehículos contaminantes, en consonancia con el Acuerdo de París. De hecho, la Unión Europea ha acordado que a partir de 2035 no se podrán vender vehículos nuevos con motor de combustión en su territorio.