Machaca monstruos saltando de mazmorra en mazmorra en Dungeon Quest
Desde que en 1996 Blizzard lanzó la primera entrega de la saga Diablo, los juegos de rol de acción han sido una visión habitual en las estanterías de todas las consolas y del PC. La cantidad de clones y juegos “inspirados” en Diablo es tal que se puede decir que es un juego que creó un sub-genero por si solo. Por suerte, Android no se salva de estos juegos, ya que juntan la diversión directa de un juego de acción con la estrategia y la gestión de los juegos de rol. Dungeon Quest es el último representante (por ahora) de este estilo de juego en Android.
Lo curioso es que una vez que lo inicié, el primer juego que me vino a la mente no fue la obra de Blizzard, sino Torchlight, el juego creado por gente que trabajó en las dos primeras entregas de la saga Diablo. El estilo gráfico en particular es muy similar, ya que huye del realismo extremo y de los entornos grises y muertos, apostando en cambio por una paleta de colores chillones, unos monstruos que parecen salidos de una serie de dibujos animados, y un diseño del personaje principal que parece una caricatura.
Jugablemente también apuesta por una versión descafeinada de lo ya conocido, principalmente por limitaciones del propio dispositivo. Así, si en los juegos de rol de acción es habitual asignar poderes y habilidades a las teclas numéricas del teclado, en un móvil no tenemos esa ventaja, por lo que los combates acaban siendo mas simples. Además del stick de dirección, contamos con un botón de ataque con el arma, uno para un ítem, y otros dos para las pociones de salud y maná respectivamente, que usaremos constantemente.
Para compensar la falta de habilidades, las armas tienen una variedad de ataques asociados, como veneno, fuego o hielo que funcionarán mejor contra ciertos enemigos, mientras que otros tienen cierta invulnerabilidad contra éstos. Por tanto la clave para pasarnos varias mazmorras será elegir el arma adecuada en cada momento, además de evitar ser rodeados por las hordas de enemigos que nos acecharán. Es llamativo que para no romper el ritmo de la experiencia, no tendremos que salir de la mazmorra para comerciar con los tesoros que encontremos, ya que contaremos con una tienda al acceder al menú.
Hablando de tiendas, los micropagos nos permiten comprar monedas de oro con las que conseguir mas pociones y objetos interesantes, e incluso podemos subir de nivel a cambio de la cantidad adecuada. Dungeon Quest es un acercamiento algo light a un estilo de juego tan popular en PC, pero que tiene sentido por las características de los dispositivos a los que va encaminado. En ese sentido es un juego que cumple con lo que pretende.