El año 2022 se presentaba como el momento idóneo para el reseteo de Marc Márquez. El piloto español que se adueñó de los títulos de MotoGP y que fue capaz de plantarle cara a leyendas del motociclismo como Valentino Rossi necesitaba recomponerse tras un 2021 para el olvido. Las lesiones, las caídas y los blandos resultados hicieron dudar de si se volvería a ver al mejor Márquez. Y, por el momento, las dos primeras citas del 2022 no han sido satisfactorias. Los fantasmas del pasado vuelven.
Márquez finalizó quinto en el GP de Qatar dejando buenas sensaciones, pero lejos de la cabeza de carrera. Rápidamente tocó pasar página y centrar todos los esfuerzos en el GP de Indonesia. Pero, una vez más, el peor de los desenlaces lo ha protagonizado Marc. El de Cervera sufrió un duro accidente durante el warm up. Una caída, un salto por los aires y un golpe complicado en la cabeza que hizo saltar las alamar. Por suerte pudo salir por su propio pie, pero el impacto fue suficiente para que no compitiera.
"Estamos bien después de la fuerte caída que hemos tenido esta mañana", reconoció Márquez a los pocos minutos en sus redes sociales. Pero "por precaución y para no correr más riesgos", se optó por que no corriera en el circuito. Según los médicos del Mundial, el español sufrió un "politraumatismo y un traumatismo craneoencefálico con consciencia inestable" que le dejará un día en obsersación. Suficiente para apartarle de la competición del fin de semana.
Así las cosas, el balance de Marc Márquez tras dos carreras está muy lejos de lo que preveía. Un quinto puesto y una ausencia en el inicio del Mundial que debía servir de resurrección para el de Cervera. La atención está puesta ahora en su estado de salud, en la forma en la que manejará la situación el piloto y en la tercera carrera que se desarrollará en el asfalto de Argentina.
La lucha contra la retirada
Podría parecer exagerado decirlo, pero es la realidad. Marc Márquez se ha enfrentado a la posibilidad de una retirada en dos ocasiones durante el último año. La primera llegó con esas constantes lesiones en el hombro, con tres operaciones de por medio, que le hicieron dudar de si podría subirse de nuevo a la moto. La segunda, la más reciente y también muy complicada, por la diplopía. Ambos retos los superó, pero el poso de ese infierno sigue ahí.
El de Repsol, cabe recordar, tuvo que pasar por quirófano hace dos Mundiales tras una dura caída en Jerez. Márquez forzó cuando no debía y acabó empeorando su situación. Pasó tres operaciones, la última de más de diez horas, e inició una larga recuperación alejado de las pistas. Según indicó, vivió momentos de notable incertidumbre por las complicaciones físicas que le surgían.
La retirada siempre estuvo ahí. No era una opción directa, pero si el físico lo dictaminaba no había otra posibilidad. "Sí es cierto que estos meses tenía miedo de no volver a subirme a una moto o que el brazo no me quedase bien", indicó en su día. Pero acabó trabajando, recuperándose y volviendo para competir en el Mundial 2021. No todas las carreras ni al mejor nivel, pero sí para acallar los rumores.
Ese Mundial que ya comenzó mal por su ausencia en las primeras carreras acabó de la misma manera. Marc sufrió una caída que, tras un golpe en la cabeza, le provocó una diplopía. En resumidas cuentas, un problema de visión que le hacía ver doble. Una situación incompatible con competir y que ya había atravesado años atrás. De nuevo, si no se encontraba un remedio adecuado, podría verse obligado a una retirada.
Todo ello lo ha superado Marc. En 2021 logró cuatro podios y tres de ellos con una primera posición. En 2022 no ha comenzado bien, cuenta con la presión de tener que volver a ganar y el miedo de que un golpe pueda provocarle nuevamente esa diplopía. Pero cuenta con el apoyo de Repsol y con la experiencia de haber lidiado con las situaciones más complicadas para cualquier deportista.
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