¿Otra invasión en el Camp Nou?: el tuit que alerta de la reventa de entradas para el Barça - Inter

El Barça sabe que está ante la semana más importante de lo que va de temporada. Al fondo está El Clásico del Santiago Bernabéu (domingo 16, 16:15 horas), pero antes se interpone un partido todavía más crucial: la visita del Inter de Milán al Camp Nou. El pase a octavos de final de la Champions League está en juego.

La derrota en Milán (1-0) obliga al Barça a sumar puntos. Perder -y que el Bayern gane al Viktoria Pilsen- dejaría a los culés matemáticamente sin opciones de pasar de grupos. No es una opción. El empate también complicaría mucho las cosas. Por tanto, los de Xavi saben que solo pueden salir de ese partido con tres puntos más en el bolsillo.

La afición ha de jugar un papel importante. El Camp Nou se debe llenar el miércoles de aficionados culés que den un empujón al equipo. En redes sociales, sin embargo, se ha despertado cierto temor ante la posibilidad de vivir algo parecido a la invasión alemana que hubo el curso pasado en el Barça - Eintracht Frankfurt.

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Un tuit enciende las alarmas: "Hola, Joan Laporta. Más que nada es porque no me gustaría ver el miércoles el campo lleno de italianos, le paso esta captura. De nada", escribió un usuario. Acompañó con un vídeo un mensaje que ya tiene miles de retuits.

En el vídeo se observa el elevado número de entradas para el Barça - Inter que se han puesto a la venta en una conocida app. En teoría, la mayoría de esas ofertas colgadas en la red son de socios que buscan ceder sus asientos para el partido. El peligro está en que los italianos se hagan en masa con esos tickets.

30.000 alemanes

La invasión de seguidores del Eintracht fue catastrófica meses atrás. El Barça tenía la información de más de 20.000 aficionados que se desplazaban a la ciudad lo hacían sin entrada. Solo estaba asegurada la presencia de 5.000 que habían adquirido los tickets que facilita el club al club rival. Una cifra habitual en este tipo de eliminatorias, pero que acabó multiplicándose hasta los cerca de 30.000 germanos en la grada del Camp Nou.

El ambiente sorprendió a la plantilla del Barça aquel día, confirmó el propio Xavi Hernández. Intentó, sin suerte, que sus jugadores mantuvieran la calma ante un escenario completamente inesperado. "He intentado decirle a los jugadores que lo que importaba es lo que pasaba en el campo, pero nos ha podido afectar. No hemos estado bien tampoco. No lo digo como excusa, no nos ha ayudado", explicaba el técnico.

El Barça cedió las 5.000 entradas que requiere la UEFA para la afición rival y empezó a impulsar la venta entre hinchas azulgranas. Para evitar cualquier fuga de entradas, el club bloqueó las IP alemanas, así como las tarjetas de crédito de dicho país. Un mecanismo para evitar que la venta online supusiera una vía para los seguidores germanos.

Sin embargo, todos esos controles no funcionaron. Pese a esas medidas, se descartó que hubiera habido problemas con la venta en taquilla ya que se cerró dos días antes del partido para evitar ese desembarco de aficionados alemanes. Además, se descartó también que los tour operadores con los que trabaja la entidad hayan sido los culpables, pues no cuentan con entradas suficientes para alcanzar esas 30.000. El foco se puso en los socios y ahora, meses más tarde, hay miedo de que se repita la historia.