Cómo sería el móvil de cada tribu urbana
La cantidad de smartphones en el mercado permite hacer un retrato robot del móvil de cada tribu urbana. De hipsters a heavys. Así son sus teléfonos.
27 febrero, 2016 21:03Al ver el coche que tiene determinada persona ya nos podemos imaginar a qué tribu urbana pertenece. Si vemos un Honda amarillo fosforito con luces de neon en los bajos ya nos imaginaremos que el dueño no tiene nada que ver con el de un Beetle rosa ni con el de una Volkswagen T2 con flores pintadas.
El mercado de los smartphones nos ofrece una variedad tan grande que ya prácticamente ocurre lo mismo con los coches. Dime qué teléfono tienes y te diré de qué tribu urbana eres. Y si a eso le añadimos un «csiniano» análisis de la funda, fondo de pantalla y las aplicaciones, ya te podremos decir hasta tu cena de ayer.
Cada tribu tiene sus símbolos, su música, su vestimenta y, por supuesto, también tiene su propio smartphone. Así sería el móvil de cada tribu urbana. Y sí, los padres y madres merecen que se les considere una tribu urbana.
Pijo
El HTC M9 de oro con la serigrafía del León Cecil es una opción ideal para quienes quieran demostrar que ser de clase alta-alta no es incompatible con ser empático con los de media-alta. De fondo de pantalla no puede faltar esa foto luciendo swing en el hoyo 9. Entre sus aplicaciones no puede faltar Luxy -un Tinder para millonarios- y JetSmarter, una aplicación para reservar vuelos privados.
Pija
Lo hemos intentado muy fuerte, pero realmente hemos sido incapaces de imaginarnos una pija sin un iPhone. Si es choni -el chonismo es transversal- será dorado, y si no blanco con alguna funda de color rosita o de ositos o similar. En el fondo de pantalla no puede faltar una playa de Menorca o una foto de su novio. O quizá el combo novio en la playa de Menorca, claro. Tiene una funda con alguna frase cursi de Mr Wonderful y de entre sus aplicaciones, la más extraña es Pinterest, que a ella le parece una versión exótica de Instagram. De tono de móvil no puede faltar algo de Coldplay, cuanto más típico mejor.
Perroflauta
Todos hemos visto perroflautas con un Mac, pero vamos a asumir que estos tienen un poco más de coherencia y se han hecho con un Fairphone. Entre sus juegos no pueden faltar algunos de de gestión y botánica. De fondo de pantalla no puede faltar la foto famosa del Che -no miréis su carrete u os encontraréis varios centenares de selfies imitando la famosa pose-. Y ante una llamada sonará El Gato López de Ska-P
Hipster
Ningún teléfono para hacer fotos vintage como el Samsung Galaxy S6. Una foto de una bici con diecisiete filtros encima como fondo de pantalla, no faltarán apps de edición fotográfica desde Lightroom a Snapseed. Antes de subir una foto a Instagram, la pasará por las quince que tiene. True Story. De todo de llamada tiene a su sobrino dando golpes a una cacerola con una cuchara. Todo lo demás le parece mainstream. Pero si les gusta tanto lo vintage… ¿igual no deberían tener un viejo Nokia de esos que no tienen ni cámara?
Metalero
Un metalero no puede tener nada más pequeño que un HTC One M9 con BoomSound que haga temblar la carretera bajo las ruedas de su moto. Con una buena funda de Iron Maiden, o quizá con pinchos, y un buen fondo de pantalla de Eddie avanzando hacia la pantalla con una bandera británica en brazos y un grito grutural de tono de mensaje que su primo friki cree que es de Chewbacca. Porque a un buen heavy que su teléfono se recaliente no le quema, sólo le hace sentirse más cerca del infierno. Y le encanta. Hot-hot hotter than hell!!
Runnerholic
A todo buen runnerholic que se precie se le reconoce porque lleva tres smartwatches y cuatro smartbands en cada brazo, pero de nada sirven todos estos wearables sin un teléfono que sirva de centro de control. Un ligerísimo Z5 Compact que se puede meter en cualquier bolsillo le vale para llenar todos su almacenamiento con las ochenta y tres aplicaciones que controlan su ritmo cardiaco. No se puede correr sin la banda sonora de Rocky, por supuesto. Aunque sea depresivo que los niños de tu barrio no se pongan a correr contigo por muchos saltitos que des al subir unas escaleras. Lo que tiene ser un pringado.
Madre
Hubo en tiempo en el que los hijos heredaban los teléfonos de los padres. Las tornas han girado y ahora es muy habitual que las madres sean quienes hereden los teléfonos de sus hijos. Esos teléfonos cuya batería duraba media mañana y que iba más lento que Fernando Alonso cobra una segunda vida en manos de tu madre. La batería dura día y medio y todo va como un tiro. Tiene una foto tuya de fondo de pantalla -o al menos eso parece, está tapada por 50 millones de notificaciones que no ha eliminado- y un tono de llamada de Nino Bravo porque tocó algo en un mensaje que me mandó su operadora y ahora no lo sabe quitar.
Padre
Existe una variante de padre que tiene un teléfono de esos que no tiene ni siquiera cámara de fotos, pero nosotros nos centraremos en su evolución: el que tiene el teléfono que decidió el señor que le atendió en la tienda. Whatsapp -al que no entra desde antes de ayer-, el fondo de pantalla y tono que viene por defecto y un montón de notificaciones de cumpleaños de Facebook que no se ha ni molestado en eliminar.
Geek
Un Nexus 6P rooteado, con una cantidad de módulos de xposed montados en delicado equilibrio como una torre de jenga y que se mantiene únicamente gracias a su propia atracción gravitatoria. No le pueden faltar todo tipo de aplicaciones, desde las que permiten pagar por NFC hasta Greenify, aplicaciones que permiten el control manual de la cámara y en definitiva todo cuanto permita convertir el smartphone en el centro de control de la NASA. Lleva una funda que es Han Solo congelado en carbonita y un fondo de pantalla de el Despertar de la Fuerza, y de tono de llamada, la música del Tetris en MIDI.