La reina Sofía (77 años) acude a contados actos oficiales desde su condición de reina emérita. Entre ellos se encuentran las bodas, bautizos y funerales reales, eventos a los que el resto de la Familia Real son poco proclives. De ahí que no haya extrañado su asistencia a la boda real que ha tenido lugar este fin de semana en Tirana, la capital de Albania. Eso sí, se ha hecho acompañar por su inseparable hermana Irene (74).
Leka II de Albania (34), pretendiante al desaparecido trono albanés y único representante de la monarquía del país desde que falleciera su padre en 2011, daba este sábado el sí, quiero a su novia desde hace cinco años, la actriz Elia Zaharia (33).
Los novios, ya convertidos en marido y mujer.
Hasta allí se desplazaron 300 invitados, 50 de ellos pertenecientes a las casas reales de medio mundo, incluidas las no reinantes, como es el caso de los duques de Castro, que en la actualidad mantienen una pugna mediática por el extinto trono de Borbón Dos Sicilias.
Tras la celebración del fastuoso enlace, tuvo lugar una cena de gala a la no faltó la reina Sofía, que acudió con un vestido en tonos verdes que adornó con un collar de perlas con colgante de rubí y diamantes.
La reina Sofía deslumbró durante la cena de gala con motivo de la boda real.
La reina Sofía ha coincidido allí con la Selección Española de Fútbol, que se encontraba este fin de semana en el país con motivo del partido clasificatorio para el Mundial de Rusia. De hecho, la reina cogió el mismo avión desde Roma que la plantilla.
El partido entre España y Albania tenía lugar el domingo por la noche, una cita en la que no se esperaba a la royal teniendo en cuenta que el estadio de Tirana está en obras y llegar a la ciudad del norte del país en la que se celebraba el partido era toda una odisea.