Novak Djokovic se ha quitado un enorme peso de encima. La relajación de las restricciones en Australia le han permitido volver a allí donde fue feliz, aunque pasase a ser juzgado radicalmente por su negativa a vacunarse contra la Covid-19. Este enero disputará el Open de Australia, una cita particularmente marcada en su calendario.
El serbio tendrá en él su primera oportunidad para igualar a Rafa Nadal en el número de Grand Slams. 22 tiene el español por los 21 de máximo acechador, una cifra con mucha importancia para los dos, pues el que la tenga se acercaría mucho a ese singular título de mejor tenista de la historia.
Por ello, Novak Djokovic no ha perdido ni un solo minuto de su tiempo y ya está en Australia para prepararse a fondo de cara al Open de Australia. El de Belgrado ya se está aclimatando a las tierras oceánicas para dar su mejor versión tras cerrar la temporada en las ATP Finals de Turín. Con únicamente un mes de descanso, el exnúmero 1 del mundo ya empieza a afilar sus garras para el asalto.
Y no es baladí que lo está preparando a conciencia, pues el torneo que se disputa en Melbourne podría considerarse uno de sus preferidos, un fetiche en su calendario. En el Open de Australia, Djokovic ha gestado gran parte de los Grand Slams que posee en sus copiosas vitrinas. Un total de 9 ha levantado en la Rod Laver Arena.
Por ello, ya se ha instalado en las antípodas españolas y así preparar, prácticamente sin fallo, su asaltó a la décima corona australiana. Djokovic ya tiene una hoja de ruta predefinida para igualar a Rafa Nadal en la cima de tenistas con más Grand Slams y su plan ya ha empezado tras regresar al país que le vetó la entrada y le deportó hace tan solo un año.
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Adelaida, el inicio
Todavía faltan casi 20 días para que comience el Open de Australia, sin embargo, eso no exime a los tenistas de viajar apenas unos pocos días antes. Las exigentes condiciones del país oceánico, marcadas por las altas temperaturas y la elevadísima humedad, hacen que los deportistas tengan que tener un periodo de aclimatamiento previo a la disputa del torneo.
Y Novak Djokovic, al igual que sus rivales, ya ha comenzado con él. El serbio pasará la Nochevieja en Australia, ya plenamente concretado en lo que será su primera prueba de la temporada. Allí tomará contacto al máximo nivel en las pistas de Adelaida, el torneo ATP 250 que se disputa a casi 800 kilómetros de Melbourne, aunque con unas características prácticamente similares.
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A partir de 2 de enero y hasta el 8, Djokovic, dependiendo de las rondas que avance y los partidos que gane, tendrá un test fantástico para calibrar su nivel antes de tratar de destronar a Rafa Nadal, actual campeón del primer Grand Slam de la temporada. Lo único que está claro es que Nole es el primer cabeza de serie.
Eso sí, también ha escogido un torneo donde tendrá rivales de entidad. Nombres como Daniil Medvedev, Felix-Auger Aliassime o Andrey Rublev pelearán con él por anotarse el primero de la temporada, aunque el principal objetivo es irse a aclimatando a las sensaciones australes.
Y es que en comparación a Europa, las características de las pistas favorecen enormemente al serbio. Calidad a parte demostrada de sobra, Djokovic ha sido el tenista que mejor se ha adaptado a la Rod Laver Arena y demás pistas que están presentes en el Open de Australia. El de Belgrado ha casi monopolizado las victorias allí desde que se hiciese con su primer entorchado en 2008, acumulando nueve en catorce años. Una auténtica barbaridad.
Por ello, el primer Grand Slam de la temporada se antoja como el mejor evento para igualar a su máximo rival en el circuito, Rafa Nadal. El español, que también volvió a levantar los brazos en 2022 tras trece años sin lograrlo desde su primer y único triunfo allí en 2009, será su gran oponente.
Es más, hasta Nadal le mandó un claro mensaje antes de iniciar su camino, que será diferente al de Belgrado. El español comenzará a calentar su muñeca en la United Cup, evento por equipo y donde compartirá equipo con Paula Badosa. "Es bueno para el tenis que esté, posiblemente también para los aficionados"
Cambios en el staff
Novak Djokovic también ha hecho una pequeña revolución en su equipo antes de afrontar una cita tan importante para él. Dicen que "año nuevo, vida nueva" y eso ha sido lo que ha debido pensar el serbio, que ha hecho un notable cambio en la estructura de su staff.
Ulises Badio ha sido a lo largo de varios años el fisioterapeuta de confianza de Novak Djokovic, pero a poco días para que de comienzo este 2023 el preparador argentino no acompañará más al exnúmero 1. El considerado "manos mágicas" por el tenista ha decidido terminar su relación con él pese a ser uno de sus grandes apoyos durante las últimas temporadas, donde también estuvo presente en el momento donde le deportaron tras no vacunarse el pasado año.
El argentino se hizo viral hace apenas un mes durante la ATP Finals, donde fue el autor de una extraña bebida para Djokovic. Por el momento, el serbio ya ha emulado a Rafa Nadal, que también cambió a Francis Roig, acompañante durante prácticamente toda su carrera, por Gustavo Marcaccio.
Una reacción en cadena que prácticamente no se ha hecho esperar y que está meditada para lograr el máximo rendimiento de cara a un 2023 crucial para Djokovic. El actual número cinco del mundo ya ha visto cómo las oportunidades se le agotan ante la continuidad en el circuito de Rafa Nadal y la irrupción de grandes tenistas como Carlos Alcaraz. De momento, el Open de Australia es su primera parada.