Olga Pericet y Antonio Ruz
El jurado ha distinguido a Antonio Ruz "por ser autor de un lenguaje singular y muy personal" y a Olga Pericet por "su versatilidad escénica y su valiosa capacidad de transmisión"
Antonio Ruz, en la modalidad de creación, y Olga Pericet, en la de interpretación, han obtenido hoy los Premios Nacionales de Danza correspondientes a 2018. Estos premios, que concede anualmente el Ministerio de Cultura y Deporte, están dotados con 30.000 euros cada uno.
El jurado ha distinguido por unanimidad a Antonio Ruz "por ser autor de un lenguaje singular y muy personal, construido dentro y fuera de nuestro país, al frente de su propia compañía e interesantes colaboraciones de diversidad escénica. La última de ellas cristaliza con
Electra, espectáculo creado para el Ballet Nacional de España, en el que armoniza la danza contemporánea con gran calidad". También ha querido destacar "la importancia del pulso musical de sus creaciones y la capacidad artística para abordar diferentes lenguajes dancísticos".
Por su parte,
Olga Pericet ha sido galardonada "por su capacidad de aunar las distintas disciplinas de la danza española, actualizándolas en un lenguaje interpretativo con sello propio, por su versatilidad escénica y su valiosa capacidad de transmisión". El jurado ha destacado como ejemplo
La espina que quiso ser flor o la flor que soñó con ser bailaora, trabajo en el que "sus cualidades interpretativas abordan un lenguaje escénico total".
Coreógrafo y bailarín independiente, Antonio Ruz (Córdoba, 1976) es uno de los creadores más destacados de la danza en nuestro país. Su visión del baile responde a su interés por el carácter más heterogéneo de la danza y a una manera propia de entender el movimiento, más allá de etiquetas disciplinarias. En 1992,
Ruz se traslada a Madrid con una beca para estudiar en la Escuela de Víctor Ullate, que le acabaría abriendo las puertas de la compañía del mismo nombre, donde ejerció como primer bailarín durante ocho años. En 2001 da el salto internacional y entra a formar parte del Ballet del Gran Teatro de Ginebra y más tarde del Ballet de la Ópera de Lyon. En 2006 ingresó en la Compañía Nacional de Danza (CND), bajo la dirección de
Nacho Duato.
Ruz se inicia en el campo de la coreografía con montajes como
Cebolla nf ognion m, presentadas en las Noches de Jóvenes Coreógrafos del Gran Teatro de Ginebra. Otras obras de su creación son
Heidi, Pirilampo y el solo "A", junto a la artista plástica Daniela Presta.
En 2009 funda su propia compañía y presenta trabajos por España, Europa, África y América del Sur. A este periodo pertenecen sus creaciones:
Curvo, No drama, Recreo.01, Ignoto, Ojo y
Libera Me!
Desde 2007 colabora con la compañía Sasha Waltz & Guests, con sede en Berlín, participando como bailarín y coreógrafo, y como asistente de coreografía en las obras
Sacre (2014) y
Orfeo (2014), así como en varios trabajos de Juan Kruz Diaz de Garaio Esnaola o en el proyecto UN/RUHE (2016) con la Junge Deutsche Philharmonie. En el terreno teatral, Ruz ha participado como coreógrafo en obras como
Capitalismo, hazles reír (2013) y
Los Mácbez (2014), de
Andrés Lima, y
Antígona (2015), dirigida por
Miguel del Arco.
Sus creaciones han estado presentes en algunos de los festivales más importantes del país: en junio de 2015 estrena con su compañía
À L'Espagnole, fantasia escénica, junto con la agrupación de música antigua
Accademia del Piacere, dentro del Festival Internacional de Música y Danza de Granada; en julio de 2016 estrena la coreografía
Double Bach sobre una idea original del violonchelista Pablo M. Caminero en el Festival de Teatro de Almagro.
Y en 2017 crea para el Ballet Nacional de España (BNE) la coreografía Electra, con la colaboración de Olga Pericet, un montaje que inauguró este año la programación del
Festival de Mérida. Entre sus próximos proyectos se encuentra el estreno de una nueva pieza,
Presente, que tiene previsto presentar con su compañía el 19 de octubre de 2018 en los Teatros del Canal de Madrid. Ruz recibió en 2013 el Premio El Ojo Crítico de Danza de RTVE.
Por su parte,
Olga Ramos Pericet (Córdoba, 1975) se licenció en danza española en la Escuela Superior de Arte Dramático y Danza de Córdoba. Amplió estudios en Sevilla y Madrid con los maestros: Matilde Coral, Manolo Marín, Maica Moyano, La Toná, José Granero, Cristóbal Reyes y Milagros Mengíbar, entre otros. En 1998, después de haber estado bailando en distintos tablaos de Madrid y Japón,
entra a formar parte de la Compañía Rafael Amargo, con la que estrena Poeta en Nueva York como primera bailarina, el mismo rol que desempeñaría más tarde en la Compañía Rafaela Carrasco durante la puesta de largo de
El amor brujo en la Quincena Musical de San Sebastián.
En 2004 estrena en Madrid como coreógrafa y primera bailarina el espectáculo Bolero, cartas de amor y desamor, que luego llevaría a Barcelona junto a Edith Salazar, con textos de Espido Freire y las actuaciones de Lucía Bosé, Terele Pávez, Antonia Sanjuán y Loles León. Como creadora colabora, entre otros, con
Manuel Liñán, Marco Flores, Daniel Doña y Antonio Ruz en títulos como
Cámara negra, En clave, Chanta la mui, Complot, De flamencas y
Recital. Para el Ballet Nacional de España (BNE) estrena como intérprete y coreógrafa, junto a
Rocío Molina,
Statera (2012) y colabora coreográficamente con Ruz en el espectáculo
Electra (2017).
También firma e interpreta títulos como
Rosa, metal, ceniza, Laberíntica y
La espina que quiso ser flor o la flor que soñó con ser bailaora, uno de sus últimos trabajos coreográficos y como intérprete, que se estrenó en febrero de 2017 en el Festival de Jerez.
Para el año 2019 prepara el estreno absoluto de Cuerpo infinito, en homenaje a Carmen Amaya, que se presentará en los Teatros del Canal el 25 de mayo. Entre otros reconocimientos, Pericet ha recibido el l Premio Extraordinario de Teatro ACE Awards 2016 (Asociación de Cronistas de Espectáculos de Nueva York); el MAX de Artes Escénicas a la Mejor Bailarina Principal por Pisadas (2015) o el galardón de El Ojo Crítico de RNE (2014).
El jurado, presidido por la directora general del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (INAEM), Amaya de Miguel, con la vicepresidencia del subdirector general de Música y Danza, Antonio Garde, ha estado integrado por Olga Baeza, directora y presentadora de
A Compás (RNE); Mercedes López Caballero, periodista y bloguera especializada en danza; Eva López Crevillén, directora del Conservatorio Superior de Danza María de Ávila de Madrid; Manuel Llanes, director artístico del teatro Central de Sevilla; Xosé Paulo Rodríguez Domínguez, director del Teatro Rosalía Castro de A Coruña; Rosa Sansegundo Manuel, catedrática de la Universidad Carlos III de Madrid; Jon Maya Sein, bailarín y coreógrafo, que acude en representación de la Compañía Kukai Danza, Premio Nacional de Danza en la modalidad de Creación en 2017; y Manuel Liñán, bailaor, coreógrafo y último galardonado con este premio en la modalidad de Interpretación.
Los premiados en anteriores convocatorias han sido: Compañía Kukai Danza (Creación) y Manuel Liñán (Interpretación) en 2017, Sol Picó (Creación) y Joaquín de Luz (Interpretación) en 2016, Compañía La Intrusa (Creación), y Rubén Olmo (Interpretación) en 2015, Daniel Abreu (Creación) y María Nazareth Panadero (Interpretación) en 2014, Marcos Morau (Creación) y Isabel Bayón (Interpretación) en 2013, Mónica Valenciano (Creación) y Zenaida Yanowsky (Interpretación) en 2012, Javier Latorre (Creación) y Goyo Montero Morell (Interpretación) en 2011, y Àngels Margarit Viñals (Creación) y Rocío Molina Cruz (Interpretación) en 2010.