Las prisiones de Abrams
Después del fiasco de Undercovers (debo reconocer que no he podido pasar del tercer episodio), y con la tercera temporada de Fringe dando claras señales de agotamiento (con capítulos muy irregulares, aunque todavía capaces de mantener en vilo al espectador), J. J. Abrams ya desarrolla su siguiente serie de televisión, Alcatraz, cuyo episodio piloto emitirá Fox en septiembre. La prisión de la bahía de San Francisco despierta de por sí muchos precedentes audiovisuales, pues han sido numerosas las ocasiones en las que el cine se ha adentrado en sus pasillos, con Don Siegel y John Frankenheimer ocupando puestos de honor, pero no debemos dudar ni un instante de que la serie de Abrams no será una convencional trama carcelaria sobre presos en fuga, ni que se parecerá un ápice a la serie Prison Break.
Las habituales especulaciones que se han ido publicando desde que se anunció el proyecto -viajes en el tiempo, proyecciones astrales, magia antigua...-, aseguran que el misterio y los secretos prevalecerán sobre los elementos comunes del género carcelario. De la isla de Lost a la isla de Alcatraz, Abrams tendrá la oportunidad de comprobar hasta qué punto el final de Lost ha provocado la espantada de un amplio sector de sus fans, que quizá ya no estén dispuestos a invertir seis años siguiendo una serie cuyo final les provocó grandes decepciones. Lógicamente, en diversas entrevistas, Abrams se ha mostrado muy enigmático y elusivo con la trama de Alcatraz (que ya tiene su propio blog), si bien ha dicho lo suficiente como para avivar hipótesis y precipitadas conclusiones. Sí parece bastante claro, como es de esperar, que la serie seguirá explorando la vertiente fantástica predilecta de Abrams: los universos y líneas temporales de coexistencia paralela.
Se ha anunciado que la serie se centrará en un grupo de guardias y prisioneros de Alcatraz que súbitamente se desvanecen para reaparecer, cincuenta años después, en el tiempo presente. Ha trascendido también que a unos agentes del FBI se les asigna el caso para que esclarezcan el misterio de las desapariciones. Con estas premisas, asoman evidentes conexiones con Lost, Alias y Fringe: un grupo de personas que en un territorio de confinamiento (sea una isla o una prisión) experimentan desplazamientos en el tiempo, y agentes de la ley especializados en resolver casos de naturaleza extraordinaria. El reparto de Alcatraz, nos traerá de vuelta a la pequeña pantalla a Jorge García, el Hurley de Lost, interpretando a un geek hippy que es el mayor experto del mundo en Alcatraz. Le acompaña la desconocida actriz Sarah Jones en papel de la policía Rebecca Madsen, Santiago Cabrera (de Héroes) interpretando a su novio, el veterano Sam Neill como director de una agencia gubernamental, y Jonny Coyne (que tiene un papel en Undercovers) como el alcaide de la prisión. Estamos a la espera de un trailer o una primera promo de la serie, pero de momento puede verse un vídeo del rodaje del episodio piloto.
CODA: El porvenir inmediato del prolífico J. J. Abrams no se detiene en Alcatraz. Tiene otras series en desarrollo para diversas cadenas -Person of Interest, Odd Jobs y Pulp-, y para la pantalla grande estrenará en verano su segundo largometraje, Super 8, cuyo trailer basado en la generación de expectativa mediante el ocultamiento tanto recuerda al terrorífico trailer de la primera entrega de Alien. Afortunadamente, tenemos Abrams para rato.