Este pasado fin de semana, Melani Olivares (49 años) acompañó a su amigo Eduardo Navarrete (28) en el Torrevieja Weekend. Un evento de tres días en los que el diseñador, con el apoyo de sus amigos, buscó reactivar y potenciar los comercios del pueblo alicantino. Como embajadora, la actriz desfiló por la pasarela de 300 metros que se dispuso en una de las calles más importantes de la localidad el sábado 25 de junio. Así, revivió una etapa de su vida de la que, si bien guarda buenos recuerdos, no echa de menos.
Tal y como comentó en una entrevista con EL ESPAÑOL durante el Torrevieja Weekend, Melani Olivares solo se atrevió a desfilar para Navarrete por su estrecha relación. De aquellos momentos no queda nada y hoy se mantiene centrada en otros proyectos.
Además de su trabajo, Melani Olivares conversó con este periódico sobre el robo que sufrió recientemente, su rol de madre y la polémica que se ha generado en torno a Santi Millán (53) por la divulgación de un vídeo íntimo.
¿Contenta de estar aquí?
Feliz. Vengo con Eduardo porque le adoro y todo lo que me pida lo haré.
¿Le apetecería regresar a las pasarelas?
No. Tengo casi 50 años. Yo ya era una modelo de catalogo, aunque viajara mucho. No era una modelo ni buena ni mala. Era una mujer de catálogo normal. No tengo que volver a ningún lado que he dejado. Yo por Eduardo Navarrete hago lo que él me pida.
¿Pero echa de menos la profesión de modelo?
No echo nada. Viajaba mucho cuando era modelo. Con 17 años fui a Japón, me fui dos veces, ganaba mucho dinero... Luego me lo gasté todo (ríe).
¿Se arrepiente de haberlo gastado todo?
¿Sabes lo bien que me lo he pasado? Soy una disfrutona.
Usted se toma todo con humor. Incluso el episodio del coche.
No queda de otra. Yo me tomo la vida con humor porque si no es un cuadro.
¿Cómo va a solucionar lo del coche? No había terminado de pagarlo.
El perito del parking se ha puesto en contacto. Pero todavía no sé nada porque tienen que pasar 40 días para que un coche se dé por realmente robado.
Se decía en las redes que le robaron el coche y encima, lo tenía embargado.
Ya no. Lo tenía, es verdad. Tuve un momento que tuve problemas. Parece que todos tenemos solvencia económica y yo no.
Muchas veces se comenta que los famosos son 'millonarios'.
La gente se lo cree, porque yo no veo a actores españoles alardeando de dinero. Muchas veces hacemos colaboraciones y nos llevan a buenos hoteles, hay temporadas que ganamos más que otras... Ya.
Pero no todos se atreven a hablar de problemas económicos como lo ha hecho usted.
Yo no tengo problema en decir quién soy y cómo soy.
¿Ha dejado lo del coche en manos de la justicia?
De la policía y del seguro. No hay nada que juzgar. Me han robado el coche.
Hablando de delitos, preguntarle por Santi Millán. ¿Qué le parece a usted?
Es un delito y ya está. No voy a entrar más. Solo hago la ola a su mujer y a él. Son dos personas maravillosas con las que he trabajado.
¿Cómo ha sido trabajar con él?
Maravilla. En nuestra profesión somos pocos, realmente. Todos nos conocemos mucho. Cada uno lleva su sexualidad como le da la gana.
¿Le ha sorprendido la noticia?
A mí no me sorprende con quién se acuesten los demás. Es su problema. Es un delito y hay que crujir al que ha hecho eso.
Usted, además, ha hablado públicamente del poliamor.
Yo hablo mucho y después no digo nada. A mí me sorprende que en vez de ir a crujir a quién ha hecho eso y lo ha divulgado, se hable de si se ha acostado o no...
¿Usted también lo pondría en manos de la justicia?
Claro que sí.
[La contundente respuesta de Santi Millán tras ser víctima de un delito contra su intimidad]
¿Cómo están sus hijos?
Muy bien.
Su hija Manuela debutó el año pasado como actriz. ¿Tiene más proyectos?
¡Y desfiló con Navarrete! Está haciendo la segunda temporada de Express que es una serie con Maggie Civantos (37). Está encantada.
¿Le pide consejos?
Bueno, no. Pero sí que vemos las secuencias que tiene que rodar.
¿Es muy aplicada?
Ella es una máquina.
¿Impone una madre?
Impone la madurez de una hija. Ella me impone a mí.
¿Es muy exigente como madre?
No.
¿Es amiga?
No, soy madre. Pero no soy exigente como madre ni como amiga ni conmigo misma. Faltaría más. He sido, muchos años.
Entre ser madre y ser actriz, ¿qué es más difícil?
Disfruto tantísimo de las dos que no podría decirte. Ser madre es un universo muy fuerte, que te pone un espejo delante de ti... Y ser actriz también. Yo amo mi profesión.
A propósito de la profesión, ¿con qué está?
Estoy con una función, Comedia sexual de una noche de verano, de Woody Allen. Y estoy con una cosa de tele, que no puedo decir.
Ha sido muy aplaudida la puesta en escena de María del Monte en el Orgullo Gay de Sevilla. ¿Qué le ha parecido?
Me parece genial, que uno diga lo que le apetezca en el momento que quiera. Si lo dice ahora, bien. Si lo decía hace 20 años, bien. Si lo hubiese dicho dentro de 30, bien. Cada uno con su sexualidad lo que quiera.
Ha sido súper aplaudida por la manera tan abierta que lo ha dicho.
Y a esa edad. Cuando son más jóvenes es más fácil, tienen un terreno que hemos hecho los demás y que los jóvenes también están haciendo muy bien. Pero cuando tienes la edad de María del Monte (60)... Su situación era muy distinta. Si ha visto que ahora era el momento para decirlo, yo la aplaudo.
¿Usted cómo celebrará el Orgullo Gay?
Hay varias cosas, pero yo tengo un poco de contradicción con celebrar el Orgullo. Es verdad que es una fiesta y que se han logrado muchísimas cosas, pero todavía hay palizas, discriminación y gente que lo está pasando muy mal. No es lo mismo vivir en Madrid que en un pueblo de Badajoz.
¿Haría otro tipo de acciones?
No, yo haría eso, también hay que celebrar. Pero también hay otras cosas que se están haciendo. Yo haría las que hago, las que voy a hacer... Me parece genial que se celebre, pero más que respeto, que suena muy condescendiente, hay que aceptar. Todos somos diferentes.
¿Usted se considera diferente?
Somos muy distintos. Hay que hacer tribus con los tuyos.
¿Está feliz?
Como una perdiz.
¿Del cero al 10?
A veces 10, a veces ocho, a veces siete, a veces cuatro...
[Melani Olivares desvela que está separada de Gorka González desde agosto]
¿No es exigente en el amor, verdad?
¡Cómo que no! Estoy sola.
¿Le gustaría enamorarse? No hay verano sin beso.
Me gustaría una historia de amor, de pocos días, de los días contados.
¿De verano?
Luego de otoño, de invierno... Yo no creo en el amor de toda la vida.