Laura Matamoros se cambia el apellido y estrena novio
La vida de la hija de Kiko Matamoros ha dado un cambio radical desde su paso por la casa de 'Gran Hermano'. Ahora se hace llamar Laura M. Flores.
29 septiembre, 2016 12:31Noticias relacionadas
Primero fue su hermano y ahora le toca el turno a ella. Laura Matamoros (23 años), hija del popular Kiko Matamoros (59), se ha cambiado el apellido. La joven quiere desvincularse de su progenitor con el que mantiene desde hace tiempo una tensa relación y prefiere que se la reconozca por la familia de su madre. Por eso en sus redes sociales y en su blog se ha puesto Laura M. Flores. Pero no es el único cambio que está experimentando. Desde su paso por Gran Hermano, su vida ha dado un giro radical. Y no sólo por las vacaciones de ensueño que ha vivido este verano de yate en yate por las aguas de Ibiza y de Cádiz.
La hija del colaborador de Sálvame se ha echado un nuevo novio. Se trata del cocinero Benji Aparicio, tiene 27 años y es madrileño. Le gustan los deportes y es aficionado a los toros. Además, es forofo del Atlético de Madrid. Ambos se conocieron a raíz de su amigo en común Fonsi Nieto, que fue quien los presentó. Lo que al principio parecía un rollito de verano se ha convertido en algo más. La pareja ya pasea su amor por las calles de la capital, sin esconderse y sin miedo al que dirán. "Mi corazón está ocupado y contento. Es u momento especial en mi vida. Sonrío y eso hace que mi corazón sonría también, aunque aún nos estamos conociendo", asegura Laura en las páginas de la revista ¡HOLA!.
Laura y Benji, quien también es un gran viajero, han compartido ya algún exótico destino juntos como las playas de Samaná en la República Dominicana y la ciudad rusa de San Petesburgo. En sus redes sociales han dejado algunas imágenes para la posteridad de estos mágicos lugares, pero en ninguna de ellas sale la pareja junta.
LOS FLORES
Diego (30), otro de los hijos que tuvo Kiko Matamoros con Marián Flores, también se cambió el apellido a principios de este verano. Al matricularse en una prestigiosa escuela de interpretación se inscribió como Diego Flores en vez de con el apellido que le vio nacer. "No tengo problema con ser Matamoros. Pero en este caso he ido a una academia de gran prestigio que no frecuenta la gente de la tele y sería un hándicap. Yo soy Matamoros de ADN, aunque no tanto como mis hermanas Laura o Lucía. Ellas tienen un carácter muy fuerte, yo me veo más Flores en ese aspecto", aseguró.
Pero lo cierto es que tanto él como Laura no se llevan bien con su padre y la mujer de éste. Tanto es así, que ninguno de los dos acudió acudió al enlace matrimonial entre Kiko y Makoke (47) celebrado el pasado 16 de septiembre en el Castillo de Viñuelas. De hecho, para no acaparar la atención informativa de ese día, Laura y Diego pusieron tierra y mar de por medio y se marcharon a Marrakech para pasar unos días de vacaciones. De vuelta ya en Madrid ninguno ha querido comentar la boda.