Santiago Castelo. Foto: Jaime García
El escritor y periodista extremeño José Miguel Santiago Castelo (1948-2015) ha obtenido a título póstumo el XXV Premio de Poesía Jaime Gil de Biedma, que concede la Diputación de Segovia, por el poemario La sentencia. Es la primera vez que se concede este galardón a una persona fallecida. El veredicto del jurado se ha producido por aclamación según ha manifestado el coordinador del premio, Gonzalo Santonja.Santiago Castelo, que fue director de la Real Academia de Extremadura y subdirector del diario ABC, murió el pasado 29 de mayo víctima de un cáncer. La obra premiada es una crónica de la situación terminal que atravesó en sus últimos días. "Es un canto a la vida desde la muerte y la finitud que se acerca", manifestaba Santonja en el acto público celebrado en la Diputación Segoviana. "La obra es estremecedora y desgarradora tanto por el reflejo del avance de la enfermedad como por ser una crónica de la ejemplaridad".
La sentencia se abre con una cita del propio Jaime Gil de Biedma ('Pero ha pasado el tiempo y la verdad desagradable asoma: envejecer, morir, es el único argumento de la obra') y comienza con el poema que da nombre al libro, que describe el momento en que el poeta recibe la noticia de su situación de boca del doctor. "En el poemario, su autor hace gala del dominio que tenía de la técnica del verso y recoge toda la emoción y la ejemplaridad que le caracterizaba, sin hacer concesiones a la urgencia o la literatura mal construida", explica el coordinador del premio.
Por su parte, Juan Manuel de Prada, miembro del jurado y amigo personal del premiado, ha manifestado que Castelo mantuvo hasta el final en secreto las páginas del libro. "Me dijo que lo había dejado en buenas manos y ahora nos encontramos que era en las del jurado del Gil de Biedma", ha rememorado. El escritor ha tildado la obra como "excepcional", escrita desde la realidad y desgarradora tanto por su enfrentamiento a la muerte como por la paz y el sosiego que a la vez transmite. "José Miguel era extraordinariamente vitalista, de creencias muy profundas, que hacía de la vida una celebración. Por sus convicciones no estaba a la moda y eso ha hecho que el reconocimiento que merece no haya estado a la altura", ha señalado.
Tanto De Prada como Santonja han coincidido en remarcar el regalo que supone que Santiago Castelo decidiera presentar la obra al certamen y despedirse de esta manera. "Allá donde esté, supongo que estará recibiendo todas estas palabras con alegría", ha apostillado el coordinador del galardón.
El fallecido, autor de otras publicaciones como Memorial de ausencias, La sierra desvelada, Siurell o La hermana muerta, cuenta con el Premio 'Fastenrath' de la Real Academia Española y fue presidente fundador del Centro Unesco Extremadura. El fallo del Premio, que está dotado con 10.000 euros y la publicación de la obra por la Editorial Visor, ha sido comunicado a un amigo del ganador.
Por otra parte, el accésit, dotado con 3.000 euros que sufraga Bankia, ha recaído en el escritor y profesor Andrés Barba (Madrid, 1975), por El vientre de la ballena. Según Santonja, aunque son muchas las diferencias, este poemario tiene un punto de contacto con la obra de Santiago Castelo, pues su autor repasa la crónica vital de su padre, con el que mantiene conversaciones que no tuvieron lugar en vida.
Andrés Barba, licenciado en Filología Hispánica por la Universidad Complutense de Madrid, es también editor, periodista freelance y traductor y cuenta con becas como la de la Academia de España en Roma o la HALMA de la Unión Europea, así como numerosos premios, distinciones y méritos.
En total, a las edición número 25 del Jaime Gil de Biedma se han presentado 938 libros llegados desde 36 países distintos, prácticamente todos los de habla hispana y otros de otras lenguas. España encabeza el número de originales con 526, seguida por Argentina con 78, México con 68, Colombia con 44, Cuba con 39 y Perú con 23. Santonja destacó tras la reunión del prejurado la calidad de los trabajos seleccionados y subrayó que el premio es "absolutamente hispanoamericano", pues han llegado libros desde Canadá hasta Brasil, y, como viene siendo habitual, alguno de Israel escrito en ladino, el español de los judíos sefardíes.
"El galardón es muy plural, tanto en temas como en técnicas, estilos y preocupaciones. Todas siguen suspirando por el Gil de Biedma. Se han presentado libros clásicos, muy innovadores, con tono provocativo, con matiz de denuncia, pero también los hay desoladores", explicó. El Premio contará con una amplia programación de actividades con motivo de su 25 aniversario, entre ellas la edición de una antología poética en la que se recogerán poesías de todos los ganadores y finalistas. Tendrá por título, En el nombre de hoy.