Las incógnitas de Real Madrid y Barça a tres días de El Clásico

La cuenta atrás está en marcha. Real Madrid y FC Barcelona se enfrentan este domingo 16 de octubre (16:15 horas) en el Santiago Bernabéu. Se trata del primer Clásico oficial de la temporada. Ambos equipos llegan al encuentro empatados a puntos y ocupando los dos primeros puestos de la clasificación de La Liga. La tensión es máxima.

En lo deportivo, todo apunta a que este Clásico puede volver a parecerse más a los de hace años. Pero es que además tampoco faltará el morbo: el Real Madrid quiere vengarse del 0-4 de la temporada pasada y el Barça quiere demostrar que está en el camino para volver a ser una potencia mundial.

Por si fuera poco, lo ocurrido con el Barça en Champions esta semana le da más miga al partido. Los azulgrana rozan la eliminación -ni siquiera dependen de sí mismos para pasar a octavos- y empiezan a aceptar que se juegan todo a La Liga esta temporada. El Real Madrid, con mayor tranquilidad en Europa, sigue sin saber lo que es perder en lo que va de campaña.

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Dudas en las enfermerías

Pero entrados en la recta final hasta El Clásico, a tres días vista, hay incógnitas que rodean a uno y otro equipo. En el aspecto de las bajas o posibles bajas hay unas cuantas. En Valdebebas dicen que Courtois tiene "un 50%" de posibilidades de jugar mientras combate con su ciatalgia. Lunin, por si acaso, está preparado para afrontar el que sería su partido más importante como jugador del Real Madrid.

La otra duda en la enfermería blanca es Antonio Rüdiger. Al alemán le están haciendo una mascara para proteger la brecha que se hizo en la frente en el partido ante el Shakhtar. No se descarta su presencia, aunque Alaba y Militao parten como favoritos a la titularidad. La baja segura en el Madrid es la de Dani Ceballos.

Antonio Rüdiger atendido por el médico tras recibir un golpe en la cara Reuters

En el Barça, los focos apuntan a un futbolista en concreto: Jules Koundé. Su presencia en El Clásico ha pasado de estar descartada a ser una posibilidad, aunque el equipo culé corre el riesgo de forzarle y que recaiga de su lesión muscular. El motivo detrás de la posible presencia del francés es el desastre defensivo que se vio ante el Inter.

Ni Araújo ni Christensen estarán -tampoco Héctor Bellerín y Depay-, mientras que Xavi puede haber sentenciado a Gerard Piqué tras sus errores en Champions. El central catalán fue el principal señalado del empate ante el Inter, seguido de Sergio Busquets. Dos capitanes están sobre la cuerda floja.

Los planteamientos

El Madrid también tiene menos incógnitas en cuanto a su planteamiento. Parece claro que Carlo Ancelotti apostará por el once de gala, el de la final de París con la entrada de Tchouaméni en el pivote. Eso significaría que Rodrygo, en un excelente estado de forma, se quedaría en el banquillo como revolución para la segunda parte.

Xavi no tiene margen de error. Aunque dijera que la Champions está siendo "cruel" con el Barça, la realidad es que su plan en el Camp Nou ante el Inter demostró tener agujeros por todas partes. Es clave la recuperación de Koundé, pero tras su primera noche negra en el banquillo azulgrana está obligado a ganar la batalla táctica a Ancelotti. Difícil, por ahora, imaginar el equipo con el que saldrá en el Bernabéu.

Robert Lewandowski cabecea a gol el empate ante el Inter en Champions Reuters

Benzema vs. Lewandowski

Y por último está la incógnita de la batalla más esperada, la de los '9'. Por un lado, Karim Benzema. El lunes, 24 horas después de El Clásico, recogerá su primer Balón de Oro. Será un reconocimiento merecido, que no pudo tener Robert Lewandowski porque en 2020 no hubo entrega. El polaco afronta su primer Madrid-Barça.

Benzema y Lewandowski están necesitados de gol. Karim porque no ha marcado desde que volvió de su lesión y qué mejor que romper esa sequía en un Clásico. Y Lewandowski porque llegó a Can Barça para demostrar que sigue siendo de los mejores del mundo y acaba de recibir el primer mazazo con la casi eliminación en Champions -aunque él mantuviera vivo una última esperanza con sus dos goles del miércoles-. La guerra está a punto de comenzar.