Los whatsapp de Rubiales y Paredes sobre el cese de Vilda: "Las jugadoras no quitan técnicos, es nocivo"
EL ESPAÑOL publica en exclusiva las conversaciones entre el presidente de la RFEF y la capitana por las quejas de las futbolistas sobre el entrenador.
4 octubre, 2023 02:15Las jugadoras de la Selección femenina de fútbol pidieron el cese de Jorge Vilda ya en agosto de 2022. Así lo demuestran los whatsapp entre Irene Paredes, en representación de las futbolistas, y Luis Rubiales a los que ha tenido acceso en exclusiva EL ESPAÑOL.
Dichos mensajes, en poder todavía de varios miembros del actual Comité Nacional de Fútbol Femenino, contradicen la versión que han dado las futbolistas durante las últimas semanas al afirmar que nunca habían solicitado el despido de Jorge Vilda como seleccionador. Estas conversaciones desvelan, además, el misterio sobre lo que realmente ocurrió y en qué se fundamentaban las quejas de las jugadoras.
EL ESPAÑOL publica los whatsapp en los que el entonces presidente de la Real Federación Española de Fútbol llegó a afirmar sentirse asombrado y presionado por la petición de las jugadoras. Paredes, por su parte, reiteró que había "un grave problema en el vestuario" y que se había "perdido la confianza deportivamente hablando".
Los 13 mensajes publicados por este periódico desvelan también que existió una videollamada a principios de agosto en la que Irene Paredes, Alexia Putellas y Patri Guijarro pidieron el cese de Jorge Vilda. Estas conversaciones dieron origen al grupo de 'Las 15' que, finalmente, el 22 de septiembre de 2022 renunciaron a la Selección vía email tras no lograr que hubiera un cambio en el banquillo.
Esta situación provocó un enfrentamiento entre un grupo de jugadoras y la RFEF que se seguiría arrastrando hasta el Mundial y que volvió a estallar tras el beso de Luis Rubiales a Jenni Hermoso. Irene Paredes y Alexia Putellas afirmaron en la rueda de prensa previa al encuentro contra Suecia que "jamás" habían pedido "la destitución de un entrenador, sólo trasladábamos inquietudes".
Videollamada con Alexia y Guijarro
Estas conversaciones comenzaron hace un año, el 2 de agosto de 2022. Fue entonces cuando Irene Paredes mandó un mensaje al teléfono de Luis Rubiales para pedir una conversación. El presidente de la RFEF aceptó y le prometió llamarla después de una reunión que estaba teniendo.
Según confirman fuentes de la actual RFEF y del Comité Nacional de Fútbol Femenino, se produjo una videollamada entre Luis Rubiales y las tres capitanas de la Selección -Irene Paredes, Alexia Putellas y Patri Guijarro- y en la que también estaban presentes otros cargos federativos.
En dicha conversación, las futbolistas trasladaron a Rubiales la necesidad de un cambio de entrenador. Las capitanas dieron tres grandes motivos para pedir el cese de Vilda. El primero de ello fue, según personas presentes en dicha reunión, que "no llegaba el mensaje del técnico al vestuario". El segundo fue que existía un "desgaste" con un proyecto deportivo que "llevaba mucho tiempo" siendo el mismo. Y por último, no estaban de acuerdo con "los roles" que había dado el seleccionador a ciertas jugadoras y que, en su opinión, debían jugar menos minutos.
Durante esta charla, Rubiales se muestra sorprendido y cariacontecido. El presidente de la Federación defiende la labor de Jorge Vilda en todo momento y afirma que "el seleccionador continuará" sin ningún tipo de duda. No existe negociación alguna, el máximo mandatario no cede ante lo que el propio Comité de Fútbol Femenino calificaría de "chantaje" para cambiar de entrenador.
El malestar del presidente de la RFEF con la exigencia hace que la conversación termine con un "asunto zanjado", aunque las futbolistas no piensan lo mismo y ya amenazan en esa videollamada con renunciar a jugar con la Selección, algo que sucedería sólo unas semanas después.
Rubiales se queja de la "presión"
No se vuelve a producir ningún contacto hasta el 14 de agosto. Es entonces cuando Irene Paredes, como capitana de la Selección, escribe a Luis Rubiales y reitera que quiere volver a tener una conversación con él sobre la situación de Jorge Vilda.
Entonces, el presidente de la Federación, en un largo mensaje de respuesta que publica en exclusiva EL ESPAÑOL, afirma no salir "del asombro". "El otro día cuando estuvimos conectados por videollamada, escuché atento lo que me transmitíais. Según vosotras sólo era una información para que me llegara. Nada más. Ya te comenté que en todos los años que fui profesional, tuve todo tipo de entrenadores. Con algunos jugué más, con otros menos, pero nunca (siendo capitán aún menos) trate de cuestionarle frente a nadie, y menos frente al presidente", dice Rubiales dejando claro que las futbolistas pidieron el cese inmediato de Jorge Vilda durante la conversación a principios de agosto.
El ahora exmáximo mandatario del fútbol español recrimina entonces a las futbolistas la situación, inaudita para él: "Nunca he vivido, ni en primera persona ni por terceros, en el fútbol profesional que futbolistas compañeros míos llamen al presidente para destituir a un técnico".
"Jorge ha tenido ofertas, han llamado a la Federación preguntando por él estos años y siempre ha reafirmado su compromiso con España. Algunas ofertas eran incluso superiores en lo económico", defiende Rubiales a Vilda ante la capitana de la Selección.
El presidente de la Federación muestra también su gran malestar con la situación al entender que las futbolistas se han excedido en su exigencia: "Siempre he estado en contra de estos movimientos, más allá de sus competencias, de futbolistas contra su entrenador. Es transgredir los valores del fútbol, es desleal y, además, es jugar con el pan y el modo de ganarse la vida de todo un staff técnico".
"Esta insistencia toma tintes de presión", advierte Rubiales entonces sobre lo que en la Federación se comienza a percibir como un "chantaje". "Que se presione por esto es ir un paso más allá y considero que no es tolerable", sentencia.
También hace una mención en dicho whatsapp al equipo masculino y hace una comparación para que se entienda que trata el tema con igualdad: "Igual ha habido o hay algún jugador de la Selección masculina al que no le ha gustado algún seleccionador, pero obviamente jamás me ha llamado para que lo cese".
Rubiales continúa entonces detallando por qué cree que es intolerable que Irene Paredes exija el despido de Jorge Vilda y su cuerpo técnico: "Rompe con todos los códigos del vestuario. Tratar de utilizar una posición de poder por la capitanía ostentas, y que el propio Jorge te dio, para ir contra tu entrenador, no creo que sea el mejor camino".
"Formas exquisitas" de Vilda
Además, estos mensajes de Rubiales desvelan otra de las grandes incógnitas que siempre ha perseguido a Jorge Vilda: nunca estas quejas se basaron en una conducta inapropiada del seleccionador. "Todas habéis reconocido que sus formas son exquisitas", le recuerda el presidente de la RFEF a Irene Paredes.
Por último, y para cerrar ese largo mensaje, el dirigente habla del Mundial que a la postre ganaría España y "la ilusión" que tienen con él todos los miembros de la Federación. Rubiales intenta que las jugadoras desistan también de su exigencia por "todo lo que puede generar contra la propia Selección este tipo de movimientos y asegura que "es más profesional desarrollar al máximo el rol que cada una tiene para construir el mejor equipo posible".
La contestación de Irene Paredes no llegará hasta un día después, el 15 de agosto de 2022, cuando ambos volverán a intercambiar los últimos mensajes. La futbolista del FC Barcelona se excusa afirmando que no se ha puesto en contacto "para meter presión" y que se había quedado en hablar "en unos 10 días" desde la videollamada.
Paredes asegura que las futbolistas "lo único" que quieren es "entrenar, jugar y ganar", pero que "hay un grave problema en el vestuario, que viene desde hace tiempo" y que han "intentado tapar".
"Sabiendo que tenemos, probablemente, la mejor Selección de los últimos años y por ello somos exigentes con nosotras y con todo el que nos rodea, por un bien común", añade. Según la capitana, "hace meses que la Selección no fluye como debería" y que hubiera tenido esta charla "con cualquier resultado". La conversación sucede sólo unas semanas después de que España quedara eliminada ante Inglaterra en cuartos de final de la Eurocopa.
"Llevamos años escuchando el mismo discurso, y no es ir contra nadie, pero creemos que puede ser normal por el paso del tiempo", afirma Irene Paredes sobre Vilda y ese "desgaste" que ya habían comentado en la videollamada de unas semanas antes. La futbolista añade que "el mensaje no llegue y se haya perdido la confianza, deportivamente hablando, hace que sea un problema" que les preocupa mucho.
"Un problema de todas"
Irene Paredes dice a Rubiales que habla como capitana y que no es problema de unas pocas jugadoras, sino de "todas". También se justifica diciendo que "no es usar ninguna posición de poder", sino que quiere "hacer llegar un problema del vestuario a los máximos representantes". Por otro lado, asegura que creen que "corresponde a otro cargo el analizar si las cosas van bien o no" o "si el mensaje está quemado".
Sobre la forma de proceder, Paredes asegura que hablaron primero "con Jorge" directamente y deja un dardo diciendo que lo hubieran hablado "con el director deportivo, que en este caso es la misma persona".
"Nosotras no vamos a quitar ni poner a nadie, volvemos a transmitir que es un malestar general y que si no se modifica nada, creemos que la Selección no avanzará ni fluirá como queremos", sentencia Paredes. La capitana apremia también a Rubiales a dar una respuesta asegurando que comunican "cómo ha ido todo al equipo porque no paran de preguntar cómo está la situación".
"Práctica nociva y falta de moral"
Poco tiempo después, ese mismo día festivo de agosto, Rubiales contesta de forma más tajante a Irene Paredes. El presidente de la RFEF hace mención a la "larguísima conversación" que mantuvieron por videollamada y asegura que "con el devenir" de aquella charla "quedó clara la postura de la Federación" y que no sería necesaria una nueva reunión.
"Quedó claro que en la Selección las jugadoras no quitan ni ponen entrenadores y que esta práctica sería nociva para la Selección, además de falta de moral", afirmó Rubiales sobre la exigencia de cesar a Vilda.
"El equipo tiene presente, futuro y un magnífico cuerpo técnico con la confianza de la directiva y creo que la palabra malestar tiene muchas connotaciones subjetivas", analiza el entonces máximo mandatario del fútbol español defendiendo la gestión realizada por Jorge Vilda y su equipo.
Por último, Rubiales delimita cuáles son las funciones de cada parte y vuelve a hacer ver a las jugadoras que se siente presionado por la situación: "Es bueno que cada cual vuelva a gestionar aquello que le compete".
"Una última cosa, Irene. Por respeto a Jorge, no voy a seguir hablando de esto, pero de la misma manera con respeto a vosotras. Yo no hablo con Jorge de vosotras. Estoy a disposición tanto de Jorge como de las capitanas por si creéis que hablando todos juntos avanzaríamos en positivo", añade el presidente de la RFEF.
"No vamos a avanzar"
La contestación de Irene Paredes es dura y, lejos de terminar con la polémica, contesta que "en el punto" en el que se está "no vamos a avanzar". "Desde la Euro de Holanda 2017, sólo se han ganado cuatro partidos de doce en grandes torneos. Son cifras bastantes bajas y queremos más. Para eso todo tiene que funcionar", afirma.
"No hemos hablado nada de Jorge que a él no le hayamos dicho, pero ha quedado claro que zanjas el tema", reprocha la capitana de la Selección al máximo dirigente del fútbol español. La crítica a Vilda se basa sólamente, y en todo momento, en criterios deportivos y de resultados, nunca se hace mención a una mala conducta del seleccionador. Es más, según un mensaje de Rubiales anterior, las jugadoras reconocieron que "sus formas son exquisitas" con el equipo.
Rubiales defiende a Vilda
La conversación este día 15 de agosto no acaba aquí y Rubiales vuelve a contestar a Irene Paredes para mandarle sus dos últimos mensajes. "Sin Jorge delante, está zanjado. Con Jorge delante, encantado de hablar", insiste el presidente de la RFEF en no querer seguir debatiendo sobre la destitución del entrenador sin que esté él presente.
Por último, Rubiales hace un análisis distinto de la situación deportiva de la Selección: "En los grandes torneos sólo nos han ganado EEUU, Alemania e Inglaterra en el Mundial y en la Euro. Hemos conseguido ganar por primera vez en la historia a Dinamarca y sólo por detalles no hemos peleado por la Eurocopa".
El dirigente federativo añade que "análisis de todo tipo se hacen en la RFEF" y, minutos después, manda un último whatsapp a la capitana: "Irene, si es la mejor Selección en mucho tiempo, algo de culpa también tendrán Jorge y la Federación".
La jugadora asiente: "No te decimos lo contrario". La conversación termina con un escueto mensaje: "Os informamos de la situación actual". Aquí finalizan los 13 whatsapp y una videollamada que provocó un terremoto en la Selección y que originó la renuncia de 'Las 15'. Una situación enquistada y que se convirtió en un enfrentamiento personal de un grupo de jugadoras con el presidente de la RFEF y el seleccionador.
Concentración y comunicado
La tensión continuó en la concentración de la Selección en septiembre. España ganó a Hungría y Ucrania, pero un grupo de las jugadoras habían roto definitivamente con Jorge Vilda y, por extensión al no aceptar su petición, con Rubiales y la Federación. El ambiente vivido durante esa semana no fue el mejor y, tras comprobar que el presidente seguía tajante respecto al futuro del seleccionador, 15 jugadoras enviaron un email el 22 de septiembre de 2022.
En dicho correo electrónico las futbolistas aseguran que los hechos que han ocurrido "están afectado de forma importante" a su "estado emocional", y por lo tanto a su "salud".
"Debido a todo ello, actualmente no me veo en condiciones de ser jugadora seleccionable para nuestro equipo nacional y por este motivo solicito no ser convocada hasta que esta situación no sea revertida", afirman en el párrafo clave del escrito y que es la confirmación oficial de su renuncia.
Entre las 15 futbolistas firmantes no están Irene Paredes, aunque estuvo siete meses sin acudir a la Selección, ni Alexia Putellas, esta última lesionada, pero sí una Patri Guijarro que participó en la videollamada del 2 de agosto en la que se pidió la cabeza de Jorge Vilda.
La guerra continuó el 23 de septiembre cuando 'Las 15', más Alexia Putellas, firmaron un comunicado en el que afirmaban que "nunca" habían pedido "el cese de Jorge Vilda". Además, pidieron "un proyecto profesional para sacar el mejor rendimiento" a una plantilla "con la que se pueden conseguir más y mejores objetivos".
"Las jugadoras lamentamos, en primer lugar, que la RFEF haya hecho pública, de forma parcial e interesada, una comunicación privada, con información que afecta a nuestra salud -que es parte de nuestra intimidad-, remitida en respuesta a la petición de la propia Federación de conocer quiénes de nosotras queríamos no ser convocadas. Comunicación de la que, por cierto, no hemos recibido respuesta en forma", afirmaron.
El grupo de 'Las 15' estaba formado, además de la ya mencionada Patri Guijarro, por Andrea Pereira, Ainhoa Vicente Moraza, Aitana Bonmatí, Amaiur Sarriegi, Sandra Paños, Lola Gallardo, Laia Aleixandri, Mapi León, Leila Ouahabi, Ona Battle, Lucía García, Mariona Caldentey, Claudia Pina y Nerea Eizagirre.
En las conversaciones publicadas por EL ESPAÑOL se demuestra que el principal motivo que llevó a esta renuncia fue la decisión de Rubiales de no destituir a Jorge Vilda como seleccionador. En dichos mensajes no existe ninguna otra queja o exigencia por parte de las futbolistas, a través de Irene Paredes, a la Federación.