El deporte inglés y el deseo de un himno propio: el 'God Save the Queen' vuelve a estar en duda
Utilizado por primera vez en los Juegos de la Commonwealth de 2010, en 2022 vuelve a resonar el himno 'Jerusalem' en los logros de Inglaterra.
9 agosto, 2022 02:15No hay ceremonia deportiva en el que la interpretación de los himnos no tenga su momento especial guardado durante el evento en cuestión. Da igual que se hable de la Fórmula 1, de un partido de fútbol o incluso de los Juegos Olímpicos. Pese a la tradición y lo emotivo, no hay que olvidar, por ejemplo, cómo los jugadores de la selección de Italia se dejaron el alma cantando 'Il Canto degli Italiani' durante la pasada Eurocopa.
La Azzurra acabó asaltando Wembley. Y no es casualidad que se dijera que los italianos marcaban el primer gol durante el himno. Precisamente, el título se lo llevaron en el templo del fútbol inglés y es en este país donde regresa la polémica por el himno nacional. En Inglaterra se utiliza el 'God Save the Queen', al igual que en el resto de países que forman Reino Unido.
Sin embargo, esto puede tener las horas contadas. Desde Inglaterra se remueve en el seno del deporte el debate sobre si es la hora de tener un himno propio. Y esto se ha confirmado en los Juegos de la Commonwealth. En estos, se ha podido escuchar el himno Jerusalem, el cual ya fue utilizado en la misma cita deportiva hace dos años, en el 2010.
Este mencionado debate llega por la siguiente cuestión: ¿qué sentido tiene que los diferentes países que disputan los Juegos de la Commonwealth tengan el mismo himno? Cuando se habla de JJOO y es Reino Unido el representante, la lógica impera que sea el 'God Save The Queen' el himno de todos los británicos, pero cuando Inglaterra, Escocia o Gales van por separado... la cosa es diferente.
Así las cosas, por ejemplo, Escocia tiene 'Flor de Escocia'; Gales cuenta con 'Hen Wlad Fy Nhadau' o 'Land of my Fathers'; o Irlanda del Norte dispone de 'Londonberry Air' (más conocida por la melodía 'Danny Boy'). En Inglaterra es 'Jerusalem', aunque no de manera oficial.
Sin embargo, durante los presentes Juegos de la Commonwealth, que se están celebrando en Birmingham, el himno que se ha escuchado por los logros de los ingleses ha sido 'Jerusalem' en lugar de 'God Save The Queen'. Algo que han aplaudido mucho los aficionados.
Lo curioso es que en los partidos de cricket de Inglaterra, por ejemplo, siempre se escucha 'Jerusalem' en lugar del tradicional 'God Save The Queen'. Pero no en los partidos de la selección de fútbol. Y eso que los propios ingleses respaldaron la primera melodía en el año 2010.
Fue por aquel entonces cuando se lanzó una encuesta sobre el himno que debería utilizar Inglaterra cuando compitiese como una entidad única, no junto a Reino Unido. Había varias opciones. 'Jerusalem' arrasó con el 52 por ciento de los votos por el 32 por ciento de 'Land of Hope and Glory' y el 12 por ciento de 'God Save The Queen'.
División política
Como en todo, la política también tiene su parte en el debate. Fue ya hace unos años, en 2015, cuando Toby Perkins, del Partido Laborista, lanzó una propuesta a la Cámara de los Comunes sobre la adopción de un himno único para Inglaterra. Y que este fuese, además, 'Jerusalem'. Es decir, que el himno pasara de ser oficioso a oficial.
Solo en el cricket y en los Juegos de la Commonwealth se utiliza 'Jerusalem' como himno de Inglaterra, en el resto de competiciones se usa 'God Save The Queen' como propio. "Con un himno propio, se restablecería la idea de que Reino Unido es una unión de cuatro países independientes con sus propias identidades", defendió Perkins.
Sin embargo, desde el Partido Conservador se mostraron contrarios desde el principio a que la modificación tuviese lugar. Este sector cree que 'God Save The Queen' es el himno que debe representar a Inglaterra porque "no hay un mayor placer para un inglés que escuchar nuestro propio himno nacional, un himno nacional para todo el país, para todo Reino Unido".
Jerusalem
Como hemos visto, el debate se ha arrastrado durante la última década, pero 'Jerusalem' tiene mucha más historia detrás. Su letra proviene de un poema de William Blake de 1808. Después fue Hubert Parry el que convirtió los versos en melodía ya en el año 1916. E incluso se dice que el Jorge V, el rey en aquel entonces, prefería 'Jerusalem' al himno nacional real de Gran Bretaña.