Discursos para hacer frente a la revolución de los contenidos
El Seminario europeo sobre la digitalización del material cultural reúne a 160 expertos en busca de soluciones
13 abril, 2010 02:00ELCULTURAL.es
Bajo el título 'La Digitalización del material cultural. Bibliotecas digitales y derecho de autor', la ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, inauguró ayer un seminario europeo que pretende aclarar las dudas en torno a la digitalización de la cultura y derechos de autor y analizar el lugar que ocupa en la sociedad europea del conocimiento. Representantes de los 27 Estados miembros y la Comisión Europea, de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), de las entidades de gestión españolas y europeas de derechos de propiedad intelectual, de las bibliotecas nacionales de los países miembros, expertos de las industrias de contenidos y representantes de asociaciones de usuarios, se dan cita estos días en la Biblioteca Nacional. En total 160 participantes centran sus ponencias y debates en torno a la biblioteca Europeana, los nuevos modelos de oferta digital legal y su repercusión en el acceso a la Cultura, y en la protección de los derechos de los autores en los diferentes Estados miembros.
En las intervenciones de la primera jornada hubo un poco de todo. Anne Bergman-Tahon, de la Federación de Editores Europeos, pronosticó "que en 2005 el libro digital apenas llegará al 15% del mercado". Aldo Olcese, presidente de la Coalición de Creadores e Industrias de Contenidos, afirmó rotund: "Nos hemos negado a hacer una oferta legal sin una legislación que nos proteja". Y así las cosas, Eduardo Bautista, de la SGAE, fue el encargado de poner cifras a la piratería aportando el dato de las "2.400 millones de descargas ilegales de obras protegidas en 2008". Jesús Badenes, directivo de Planeta, destacó la necesidad de regular estas descargas ilegales para "no cargarnos la gallina de los huevos de oro", aunque está convencido de que el papel de las editoriales seguirá siendo vital para ofrecer "contenidos de calidad". También en su discurso González-Sinde aludió a este aspecto fundamental en materia de digitalización: "La única solución es respetar las reglas. En caso contrario se terminarán los contenidos".
La red de libros
Javier Celaya, fundador de la revista dosdoce.com, advirtió de que "la industria editorial no se puede empecinar en mantener el ecosistema del libro. Eso es insostenible", e insistió en que "la clave del negocio digital está en los servicios y el boca a oreja que suponen las redes sociales". Desde Open Book Alliance, competidor de Google Books, Peter Brantley habló del pago de libros en función de su lectura: "La gente irá accediendo a los contenidos y pagando por ellos a medida que vaya leyendo. No se pagará por un contenido en un formato cerrado al que se accede a través de una empresa, sino una red de libros a la que se podrá acceder con una conexión a internet". También habló de que esto evitará a los usuarios la descarga de "archivos muy pesados", si bien precisamente uno de los problemas a los que se enfrentan los libros frente a las películas, es que la descarga de los archivos, por denso que sea el libro, es prácticamente inmediata.
La representante del Parlamento Europeo, Marielle Gallo, reconoció que la "Unión Europea ha reaccionado tarde ante la revolución digital" y propuso "crear licencias multiterritoriales o una gestión colectiva más eficaz", en base a la conveniencia de poner en marcha políticas conjuntas de la Unión Europea, otro de los debates clave que ocupan este seminario que se prolongará hasta el miércoles 14 de abril.
En fin, al término de la primera jornada no hay sino más de lo mismo, muchas reflexiones sobre el pasado y divagaciones sobre el posible futuro, algunos datos, pocos acuerdos y ninguna solución, que es lo realmente preocupante.