Image: Los productores de Terminator Salvation se declaran en bancarrota
Los productores de Terminator Salvation se declaran en bancarrota
A pesar de la rentabilidad de la cinta, no pueden asumir las deudas, un crédito financiado por nombres como el de Christian Bale y Schwarzenegger
20 agosto, 2009 02:00Un fotograma de Terminator Salvation
EFELos productores de Terminator Salvation se declaran en bancarrota por no poder pagar las deudas generadas por la película, un crédito financiado, entre otros, por Christian Bale y Arnold Schwarzenegger, informa el diario Los Angeles Times.
Los propietarios de los derechos de la saga cinematográfica Terminator, Derek Anderson y Victor Kubicek, se acogieron el martes a la ley de quiebras para sus tres empresas (T Asset Acquisition Company, Dominion Group y Halcyon Holding Group) con las que pagaron Terminator Salvation (2009), a pesar de la rentabilidad del filme.
La producción, que contó con un presupuesto de 200 millones de dólares, recaudó casi 370 millones de dólares en todo el mundo, una cifra a la que deberá sumarse lo que obtenga por la distribución en DVD, formato en el que aún no ha salido al mercado, y otros ingresos menores.
La bancarrota se presentó un día después de que Anderson y Kubicek denunciaran a sus inversores por presionarles para tomar una serie de decisiones equivocadas que les llevaron a una situación que califican de embargo ilegal sobre sus propiedades.
La lista de compañías y particulares que financiaron Terminator Salvation incluye a nombres conocidos en Hollywood, aunque no ha trascendido la cantidad que aportaron al filme. Sí se conoce que el fondo de capital riesgo Pacificor de Santa Barbara concedió 30 millones de dólares para la compra de los derechos de Terminator y 9 millones más para los gastos de la película.
Entre los afectados por las consecuencias de la bancarrota están el protagonista de "Terminator Salvation", el actor Christian Bale, y el director de la cinta, McG, así como el gobernador de California, Arnold Schwarzenegger, estrella de las primeras historias de la saga.
Al acogerse a la ley de quiebras, Anderson y Kubicek deben presentar un plan para resolver sus deudas.
