Felipe VI: "El vínculo entre la cultura y la sociedad es más fuerte de lo que pensábamos"
El Rey presidió la entrega de los Premios Nacionales de los años 2018 y 2019 que distinguieron a personalidades como Almudena Grandes, Julieta Serrano o Cristina Morales
29 septiembre, 2021 12:51Los Reyes hicieron ayer entrega de los Premios Nacionales de los años 2018 y 2019 en el Claustro del Museo Nacional del Prado. Un acto o quizá, como afirmó Miquel Iceta, Ministro de Cultura y Deporte, “un acontecimiento deseado” que además de poner en valor el mérito y el compromiso de los premiados, también “simboliza que hemos empezado a recuperar la deseada normalidad”.
Estos galardones son sinónimo de “la celebración del patrimonio cultural que compone los frutos de vuestras obras, el patrimonio cultural que representan vuestros versos, los pentagramas de vuestras composiciones, las viñetas que se entrelazan en los cómics, las armonías y colores de las ilustraciones, la pasión por la lectura”, indicó el ministro. Quiso recordar que “después de cada pandemia viene un periodo de renacimiento. El año 2022 debe ser el año del renacimiento cultural de España porque es la que nos ha permitido salvar distancias y estrechar lazos durante el confinamiento”, arguye. En estos tiempos, continuó, “la sociedad demanda cultura y tenéis el potencial, las ganas y el talento para proporcionarla”.
En total, fueron 60 las personalidades de la cultura española las que recogieron su distinción. Las escritoras Almudena Grandes y Francisca Aguirre, el académico Santiago Muñoz Machado, la periodista Victoria Prego, el dibujante Peridis, el artista Ángel Bados, la actriz Julieta Serrano, el fotógrafo Leopoldo Pomés, el conjunto Cuarteto Quiroga, la ilustradora Ana Penyas, la cantante Christina Rosenvinge o el coreógrafo Antonio Ruz fueron algunos de los distinguidos en 2018. Fue Ruz, Premio Nacional de Danza, quien tomó la palabra en nombre de todos ellos.
En su discurso de agradecimiento Ruz recordó el momento en el que recibió la llamada de la directora general del INAEM, Amaya de Miguel, dándole la noticia. Se sentó en un banco y emocionado llamó a sus padres. “Nos decían que en tiempos de crisis había que reinventarse. Yo, como creador independiente, siento que llevo toda la vida reinventándome y forjando mi espíritu de lucha y resiliencia ante la vida”, señaló. La cultura “es nuestro mejor antídoto frente a la adversidad, un salvavidas y si podemos seguir leyendo libros o viendo películas es porque quienes estamos detrás hemos resistido”.
Anna Caballé, Premio Nacional de Historia de España, puso voz a los premiados del año 2019. Entre ellos nos encontramos con el Área de Restauración del Museo del Prado, la editorial Páginas de Espuma, la artista Àngels Ribé, el director teatral Andrés Lima, la fotógrafa Montserrat Soto, los escritores Bernardo Atxaga y Cristina Morales, el dramaturgo Alberto Conejero o la cantante Mala Rodríguez.
Para Caballé el premio recibido es al mismo tiempo un homenaje a su biografiada, Concepción Arenal, “una de las mejores mentes que ha tenido nuestro país y uno de los seres más humanitarios que ha dado la cultura española”. También hizo hincapié en que “dar las gracias por algo recibido es una de las rocas que mantienen a la humanidad unida, es uno de los pilares de la vida en sociedad a pesar de su apariencia protocolaria y supuestamente superficial. Sin embargo, sin reciprocidad lo tenemos todo perdido”, apuntó.
El valor de la cultura
Una de las líneas de la gala giró en torno al valor de la cultura de nuestro país. En este sentido, Iceta arguyó que la cultura “debe ocupar el lugar que merece sin perder la perspectiva de quienes nos precedieron y el patrimonio cultural que atesoramos”. Antonio Ruz lo constató asegurando que “fomentando la relación de niños y jóvenes con la cultura se crea una herramienta de crecimiento personal e intelectual. Ese es nuestro compromiso con la sociedad”.
El Rey Felipe VI, encargado de clausurar la gala, quiso agradecer a todos los galardonados su “esfuerzo, dedicación y vocación”. Su trabajo, añadió, "nos ha acompañado en los días más difíciles de la pandemia, en aquellas horas de incertidumbre, dudas y preocupaciones que condicionaron nuestra vida. La sociedad comprendió que entre ella y la cultura existe un vínculo más fuerte del que nos imaginábamos porque esta nos enriquece pero además nos une y más en las circunstancias que hemos vivido este último año y medio”.
Además, Ruz sostuvo que este premio “no solo reconoce nuestro esfuerzo y perseverancia sino que, además, aporta visibilidad a nuestro sector, lo eleva y lo dignifica”. Iceta, por su parte, precisó que la “cultura no pide, ofrece: ofrece empleo, riqueza, nuevos horizontes, reflexión crítica, disfrute, diversión, sabiduría, educación, emociones y valores. El patrimonio es memoria, reconocimiento internacional y bienestar emocional”. En este sentido, el Rey Felipe VI concluyó que “la cultura española aporta valor tangible a nuestra economía y moviliza 70.000 puestos de trabajo y es así por la calidad de los productos de vuestra imaginación y creatividad que nos representan tanto dentro como fuera de nuestras fronteras”.