Tamara Falcó (42 años), hija del recordado Carlos Falcó y la socialité Isabel Preysler (71), es la digna heredera del reinado del estilo de su madre. En estos últimos días, hemos podido ver cómo durante el tiempo que ha pasado en Colombia ha acertado con todos sus looks, no sólo para hacer turismo gastro y cultural, sino también para el motivo real del viaje: la boda de dos grandes amigos suyos.
"Feliz de haber estado en Medellín celebrando el amor de Eli y JC. Gracias a ellos y a su familia por su increíble hospitalidad. ¡Que sigan los buenos momentos y el amor siempre!", ha escrito la marquesa de Griñón en su perfil oficial de Instagram junto a una galería de tres fotos.
En ellas, además de mostrar a sus citados Eli y JC, también aparece su razón de amor, su marido, Íñigo Onieva (35). Como pieza principal protagonista de su outfit, Tamara Falcó ha seleccionado un vestido del que EL ESTILO de EL ESPAÑOL conoce todos los detalles.
Al más puro estilo reina Letizia (52), Falcó ha querido hacer un guiño a la tierra en la que estaba luciendo moda propia del país. En este caso, la marquesa de Griñón ha seleccionado un vestido de la diseñadora colombiana Johanna Ortiz.
Se trata de una pieza confeccionada en crepé de china en seda. El diseño es largo hasta los pies, en color Orinoco peach/rust y está hecho cien por cien en seda natural.
Vestido de Tamara Falcó diseñado por Johanna Ortiz.
Según consta en la página web multimarca de lujo MyTheresa, el vestido tenía un precio original de 1.600 euros aunque ahora se puede adquirir con un 60 por ciento de descuento. En concreto, el precio final sería de 997 euros.
Johanna Ortiz es una de las firmas de cabecera de aristócratas como Tamara Falcó, Alessandra de Osma y de royals como Meghan Markle (42). El pasado mes de mayo, en un viaje oficial a Nigeria, la duquesa de Sussex lució un vestido de la firma Johanna Ortiz.
Más concretamente, era el modelo Tropicana Nights, con un estampado de inspiración tropical, en tono blanco y negro. El vestido, de corte midi, presentaba un diseño estructurado que resalta la silueta clásica de Johanna Ortiz cuyo ADN se observa perfectamente en sus vestidos. Además de sus clásicos estampados.