Clara Sánchez
"Me sorprende que parezca excepcional que haya mujeres que escribamos"
28 junio, 2000 02:00Quédense con su cara y con su nombre. Pero sobre todo con su escritura. Clara Sánchez ha conseguido con su novela Últimas noticias del paraíso el premio Alfaguara de este año, aunque el galardón no añade ninguna cualidad literaria, sólo confirma una destreza nata para retratar agudamente la realidad
Pregunta: El premio Alfaguara, la promoción, las entrevistas, los viajes, el reconocimiento... ¿es lo que quería?Respuesta: Un escritor lo que en primer lugar quiere es escribir. En segundo lugar, que le lean. Para esto necesita que se sepa que existe, o sea, necesita promoción, entrevistas y todo eso.
P: ¿Y eso estimula o intimida?
R: Esto me llega después de haber escrito seis novelas con las que he madurado tanto literaria como vitalmente. Me estimula, no me intimida.
P: ¿Qué significa esta obra respecto a sus cinco novelas anteriores?
R: Supone la culminación del tratamiento de la actualidad ya planteado en las anteriores. Cuando la terminé pude contemplar con la ilusión de la claridad el mundo según lo veo.
P: En la obra, el protagonista va desgranando los hechos fantásticos del día a día. ¿Qué es lo más fantástico que hay en la cotidianeidad de Clara Sánchez?
R: Tener conmigo y conocer de vez en cuando a seres maravillosos, que le añaden gracia a la vida. El premio ha sido fantástico, la verdad.
P: ¿Cuánto de usted hay en Fran, el protagonista?
R: Mucho. Mi incertidumbre, perplejidad y asombro. Creo que nunca voy a llegar a acostumbrarme a lo que pasa todos los días. La realidad es avasalladora.
P: ¿Qué es lo más inquietante que para usted hay en la realidad?
R: El tiempo, que la hace irreversible y que obliga a ir dejando a los lados otras posibilidades de vida y que nos hace vulnerables al sentimiento de pérdida.
P: Su obra está plagada de seres que se mueven en el límite de la desesperación. ¿Esa visión es ficción o es reflejo de lo que usted ve?
R: No soy una desesperada, aunque alguna vez sí he sentido
desesperación. En los personajes no se descargan todos los aspectos de la personalidad propia, sino aquellos que sirven para revelar su lado más humano.
P: "Somos los seres más necesitados del planeta". ¿De qué está necesitada Clara Sánchez?
R: De todo, de lo material y de lo afectivo, y ambas satisfacciones suelen provenir de los otros. Ni soy autosuficiente ni quiero serlo, ya tiene uno bastante con la soledad que no puede evitar.
P: ¿De qué libro suyo y de cuál ajeno le hubiera gustado ser protagonista?
R: Casi todos los personajes que me gustan sienten una pesadumbre de la que a mí me gustaría librarme en la vida real. Está la narradora de Las palabras de la noche, de Natalia Ginzburg, el "Alien" de mi novela, o Yu. Quizá los personajes con los que de verdad me identifico son los de John Doss Passos, perdidos en el azar de sus propias existencias, con el dinero vigilando nuestros actos.
P: Desde el mirador interior de Clara Sánchez, ¿qué no se pierde de vista?
R: No puedo vivir sin alguien a quien querer.
P: ¿Cuál es su paraíso?
R: Unas veces es una cierta excitación que abarca todos los órdenes de la vida, como una borrachera. Y otras descansa en la armonía, el sentir la mente despejada y libre.
P: ¿Y cuáles son las últimas noticias que de él ha recibido?
R: El que no haya habido ninguna mala es ya de un valor incalculable, un buen lecho para disfrutar de las buenas.
P: ¿Cuál ha sido la última decepción literaria que ha sufrido?
R: No sé si no la he tenido o es que no me acuerdo. Sufro tanto las
cosas en su momento que acaban perdiendo la importancia.
P: ¿Qué es lo que define su carrera literaria?
R: La búsqueda, el no conformarme, el no escribir por escribir.
P: ¿Recuerda qué la llevó a escribir la primera vez?
R: No, pero no debió de suponer un antes y un después en mi vida. Siempre he tenido un papel y un bolígrafo en la mano. La persistencia del hábito es lo que quizá te hace ser escritor.
P: ¿De qué escritores ha aprendido este oficio?
R: Son muchos, pero de ellos he aprendido que uno tiene que encontrar su manera de convertirse en palabras nunca de una manera concluyente, y que escribir bien no basta.
P: Se habla constantemente del
boom de las escritoras. ¿Este supuesto fenómeno existe realmente?
R: Ni ha habido boom de escritoras ni lo hay. Me sorprende que parezca tan excepcional que haya mujeres que escribamos.
P: ¿Cuánto de marketing hay en esa nueva consigna?
R: No soy consciente de este fenómeno. Nunca pienso en mí como parte de un grupo de mujeres que escriben. Me veo recorriendo un camino que nadie puede hacer por mí.
P: ¿Cuál es la peor y la mejor etiqueta que le pueden poner a un escritor?
R: Las etiquetas siempre limitan la proyección literaria de un escritor. Una buena etiqueta podría ser la de "escritor de culto", pero puede retraer a un buen número de lectores.
P: ¿Cuál ha sido el reto más difícil en su carrera?
R: Hablar de lo que siento como si no lo sintiera yo.
P: ¿Qué famoso libro le hubiera gustado haber escrito?
R: Sin duda El extranjero, de A. Camus, seguido de La metamorfosis, de F. Kafka, y de el Libro del desasosiego, de F. Pessoa.