Asistimos a la presentación del Samsung Galaxy S8 con un LG G6 y aprovechamos para compararlos frente a frente. ¿Cuál ganará en este primer análisis comparativo?
Tras un primer análisis que publiqué con las primeras impresiones del Samsung Galaxy S8, tocaba una comparativa rápida entre este y su competencia coreana. Fue premeditada ya que aproveché para llevarme el LG G6 a la presentación, con lo que pude enfrentar a ambos, comprobar dimensiones, prestaciones, medí la respuesta de ambos smartphones… Puedes imaginarlo: los dos ofrecen lo máximo en un Android. Incluso apuestan por un ratio de pantalla similar junto a las esquinas redondeadas.
Muy manejables, de tamaño parecido y dirigidos al público más pudiente. Pero cambian tanto a la vista que se hacen radicalmente distintos a los ojos tanto entendidos como profanos. Comparemos.
Materiales de alta calidad que ocupan lo menos posible
Samsung y LG tienen la misma visión; que no es otra que la más lógica a tenor del exagerado tamaño que tomaron las pantallas móviles: cuanta menos comodidad resten al dueño del teléfono mucho mejor. Con pulgadas creciendo como un río en época de deshielo, ha llegado el momento en el que los fabricantes más conocidos deben mejorar sus diseños para aprovechar los tamaños.
Los dos móviles son alargados y estrechos con una apuesta por un ratio similar
Tanto el Samsung Galaxy S8 como el LG G6 se acomodan perfectamente a la mano. Resultan muy cómodos, sobre todo por su cara trasera curvada (algo más pronunciada en el S8). El G6 es más grueso, una realidad que se acentúa al carecer de la pantalla Edge. En el Samsung Galaxy S8 están muy conseguidos los bordes de la pantalla, ofrece un diseño muy parecido al revivido Samsung Galaxy Note 7.
La principal diferencia exterior, aparte de que cada uno aporta el estilo propio de la marca (cada uno tendrá su preferencia), es la pantalla Edge. A quien no le guste la manía de Samsung por las pantallas curvas tendrá que apostar por LG. Ambos móviles tienen una relación de aspecto similar (18/18,5:9 para el LG G6 y Samsung Galaxy S8 respectivamente) y su pantalla aporta una calidad similar a primera vista. El añadido del Home virtual y táctil en el S8 aporta un toque extra que tampoco supone excesiva diferenciación.
Para mi gusto el LG G6 tiene la cara trasera mejor resuelta; por más que no termine de convencerme su apariencia de caricatura. El lector de huellas del Galaxy S8, principal nota de discordancia, no queda en un buen sitio: cuesta encontrarlo a la primera. Seguramente se solucione con la práctica, pero en el LG G6 es más cómodo.
La potencia puede ser determinante a largo plazo
Pero no lo es cuando se comparan mano a mano. Se ha hablado largo y tendido de la decisión por un procesador u otro, y, objetivamente, el LG G6 queda por detrás en términos de potencia pura y dura. AnTuTu lo deja bien claro. El enfrentamiento cara a cara no tanto: 140.053 puntos del LG G6 contra 173.146 puntos en el Samsung Galaxy S8.
El Samsung Galaxy S8 supera por mucho al LG G6 en benchmarks
Resulta imposible analizar todas las consecuencias de enfrentar a los procesadores de ambos modelos. Teniendo en cuenta que se encuentran en idéntica franja de precio, el S8 ofrece más por «lo mismo» (hay una diferencia inicial de 60 euros). Yo no pude encontrar diferencias en el uso: los dos se mueven de manera veloz como si en vez de mover Android levantasen una pluma a soplidos. Y los dos poseen animaciones muy prolongadas entre apps que lo mejor es desactivar desde los ajustes de desarrollador.
Samsung Galaxy S8 | LG G6 | |
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Pantalla | 5,8" AMOLED curva (2.960 x 1.440 px) |
5.7" (2880 x 1440 px) |
Procesador (SoC) | Exynos 8895 / Snapdragon 835 | Snapdragon 821 |
Memoria RAM | 4 GB | 4GB |
Memoria interna | 64 GB + microSD | 32 GB + microSD |
Cámara trasera | 12 MP, Autoenfoque Dual-Pixel , Autoenfoque Láser, f/1.7 apertura, vídeo 4K, OIS... | Dos lentes de 13 MP, Autoenfoque láser, OIS y LED Flash |
Cámara delantera | 8 MP | 5 MP |
Batería | 3.000 mAh | 3.300 mAh |
Conectividad | 4G LTE, USB 3.1 Tipo C | 4G LTE, USB 3.1 Tipo C |
Tamaño | 148.9 x 68.1 x 8.0 mm | 149.4 x 73.9 x 7.3 mm |
Peso | 151 gramos | 159 gramos |
Versión de Android | 7.0 Nougat con Touchwiz | 7.0 Nougat con LG UX 6 |
Otros | Lector de huellas trasero, IP68... | Lector de huellas trasero, IP68 |
Precio | 809 euros | 699€ |
Los dos suponen una ruptura con el anterior modelo de la gama, aunque esto se materializa de mejor manera en el Samsung Galaxy S8. Este es más más arriesgado, pero también mejor resuelto. Los dos prometen el máximo en conexión, gráficos o experiencia diaria, pero es el S8 donde va un poco más allá. Con el Bluetooth 5.0, por ejemplo; aunque no tiene la radio FM que sí posee el LG G6. Además, incluye mayor batería (3.500 mAh frente a 3.000), lo que debería traducirse en una mejor autonomía. Sin que este aspecto pueda contratarse en una primera toma de contacto.
El Samsung Galaxy S8 está por encima en prestaciones sobre el papel, pero no existe demasiada diferencia en términos de uso habitual. Al menos mientras no se enfrenten con un benchmark de por medio.
El Samsung Galaxy S8 acusa su mayor personalización
Es una de las quejas clásicas dentro de los Samsung Galaxy, aunque LG tampoco se mantiene muy atrás. Por contra, en esta nueva generación las diferencias se hacen más grandes: Samsung se aleja más del estilo y diseño stock. Personalmente no me desagrada la interfaz del S8: profundiza en el minimalismo para favorecer la inmersión que proporciona el ratio de pantalla y los bordes Edge. Eso sí, no gustará a los más puristas. Nada.
El LG G6 apuesta por un estilo más reconocible que, desde mi punto de vista, favorece el uso habitual. Incluye mucho menos bloatware y el número de servicios corriendo en segundo plano es significativamente menor. Habrá que ver una comparación de autonomía con el mismo número de aplicaciones instaladas, porque apostaría a que el consumo en suspensión del LG G6 es menor.
Dos móviles que están alejados del aspecto puro de Android. El Samsung Galaxy S8 mucho más
Más allá del bloatware, hay un elemento de software que puede marcar la diferencia entre los móviles que se han subido a la mesa de comparativas: Bixby. Pude probarlo por encima, especialmente en la pantalla de inicio personalizada y en la búsqueda contextual en imágenes: pinta muy bien. No obstante, es un añadido que quizá no suponga diferencias para gran parte de los usuarios. Sobre todo porque los dos vienen con Google Assistant. Ambos quizá reciban el español a final de este 2017, por lo podrían reducirse las diferencias entre Bixby y Assistant reduciéndose a su vez las que mantienen el Samsung Galaxy S8 y el LG G6.
Fotografía: un claro vencedor
La doble cámara juega un papel diferenciador en el LG G6, pero no le sirve para ganar a su contrincante. Aprecio las tomas en gran angular, es uno de los principales valores del G6, pero el Galaxy S8 le gana en versatilidad con mejores resultados en todos los campos.
Frente a frente el S8 posee un mejor enfoque, mucho más rápido y preciso. Además, en las tomas con iluminación reducida bate a su rival: el LG G6 tiene una asignatura pendiente en este aspecto. Gana en la interfaz, especialmente por su modo pro, pierde en calidad con su cámara delantera: el Samsung Galaxy S8 ofrece mayor nitidez y definición. También es más rápido enfocando por delante.
El enfoque del Samsung Galaxy S8 y sus resultados fotográficos en baja luz son espectaculares
No se pueden comparar dos móviles haciendo fotos en un recinto cerrado, por lo que habría que esperar a una prueba de campo para ver cómo se comporta el Samsung Galaxy S8. El LG G6 ofrece muy buenos resultados en exteriores y de día complementándolos con el extra de escena que es capaz de captar el sensor con lentes gran angular. Esto añade cierto efecto «ojo de pez» a los extremos de la imagen, pero suelen aportar un extra de espectacularidad e información que a menudo se agradece.
Móviles diferentes de dimensiones parecidas con un precio exagerado
Este mes de abril está calentito, y no precisamente porque esperemos la esencia de la primavera: tener en las tiendas a dos móviles como el Samsung Galaxy S8 y el LG G6 genera dudas en torno a cuál adquirir. Puestos a tirar la casa por la ventana, y teniendo en cuenta que su precio es exagerado (esto es poco discutible), decidirse por uno u otro gama alta supone una decisión emocional. Que suele estar ligada con la marca.
Siendo sinceros, pocos apreciarán diferencias notorias teniendo uno u otro. Ambos ofrecen altísima calidad en todo lo que pueden ofrecer. Y transmiten la mejor experiencia Android a través del tamiz de su propia personalización. Eso sí: sobre el papel gama el S8. Pero ya sabemos que los números no influyen decisivamente en la realidad.
Ayer me preguntaron: «Dado que tienes el LG G6, y que has probado el Samsung Galaxy S8, ¿cuál elegirías si fueras a comprarte uno?». Lo valoré durante unos minutos, hice mis cábalas mentales, inspeccioné entre la emociones que me transmitieron en la mano y… A ver si adivinas mi decisión.