En la península española existen tres tipos de cucarachas (común, americana y alemana). Estos insectos de cuerpo aplanado son sinónimo de suciedad y falta de higiene. Sus hábitos alimenticios y de anidación pueden acumular una variedad de organismos patógenos que transmiten a los alimentos y a las superficies por las que pasan. No en vano, son numerosas las enfermedades que transmiten, por lo que lo más conveniente es poner las medidas necesarias para deshacerse de las cucarachas.
Cómo transmiten enfermedades las cucarachas
Por lo general, las cucarachas pueden transmitir enfermedades de diversas maneras. Sin embargo, las más habituales son tres:
- Las heces de cucarachas o sus excrementos
- La saliva o el vómito
- Por contacto físico
En la mayoría de las ocasiones, la transmisión de enfermedades se produce al entrar en contacto con elementos que las cucarachas han contaminado. La transmisión suele darse al comer o beber algo que haya estado en contacto recientemente con cucarachas o al llevarnos a la boca cubiertos u objetos que puedan tener saliva o excrementos de cucarachas.
1. Las heces de cucarachas
Debido a sus malos hábitos alimenticios, las cucarachas pueden transmitir patógenos nocivos a través de sus excrementos. Cuando una cucaracha come algo contaminado, entra en su organismo y puede permanecer en su aparato digestivo. El patógeno se queda ahí y aparece en las heces de las cucarachas, pasando a las superficies o los alimentos en los que estos insectos excretan.
2. La saliva o el vómito
La saliva o el vómito es uno de los medios por los que también las cucarachas pueden propagar enfermedades. Una forma muy similar a la de las heces de las cucarachas, ya que la saliva o el vómito pueden albergar patógenos acumulados al comer alimentos que están en mal estado.
3. El contacto físico
Las cucarachas viven en alcantarillas, pozos negros, desagües y contenedores de basura. Allí suelen entrar en contacto con gran variedad de organismos, sobre todo bacterias y virus, que se adhieren al cuerpo de estos insectos.
Las patas de una cucaracha, por ejemplo, poseen espinas sensibles al tacto y proporcionan una superficie idónea para recoger patógenos. Si entramos en contacto físico con una cucaracha, podemos recibir los virus y bacterias que vengan con ella.
Enfermedades que transmiten las cucarachas a las personas
Hay una serie de enfermedades que transmiten las cucarachas, aunque generalmente las más habituales son las siguientes.
1. Salmonelosis
Las cucarachas transmiten la bacteria Salmonella que causa la salmonelosis, una enfermedad que en las personas presenta unos síntomas muy similares a los de una intoxicación alimentaria (fiebre, diarrea y vómitos). Las cucarachas acumulan bacterias arrastrándose en la suciedad y alimentándose de alimentos en mal estado. La bacteria de la salmonella puede permanecer en el sistema digestivo de estos insectos durante un mes y se deposita a través de los huevos de cucaracha o sus excrementos.
2. Listeriosis
La listeriosis es una infección grave causada por la bacteria Listeria monocytogenes. Se contrae al consumir alimentos y bebidas en mal estado y afecta sobre todo a personas con el sistema inmune debilitado, embarazadas, recién nacidos y personas mayores. Los síntomas suelen ser fiebre, dolores musculares y diarrea. En casos más graves, la listeriosis puede provocar en las embarazadas un aborto involuntario o un parto prematuro.
3. Campilobacteriosis
La campilobacteriosis es una infección causada por la bacteria Campylobacter. Muy común entre los humanos, es una infección que se transmite por los alimentos y bebidas en mal estado que hayan estado en contacto con cucarachas. Los síntomas son diarrea, calambres, dolores abdominales y fiebre. La enfermedad puede durar entre 2 y 10 días.
4. Infección por E. coli
La Escherichia coli (E. coli) es una bacteria que se halla generalmente en el intestino de las personas. Aunque la mayoría de las cepas de esta bacteria son inofensivas, algunas sí que pueden ocasionar una intoxicación alimentaria grave. Los síntomas más comunes son diarrea y calambres abdominales, que pueden venir acompañados de fiebre, náuseas y dolores musculares.
5. Fiebre tifoidea
La fiebre tifoidea es una infección bacteriana causada por la bacteria Salmonella typhi. Se cree que las cucarachas portan esta bacteria al consumir heces contaminadas en las que vivía. No obstante, la fiebre tifoidea es una enfermedad más habitual en aquellos países que tienen un sistema de saneamiento deficiente y un acceso limitado al agua potable. Los síntomas de esta enfermedad son fiebre, dolor de cabeza, diarrea, cansancio general y dolores musculares.
6. Cólera
El cólera es una infección diarreica aguda causada por la bacteria Vibrio cholerae. Es más común en países con un menor desarrollo y se propaga por medio de alimentos y bebidas en mal estado. Las heces de las cucarachas sobre estos alimentos pueden hacer que la bacteria llegue al organismo de las personas.
7. Disentería
La disentería es un tipo de gastroenteritis que se puede de dar de dos formas diferentes:
- Disentería bacilar: también conocida como shigelosis, es causada por la bacteria Shigella.
- Disentería amebiana: se da en zonas tropicales y es causada por un parásito unicelular llamado Entamoeba.
La disentería se transmite a través de una mala higiene de las manos y el consumo de bebidas y alimentos contaminados o en mal estado. Los síntomas son diarrea, congestión nasal, calambres estomacales dolorosos, náuseas, vómitos y fiebre alta.
Las cucarachas son, en definitiva, insectos que pueden propagar enfermedades a las personas. Es por eso por lo que hay que prestar especial atención en casa si vemos una cucaracha. Es probable que haya algunas más, de ahí que debamos atajar el problema antes de que se convierta en una plaga.