Este 2015 está siendo sin duda un año especialmente caluroso. No, no me refiero a caluroso en una localización concreta ni a nivel global (que oye, si que lo ha sido, pero es otro tema). Este año ha sido caluroso para los smartphones de gama alta.
Desde que vimos el primer terminal con procesador Snapdragon 810 pudimos notar que el último procesador de la compañía americana Qualcomm tenía serios problemas manteniendo una temperatura aceptable.
Este fallo se vio corregido posteriormente en la segunda versión de su chip, la cual montan algunos terminales como el OnePlus Two o el Sony Xperia Z5. Es comprensible que a mayor potencia más difícil sea mantener una temperatura aceptable, pero existe un aliado que puede ser de gran utilidad a los fabricantes y que nos lleva acompañando desde hace mucho tiempo a nuestros PC: la refrigeración líquida.
Calor y smartphones
Si bien es cierto que nuestros smartphones se suelen calentar cuando los utilizamos por un periodo medianamente prolongado, estos incluyen un método de disipación del calor que ayuda a que esta temperatura no sea mayor.
Para su refrigeración, la gran mayoría de los teléfonos incluye una refrigeración que se basa en varias láminas de carbono dispuestas unas encima de otras y que transforman el calor generado en los distintos componentes en pequeñas vibraciones que permiten que este sea disipado lentamente.
Aun así, este método es eficaz, pero no lo suficiente, tal y como demuestran las temperaturas de los smartphones con el procesador de Qualcomm.
Refrigeración líquida, el futuro de la refrigeración en smartphones
Si bien no han sido los primeros, Microsoft ha presentado sus nuevos terminales Lumia, los cuales incluyen entre otras novedades refrigeración líquida, algo que nos sirve para ver que la refrigeración líquida no es el futuro de la refrigeración en smartphones sino que es el presente. Entre otros, Fujitsu nos ofrece la solución.
El primer fabricante en utilizar esta refrigeración en un teléfono fue NEC. El fabricante japonés incluyó esta tecnología en su terminal Medias X N-06E. Este dispositivo utilizaba la refrigeración líquida para dispersar el calor que generaba su procesador con un sistema de tubos que conducía el líquido caliente hacia la parte más exterior del terminal.
Desde el lanzamiento de este terminal no ha habido ninguno que haya contado con refrigeración líquida y que haya conseguido una gran atención mediática, aunque si que hubo rumores en su momento de que el Sony Xperia Z2 incluía dicho sistema, algo que nunca se llegó a confirmar.
Pero a pesar de no existir una confirmación oficial por parte de Sony, el fabricante japonés si es la compañía que más trabaja en la refrigeración de sus terminales, o al menos así ha sido en su nuevo buque insignia.
El Sony Xperia Z5 es un terminal que cuenta con un sistema de refrigeración muy optimizado, un sistema que han implementado tras ser los primeros afectados por los problemas de sobrecalentamiento del Snapdragon 810.
El calor, un serio problema para nuestros dispositivos
El hecho de ver que un gran fabricante como Microsoft incluye esta tecnología de refrigeración en sus nuevos terminales nos da que pensar que probablemente otros fabricantes implementen un sistema similar próximamente.
Nuestros smartphones son cada día que pasa más potentes y para ello va a ser necesario que los fabricantes se pongan las pilas para conseguir que la temperatura de estos no aumente hasta niveles que puedan dañar los componentes del dispositivo o, peor aún, a nosotros mismos.
La refrigeración líquida sin duda alguna tiene muchas papeletas para ser la solución adecuada, aunque parece que tendremos que esperar un tiempo antes de disfrutar en nuestros smartphones de una característica, al menos si lo que queremos es un terminal con Android.
¿Qué os parece la refrigeración líquida? ¿Pensáis que puede ser algo fundamental en el futuro?