Xavi Hernández está sufriendo. Enero ha sido un mes muy difícil para él después de perder la final de la Supercopa de España frente al Real Madrid, caer en los cuartos de Copa frente al Athletic Club y decir adiós a La Liga después de perder contra el Villarreal.
Muestra de ese sufrimiento es la cantidad de cartulinas amarillas que ha visto el técnico de Terrasa en el último mes. Y es que ha sido sancionado con tarjeta en cuatro ocasiones en enero. Dos han sido en Copa, frente al Barbastro y ante el Athletic Club, y las otras dos han llegado en La Liga (contra la UD Las Palmas y este sábado en el duelo ante el Villarreal). Además, ha visto una más esta temporada en el duelo del pasado 3 de diciembre contra el Atlético de Madrid.
La última llegó en el intenso choque frente al Villarreal. Y es que el técnico de Terrasa fue amonestado en el minuto 70 por protestar. Justo un minuto después llegó el gol de Bailly en propia que culminó la remontada momentanea del Barça.
[Xavi Hernández anuncia que dejará el banquillo del Barça el 30 de junio]
Además, Xavi Hernández fue noticia porque en el descuento se fue directo a la cámara de la retransmisión para gritar, claramente "Una vergüenza, una vergüenza", tras la revisión de un penalti a favor de su equipo que fue revisada por el VAR y anulado posteriormente.
Resto de amarillas
La de Montjuic frente al Villarreal fue la última de las cuatro que ha visto en este primer mes de 2024. Hace apenas unos días ocurrió lo mismo en el partido de Copa del Rey frente al Athletic Club. Fue de nuevo por protestar, pero la amonestación llegó muy pronto, antes del cuarto de hora.
Anteriormente, en otra eliminatoria de Copa del Rey, Xavi vio amarilla frente al Barbastro. El árbitro del encuentro amonestó al catalán porque, según constaba en el acta, hizo comentarios críticos sobre sus decisiones. Además, expulsó a Óscar Hernández, su hermano, por "abordarlo a él, con una actitud enérgica después de acabar el partido".
["Es una vergüenza" el mensaje de Xavi a la cámara tras el penalti anulado por el VAR]
Ante la UD Las Palmas fue también amonestado. El técnico azulgrana protestó efusivamente desde los límites del área técnica, vociferando "caradura" y llevándose la palma de la mano a la cara.