Cine y surf, más allá de los tópicos
No solo palmeras, puestas de sol impresionantes y chicas en bikini aún más impresionantes. El surf es más que eso, mucho más de lo que la mercadotecnia ha inyectado en el imaginario popular durante décadas. Para sacudir los tópicos que envuelven al más estético de los deportes -y, quizá por ello, uno de los más cercanos al mundo de la creación audiovisual-, llega este fin de semana a la Cineteca de la capital la primera edición del Madrid Surf Film Festival, organizado por los responsables del Canarias Surf Film Festival. De entrada, la mera ubicación del evento ya echa por tierra el cliché de que el surf es solo para quienes viven en la costa. Entre los colaboradores del festival hay una asociación (La madrileña de surf) y un club (Up Surf Club) con sede en la ciudad que se encargan de desmentirlo, aunque haya que comerse cuatro horas de carretera hasta las olas más cercanas y regresar a tiempo para estar a las 8 en la oficina el lunes.
En segundo lugar, la programación -eminentemente documentales pero también películas de ficción e híbridas- se encarga también de mostrar la cara menos glamurosa del surf con películas como Freezing y Faroes. La primera narra la búsqueda, a partir de una foto del abuelo del protagonista, de una ola perfecta en los gélidos mares de Islandia. La segunda transcurre no lejos de allí, en las salvajes Islas Feroe. Los tráileres de ambos filmes pueden verse sobre estas líneas. Tras ellos, el de No regrets, que cuenta la historia de alcoholismo y rehabilitación del surfista Ricky Basnett, uno de los mejores surfistas sudafricanos de su generación, que tras fracasar en su segundo año en la ASP World Tour pasó ocho años intoxicado y alejado del océano antes de retomar su gran pasión.
Estas y otras películas, en su mayoría cortos y mediometrajes y algunas de ellas premiadas en festivales de Nueva York, San Diego, Londres o Sidney, podrán verse en la Cineteca de Matadero Madrid entre el 27 y el 29 de mayo, en sesiones de 90 minutos a 3,5 euros. Además, el festival cuenta con una programación paralela que incluye conferencias sobre la industria del surfing y la protección de los océanos, una exposición fotográfica y talleres de carving, la modalidad de skate que imita los giros realizados en la pared de la ola.