Para el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida (48 años), el de ayer fue uno de los días más especiales, pero también nerviosos de su vida. Lo confesó minutos antes de entrar a la Iglesia de San Francisco de Borja, donde dio el 'sí, quiero' a Teresa Urquijo (27), ante una lista exclusiva y selecta de alrededor de 500 asistentes.
Los novios llegaron muy emocionados y sonrientes a la iglesia, situada en la calle Serrano. El alcalde aseguró estar muy "nervioso, feliz y agradecido" a preguntas de EL ESPAÑOL, mientras las decenas de curiosos que se encontraban en la zona aplaudían su llegada. Pocos minutos después lo hacía Teresa Urquijo, que desfiló hacia la iglesia de la mano de su padre y padrino, Lucas Urquijo Fernández de Araoz.
A su salida, los ya marido y mujer posaron frente a la prensa y se dieron un tímido beso en la mejilla, antes de entrar en el coche que les esperaba en la puerta. Algunos de los invitados declararon ante los medios que la ceremonia había sido muy emotiva. Pablo, sobrino del alcalde, aseguró que se vivieron momentos "muy emocionantes". "Todo ha sido tan bonito, pero diría que la chica que ha cantado al final me ha emocionado mucho", señaló.
Los invitados pusieron rumbo después a la finca El canto de la cruz, en Colmenar Viejo, propiedad de Teresa de Borbón-Dos Sicilias y Borbón-Parma (86), abuela materna de Teresa y prima del rey Juan Carlos (86), donde se celebró el convite. El emérito, precisamente, fue uno de los invitados más esperados de la boda. Acudió a la ceremonia religiosa acompañado de sus dos hijas, las infantas Elena (60) y Cristina (58) y tres de sus nietos, mientras que la reina emérita (85) fue directamente al banquete.
Los invitados disfrutaron de un banquete ofrecido por uno de los restaurantes más emblemáticos de Madrid, Lhardy, y fueron testigo, después, de uno de los momentos más destacados de la noche: el baile de los novios. Almeida y Urquijo optaron por un chotis en vez de por el tradicional vals, con una versión del popular tema Madrid, Madrid, Madrid.
Una dedicatoria especial a sus padres y a sus suegros
La jornada estuvo cargada de anécdotas y momentos emotivos. Uno de los más especiales fue el discurso que pronunció Almeida durante la celebración del banquete. El alcalde, sentado junto a la reina emérita, agradeció a los reyes "por estar acompañándoles en un día tan especial".
Almeida recordó a sus padres, Rafael Martínez-Almeida y León y Castillo y Ángela de Navasqüés, fallecidos en 2012 y 2019, respectivamente. "De lo mucho que me ha pasado en la vida son responsables Rafael y Ángela, mis padres, y hacia ellos va este recuerdo. Cuando te faltan tus padres siempre necesitas a alguien en quien descansar y quien confiar", señaló, tal y como publica Vanitatis.
Almeida también tuvo unas emotivas palabras para la familia de su ya esposa, Teresa Urquijo. En concreto, para sus padres, Lucas Urquijo Fernández de Araoz y Beatriz Moreno y de Borbón, personas, dijo, en las que "puedo descansar, en las que puedo confiar y en las que sé que van a ejercer ese rol que tanto me falta en estos momentos".
El alcalde de Madrid hizo referencia, además, a los abuelos de su mujer, Teresa de Borbón-Dos Sicilias e Íñigo Moreno de Arteaga, marqués de Laserna. "Por otra parte, también lo he encontrado en doña Teresa e Íñigo, esas personas que están aquí y que nos han cedido tan generosamente esta finca del Canto de la Cruz, al igual que Pilu nos cedió Molinillos para poder hacer nuestra pedida, porque como tampoco tengo cuatro abuelos, pues ahora tengo tres abuelos".
Sentido del humor y futuro junto a Teresa
No faltó el sentido del humor que caracteriza a Almeida, quien bromeó con la diferencia de edad con su esposa, del que le separan 22 años. "Por cierto, más que padres, en Lucas y en Beatriz he encontrado hermanos, por razón de edad", aseguró, ante las risas de los invitados.
Además, tal y como informó el programa de Telecinco Fiesta, el alcalde recordó un consejo que le dio su madre: "Nunca dejes de creer". "Y justo en ese momento apareció Teresa y es una bendición que Dios ha puesto en mi camino. Tengo la obligación de estar a su altura y hacerla feliz, y esa bendición tengo que devolvérsela, espero, que en forma de hijos o de hijas".
Según la reportera de Telecinco, el alcalde aseguró que "nunca pensó encontrar a una mujer como ella" y continuó bromeando: "Ha hecho la gracia diciendo que no sabe lo que ha visto en él, pero que ahora ya no tenía marcha atrás". Almeida finalizó el discurso agradeciendo de nuevo la presencia de los eméritos y pronunciando un "Viva el Rey y Viva España".