El mercado de fichajes siempre ha sido una ventana deseada por muchos equipos para reforzar sus plantillas en mitad de la temporada. El dispendio en los últimos años ha sido notable ante el floreciente crecimiento económico que ha habido en numerosos clubes, especialmente los de la Premier League o de Saudi Pro League.
Además, la necesidad ha hecho que en reiteradas ocasiones se tenga que pagar un alto coste al pasar por caja. Sin embargo, la tónica ha cambiado por completo después de vivirse un verano de récords en cuanto a transferencias entre los clubes se refiere. Este invierno apenas ha habido fichajes relevantes y el mercado se ha reducido a la mínima expresión.
Dos de los grandes agitadores del mercado como son la Premier League y Arabia Saudí se han mostrado muy reacios a invertir cuantiosas cantidades en este mes de enero. Han preferido, por diversos motivos, no acudir a otros clubes para llevarse a los mejores jugadores del momento.
Las cifras son claras y hablan de un bajón enorme en lo que al gasto de fichajes se refiere. Apenas ha habido traspasos que superen los diez millones y los más destacados han sido los de Vitor Roque y Sacha Boey, que han firmado por Barça y Bayern tras desembolsar 40 y 30 millones respectivamente.
Tan solo 20 clubes han invertido más de 10 millones de euros, siendo el Barça el líder de la lista tras firmar a Vitor Roque por 40 kilos. Le escoltan Paris Saint-Germain (40 M), Olympique de Lyon (38,4) y Bayern (30). Un contrasta notable con el de la temporada pasada. En la 2022/23 hasta 8 equipos alcanzaron los 40 millones en traspaso y el Chelsea rompió el récord absoluto con más de 300 millones y siete equipos de la Premier lideraron la tabla, además hubo 29 equipos que superaron los 10 millones en transferencias.
Imagen de un partido del Chelsea, el club que más gastó el pasado invierno.
Miedo en la Premier
La pasada temporada hasta siete equipos de la Premier League coparon los siete primeros puestos del mercado de invierno. Entre todos ellos se combinaron hasta gastar 641,85 millones de euros, con el Chelsea a la cabeza con más de la mitad de dicho gasto (329,5 M).
Este año la realidad es diametralmente opuesta y solo el Tottenham (25 M), séptimo, y el Manchester City (14,5 M), decimoquinto, aparecen en el top15. Es decir, la inversión ha decaído notablemente este arranque de 2024 y ha hecho que los clubes de la Premier League abandonen esos puestos de privilegio.
Lo cierto es que la Premier League parece haber cerrado el grifo tras las sanciones a Everton y Nottingham Forest por incumplir el Fair Play Financiero. Muchos de los equipos tienen un potente respaldo económico detrás, pero no se han querido arriesgar a realizar traspasos que requieran cuadrar exhaustivamente las cuentas.
El Gobierno británico se ha mostrado impasible en estos últimos meses y ha amenazado con un imponer duras sanciones a los clubes. Un motivo político de peso que les ha llevado a relajar el gasto hasta niveles mínimos, pocas veces vistos en temporadas previas.
Arabia Saudí cierra el grifo
Arabia Saudí se ha convertido en uno de los nombres propios de las últimas ventanas, especialmente tras la lluvia de millones realizada el pasado verano. El poderío de Fondo de Inversión Pública del país hizo que llegasen futbolistas de la talla de Karim Benzema, N'Golo Kanté, Roberto Firmino o Neymar.
Sin embargo, se han dado de bruces con la realidad y han visto cómo muchos de esos jugadores no respondían sobre el terreno de juego. Una cantidad inaudita de millones gastados que no han ayudado a aumentar realmente el nivel, salvo contadas excepciones como la de Cristiano Ronaldo.
Este invierno, tras varios meses allí, varios jugadores han forzado la maquinaría para intentar salir de sus respectivos clubes. Jordan Henderson tuvo que desembolsar dinero para salir del Al-Ettifaq y Karim Benzema y Roberto Firmino han puesto entre la espada y la pared a sus respectivos clubes.
Karim Benzema, durante un partido del Al Ittihad.
Una falta de adaptación y aclimatación de los futbolistas que ha provocado que Arabia Saudí haya aflojado su dispendio. Han pasado de más de 1.000 millones invertidos en jugadores de la talla de Mané, Mahrez, Laporte y compañía el pasado verano a tan solo 23 millones en este invierno.
Solamente el Al Hilal ha movido un poco sus arcas y únicamente han firmado un par de caras relevantes en este mercado. Renan Lodi ha sido el futbolista que ha marcado el mercado en Arabia tras desembolsar el Al Hilal 23 millones por él. Otra llegada notable es la de Ivan Rakitic, que dejará el Sevilla para unirse a las filas Al Shabab.
Los grandes optan por otra fórmula
Más allá de que se haya reducido el gasto en el mercado de fichajes, hay clubes que apuestan por otro tipo tipo de fórmula para engrosar sus plantillas. Uno de ellos es el Real Madrid, que ha tratado de hacerse con aquellos jugadores que terminan contrato a final de temporada.
El conjunto blanco ya llevó a cabo ese tipo de operaciones con futbolistas como Antonio Rüdiger o David Alaba en las últimas temporadas. Además, aspira a hacerse con los servicios de Alphonso Davies o Kylian Mbappé. El primero termina contrato la próxima temporada y el Real Madrid ya aprieta para rebajar su traspaso o que llegue libre dentro de poco más de un año. En el caso del segundo, podría llegar completamente libre el 30 de junio si consiguen convencerle de que se una a su proyecto.
También ocurre algo similar con el FC Barcelona. El conjunto culé se hizo con futbolistas de la talla de İlkay Gündoğan o Iñigo Martínez a coste al aprovecharse de que ambos finalizaban su unión con respectivos clubes. También el equipo que preside Joan Laporta apostó por cesiones, como las de Joao Félix o Joao Cancelo, para reforzar su plantilla.