Rafa Nadal y Novak Djokovic podrían considerarse los dos mejores tenistas de la historia. Dos auténticos titanes que devoran récords prácticamente cada vez que saltan a la pista, dos jugadores que tienen en sus muñecas una asombrosa calidad que han sabido gestionar con una extraordinaria capacidad física. Una receta llena de éxito.
Junto a Roger Federer, los tres formaban uno de los mejores Big Three visto en cualquier deporte. Sin embargo, con el suizo fuera de la ecuación, un elemento desaparece y ya solo queda por resolver una incógnita: saber quién es el mejor de la historia. Pese a lo sencillo que pueda parecer, ninguno de los dos da su brazo a torcer.
Si algo ha caracterizado a Rafa Nadal y Novak Djokovic es su capacidad ganadora a lo largo de sus carreras. Por ello, 2023 supone una excepcional piedra de toque para saber si el pulso que mantienen se puede resolver. Ninguno de los dos ha defraudado hasta el momento, tampoco pretenden hacerlo.
De ahí, que hayan triunfado desde sus inicios en el mundo del tenis. Desde su salto al profesionalismo en 2001 para el español y en 2003 para el serbio, siempre han estado al más alto nivel. Desde que se instaurasen en la élite, ninguno ha sido capaz de darle la espalda, demostrando que se irán cuando ellos quieran y no cuando los echen.
Desde hace varias temporadas, Djokovic y Nadal mantienen una agónica batalla por ser el tenista con más Grand Slams. De momento y por un ajustadísimo margen, la moneda está del lado del español. Con los dos conseguidos en 2022 en el Abierto de Australia y Roland Garros aumentó su renta respecto al serbio, que únicamente le pudo descontar en la hierba de Wimbledon.
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2023 se antoja con una continuación de esta rivalidad que una vez supera los límites de la pista se convierte en amistad y devoción del uno por el otro, pues, al fin y al cabo, llevan casi tres lustros viéndose las caras en las grandes torneos. Un nuevo capítulo de esta aventura aguarda una vez más.
Rivalidad límite
Un simple número define todo lo que hay detrás de Djokovic y Rafa Nadal. Se han visto las caras hasta en 59 ocasiones y el balance cae del lado del de Belgrado por un exigüísimo 30-29. Una clara demostración que han sido dos de los tenistas más regulares, ya que verse tanto las caras a lo largo de los torneos se antoja casi misión imposible.
Es más, 18 de ellas han sido en los Grand Slams. Sus posiciones de principales cabezas de serie han hecho que se hayan visto las caras en rondas muy avanzadas. El Abierto de Australia, Roland Garros, Wimbledon y el US Open han sido el habitual campo de batalla de estos dos magníficos jugadores.
Ese carácter ganador les ha permitido grajearse gran cantidad de títulos, ni siquiera las lesiones le han hecho frenarse en su carrera de fondo. Porque por cercanas que parezcan sus retiradas, especialmente la de Nadal, aún tiene mucha cuerda para rato. Con muchas cuentas pendientes, todavía esperan varios episodios de estos dos titanes del tenis mundial.
Ni siquiera Roger Federer, el otro gran estandarte de los últimos años, se ha visto tanto las caras con ellos. Con Rafa, disputó un total de 40 partidos con balance favorable al español y, con Nole, se enfrentó en 50 ocasiones con 27 victorias para el de Belgrado.
"Federer, Djokovic y yo nos hemos empujado al límite, a mejorar, a estar siempre queriendo y queriendo más", explicaba Rafa Nadal en una entrevista a MARCA hace tan solo unos días, demostrando que ha sido una constante su lucha a lo largo de los años.
2023, el año
Con el fin de sus carreras acechando, pues ya tienen 35 años (Djokovic) y 36 (Nadal), el año 2023 se presenta como su último asalto. Las lesiones recurrentes del balear y su paternidad podrían hacerle dar un paso al lado en el circuito y romper la hegemonía que han mantenido junto a su amigo en las pistas.
Ambos luchan por ser el mejor de la historia y, para ello, saben que es imprescindible tener en su poder un récord: el de más Grand Slams. Por el momento, la corona recae sobre Nadal, que cuenta con 22 en su zurrón tras el doblete conseguido en 2022 con el Abierto de Australia y el Roland Garros.
Sin embargo, Djokovic ha demostrado a lo largo de su carrera que nunca se rinde. El serbio tendrá por delante cuatro Grand Slam la próxima temporada para batir al español. Con las restricciones de la Covid-19 como historias del pasado, Nole podrá competir en Australia y, casi seguro, en Estados Unidos.
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Rafa Nadal tendrá como gran aliciente la gira de tierra batida, especialmente fructífera para él. Además, tendrá las energías extra que le proporcionará jugar en Australia para defender su corona de la temporada anterior. "Tengo muchas ganas de que llegue 2023 y que compartamos grandes momentos de nuevo", expresaba poco después de recibir el premio del tenista favorito del público por primera vez en su carrera.
Una muestra del hambre y la ambición que tiene el balear por seguir sumando títulos a su vitrina y alcanzar ese estatus de mejor tenista de la historia. Pese a que Novak Djokovic no se lo pondrá nada fácil, lo cierto es que la capacidad de resistencia del español será puesta a prueba por el que haya sido quizás su rival más duro a lo largo de sus 21 años de carrera.
A partir de la United Cup, primer torneo que disputará Nadal para coger el tono de cara a 2023, se podrá vislumbrar parte de lo que podrá suceder. Un último baile en una de las batallas más icónicas del mundo del deporte, Nadal-Djokovic, Djokovic-Nadal, el duelo está servido.