Ceferin, sobre la Superliga: "Cuando llegue el momento, quizás podría escribir un libro"

Aleksander Ceferin, el presidente de la UEFA, no se esconde cuando le preguntan por dos de los temas que más le incomodan en los últimos tiempos, la Superliga y su relación con su principal impulsor, Florentino Pérez. El mandatario sigue cerrándole la puerta a esta nueva competición y habla de "ego" cuando se refiere a los presidentes del Real Madrid, Barcelona y Juventus y su empeño en sacar adelante esta idea. 

Confiesa Ceferin, de hecho, que ni siquiera mantiene relación alguna con Andrea Agnelli, el presidente de la Juventus desde que estalló el asunto de la Superliga. Con su homólogo en el Real Madrid, sin embargo, la situación es algo mejor aunque también admite que lejos de ser fluida. 

En estas declaraciones realizadas al medio esloveno Sportni SOS, Ceferin abordó otros asuntos candentes en el mundo del fútbol como la posibilidad de llevar la Supercopa de Europa a Estados Unidos. También habló sobre el Fair Play financiero para criticar al Barcelona y abordó los incidentes que se sucedieron en la pasada final de la Champions League en París.

Aleksander Ceferin, durante un acto de la UEFA. Harold Cunningham / UEFA / dpa

Más rechazo a la Superliga

De sobra es conocida la postura contraria de la UEFA y de su presidente ante la idea de la Superliga. Por eso, cada vez que puede Ceferin siempre desliza alguna declaración con la que echar más leña al fuego: "Dudo que en diez o quince años puedan volver a aparecer unas ideas como estas", afirmó sobre la puesta en marcha de una competición así.

Tampoco quiso dejar pasar la oportunidad de cargar de nuevo contra los equipos impulsores, especialmente aquellos que siguen con intenciones de ejecutar esta idea, y también contra sus mandatarios: "Tenemos tres presidentes de clubes que siguen reivindicando algo por sus egos, pero por otro lado fueron ellos los primeros que se apuntaron a la Champions por miedo a que les echaran".

La huida de la mayoria de los clubes fundadores de la Superliga, especialmente los ingleses, también fue un factor que aprovechó Ceferin para tratar de enterrar esta iniciativa: "Los ingleses no se unirán definitivamente a la Superliga, así que no veo una competición sin estos equipos, que son probablemente los más importantes del fútbol europeo", concretó.

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Su relación con Florentino

Ahondando más todavía en el conflicto de la Superliga, el presidente de la UEFA recordó los primeros días de aquella batalla que se desató entre los clubes y el máximo organismo del fútbol europeo: "Fueron días realmente tormentosos, cuando llegue el momento podré contar más cosas al respecto o incluso escribir un libro, sería muy interesante", dijo con cierta sorna. "Aquellos días no dormí, no comí no bebí nada durante 48 horas", afirmó.

Preguntado sobre su situación personal con los presidentes de la Juventus y del Real Madrid, fue concreto: "No tengo ninguna relación con Agnelli y antes tampoco tenía mucha con Florentino. En la final de la Champions, nos despedimos correctamente, se sentó a mi lado, hablamos correctamente y no tocamos la Superliga", afirmó. 

Por otra parte, el presidente de la UEFA habló acerca del Fair Play financiero, criticado durante este verano por algunos mandatarios: "Vemos con algunos clubes como el Barcelona y la Juventus que han invertido tanto que tienen pérdidas muy grandes. Nuestras nuevas reglas son que se puede gastar un máximo del 70% de todos los ingresos en salarios, pero algunos gastaron hasta el 200%".

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En las últimas fechas también ha surgido el debate de si la Supercopa de Europa o incluso la Champions League podrían llegar a jugarse lejos del continente. Sobre la Supercopa sí que habló Ceferin, pero admitió que tan solo ha habido unas "primeras charlas" sobre la posibilidad de llevarla a Estados Unidos aunque nada firme. "Me gusta la idea de que se convierta en un evento más grande", apuntó.

Y por último, el presidente de la UEFA abordó los incidentes que ocurrieron en la pasada final de Champions League en Madrid con el público. Aquí, se lavó las manos y exculpó a su organismo: "La UEFA no es la Policía y no tenemos ninguna jurisdicción fuera del estadio", concluyó.