Dinamarca vivió este domingo, 14 de enero, un momento histórico. Después de la abdicación de Margarita II (83 años) como Reina del país tras más de 52 años en el trono, la ya exsoberana le ha cedido el cargo a su primogénito, Federico X (55).
A partir de ahora, serán el monarca y su esposa, Mary Donaldson (51) -muy querida por el pueblo- quienes deberán hacer frente a la Corona danesa, ocupar el papel que hasta entonces cargaba a sus espaldas Margarita y cumplir con las obligaciones que los ciudadanos esperan de ellos.
Así, tanto Federico como su esposa deben dejar atrás las polémicas en las que se han visto envueltos desde hace años -la última, relacionada con las imágenes Federico y de Genoveva Casanova (47) paseando por Madrid- y asumir sus nuevos roles, pasando de Príncipes a Reyes del país.
Para esta gran ceremonia, la flamante Reina optó por lucir un diseño discreto de color blanco, en concreto un abrigo del diseñador Soeren Le Schmidt, con cuello de efecto capa y cinturón, y piezas del lote de rubíes que dejó en herencia la abuela de Federico X, la reina Ingrid. Un look de lo más comentado.
Sin embargo, lo que más se analiza ahora no son sus estilismos. Son las funciones que a partir de ahora Mary deberá ejercer. Durante la pedida de mano de Felipe VI (55) a Letizia (51), el 6 de noviembre de 2003, la por aquel entonces Princesa de Asturias subrayó que seguiría "el ejemplo impagable de la reina (Sofía)". La australiana deberá hacer lo propio con Margarita II: seguir el ejemplo de la soberana más longeva en el trono en estos momentos y de la monarquía más antigua de Europa, la danesa.
Mary continuará ahora con su agenda, centrada en temas de salud, educación y cultura, esta vez como Reina, y a su vez deberá seguir muy de cerca los pasos de su primogénito Christian, ahora primero en la línea de sucesión al trono de Dinamarca. También deberá ofrecer apoyo institucional, representativo y emocional a Federico X en momentos en los que la Institución flaquee.
La historia de Mary
Los orígenes humildes de Mary Elizabeth Donaldson, al igual que los de Letizia, no han sido impedimento para convertirse en Reina. Nació el 5 de febrero de 1972 en Hobart, Tasmania, Australia, en el seno de una familia de clase media formada por John Dalgleish Donaldson (82), un profesor de Matemáticas, y Henrietta Clark, secretaria ejecutiva de la Universidad de Tasmania.
Su infancia transcurrió con relativa normalidad, pero el destino le tenía preparadas sorpresas que cambiarían su vida para siempre. Mary se matriculó en la misma universidad y, en 1994, obtuvo su título de Licenciatura en Derecho y Comercio, con especialización en Derecho y Relaciones Internacionales, convirtiéndose así en abogada. Trabajó en el sector corporativo durante un tiempo, dentro del mundo del marketing y publicidad, además de en el área de ventas y relaciones públicas.
Por aquella época, Mary había empezado una relación con el australiano Brett Annells. Estuvieron juntos durante siete años y su historia de amor llegó a su fin en 1998. Fue un romance del que apenas se conocen detalles y que vio la luz en 2014, en la revista Woman's Day.
Entre tanto, la vida le tenía guardado otro duro golpe. El 20 de noviembre de 1997, su madre fallecía víctima de una enfermedad del corazón. Mary sólo tenía 25 años, y su madre no llegó a conocer al amor de vida de su hija, Federico.
En 2015, la ya Reina confesó al programa de la televisión danesa, Aftenshowet: "Experimenté la soledad cuando perdí a mi madre, sentí que estaba sola con mi dolor. Que nadie me entendía y que me había quedado inmóvil mientras todo el mundo a mi alrededor seguía adelante". Su progenitor volvió a encontrar el amor de la mano de la escritora Susan Moody (84). En 2001 se dieron el 'sí, quiero' y la pareja sigue muy unida en la actualidad.
Llega Federico
Federico llegó a su vida en el año 2000, mientras se llevaban a cabo los Juegos Olímpicos de Sídney. Sobre su primer encuentro existen dos versiones. La primera apunta que fue en un bar de copas. La segunda dice que tuvo lugar en una cena formal en la que coincidieron con otros miembros de la realeza. Sea como fuere, el Príncipe danés y la plebeya australiana comenzaron una relación.
Algunos medios también señalaron que la conexión entre Mary y Federico fue instantánea, pero que, en ese momento, ella no estaba al tanto de la verdadera identidad del aún Príncipe.
La relación se mantuvo en secreto durante algún tiempo. Su primera imagen juntos no llegó hasta 2001, y un año después, Mary decidió mudarse a Dinamarca. El 14 de mayo de 2004, oficializaron su relación y se convirtieron en marido y mujer, una ceremonia celebrada en la Iglesia de Nuestra Señora de la Catedral de Copenhague. Fue un evento también importante para los españoles, ya que se trató del primer acto oficial de Letizia con la realeza europea.
Ha pasado una década desde entonces y durante todos estos años han tenido que sortear varios escándalos. Uno de ellos en 2007, cuando una periodista aseguró que el Rey le había sido infiel con una modelo de lencería con la que estuvo a mediados de los 90, Katja Storkholm.
Nueve años más tarde, en 2016, la revista danesa Her & Nu afirmó que Federico de Dinamarca había estado, presuntamente, con una prostituta de lujo anónima que decía haber pasado una noche con Federico a cambio de 50.000 coronas (unos 7.000 euros). Este 2023 llegaron las sonadas imágenes de Genoveva Casanova, con quien fue visto por las calles de la capital. La exesposa de Cayetano Martínez Irujo (60) siempre sostuvo que sólo hay una amistad.