“Es fundamental premiar el talento joven y la sabia fresca”, insistía la crítica de vinos de ABC y miembro del Consejo Asesor de Madrid Fusión The Wine Edition, Pilar Cavero, durante la entrega del Premio Juli Soler al talento joven. Opinión que fue apoyada por Rita Soler, hija del fallecido director y propietario de elBulli junto a Ferran Adriá: “Hay esperanza en la juventud y debemos confiar en ellos, porque son el futuro del sector”.

Impulsado por el congreso de vinos de Madrid Fusión y la Spanish Wine Academy de Ramón Bilbao, el Premio Juli Soler reconoce a aquellos jóvenes con mayor proyección en los diferentes campos del sector del vino, con el objetivo de descubrir a la nueva generación de profesionales del vino.

José Manuel Borrella (sumiller en Restaurante Martín Berasategui, Lasarte, San Sebastián), Carlota Iglesias (sumiller en Restaurante Cabanas, Lalín, Pontevedra), Pablo González (sumiller de La Caníbal, Madrid), Álvaro Loza (viticultor en Bodega Álvaro Loza, Briñas, La Rioja), Manuel Méndez (viticultor en Bodegas Gerardo Méndez, Meaño, Pontevedra) y Clara Puigvert (sumiller en Restaurante Les Cols, Girona) han sido los seis galardonados este año.

Tras la entrega de premios, los seis expertos realizaron una cata de vinos elegidos por ellos mismos, y que conforman una visión completa de la viticultura actual y de sus propios intereses: vinos atlánticos, en su mayoría, de pequeña producción, elaborados a partir de cepas viejas y con la mínima intervención. Los descubrimos.

Do Ferreiro Cepas Vellas 2013

Viticultor y tercera generación de la bodega familiar Gerardo Méndez (segunda dedicada al vino de manera profesional) en el Valle del Salnés, Manuel Méndez es el encargado de continuar el legado de uno de los albariños más icónicos de Rías Baixas: Do Ferreiro. Aunque tomó las riendas de la bodega en 2012, este joven enólogo con alma de músico asegura que lleva dedicándose al vino toda la vida. Tras recibir el Premio Juli Soler, el de Meaño presentó las bondades de Cepas Vellas 2013, uno de sus vinos más especiales, nacido de cepas centenarias (algunas de más de 200 años) procedentes de una pequeña finca de 1 hectárea.

Lalomba 2019

La hija de Fina Puigdevall, chef de Les Cols, es hoy la sumiller de este restaurante familiar de Girona. Nacida en Olot en 1992, Clara Puigvert descubrió en casa su pasión por el vino y tras formarse en sumillería se dedica a armonizar la cocina de paisaje elaborada por su progenitora. Durante la presentación en Madrid Fusión The Wine Edition, tanto ella como sus compañeros alabaron la singularidad de este tempranillo procedente del pequeño viñedo Finca Valhonta, en ladera sur de Sierra Cantabria, en Rioja Alta, donde las cepas se plantaron envaso en el año 2000 al pie de los montes Obarenses. Un vino fresco y de corte moderno que realiza la fermentación maloláctica en barrica francesa y cuenta con una crianza de 14 meses en la misma, para afinarse después en hormigón durante otros 17 meses.

A Torna Dos Pasas 2020 

Carlota Iglesias es la segunda generación al frente del popular restaurante Cabanas de Lalín, Pontevedra. Su interés por el vino le ha llevado a cursar el Wine & Spirit Education Trust (WSET3), uno de los certificados de sumillería más prestigiosos a nivel internacional, y a trabajar en una de las mejores bodegas de restaurante del mundo, la del cacereño Atrio. De vuelta a casa, en su carta no faltan referencias gallegas tan interesantes como esta de Luís Anxo Rodríguez. Un tinto elaborado en Ribeiro a partir de variedades autóctonas casi desaparecidas (caíño tinto, ferrol y brancellao) procedentes de viejas parcelas recuperadas, con una corta crianza de seis meses en barrica usada. 

L’Ombre Treixadura 2021 

Los vinos galaicos tuvieron un especial protagonismo en la cata conducida por estos jóvenes expertos. Otro de los presentados fue este blanco de Bodegas L’Ombre, nacido en el enclave natural de Ribeiro, a orillas del Miño. Como defensor de pequeños productores, de la mínima intervención y el territorio (y si son vinos gallegos, mejor), Pablo González, sumiller en La Caníbal en Madrid, destacó la elaboración de esta treixadura de cepas centenarias recuperadas, vendimiada de forma manual. Las características de la bodega (semienterrada) hacen que las fermentaciones sean muy largas y aporten al vino complejidad. Tiene una crianza un depósito de siete meses con sus lías y un afinamiento en botella de un año.

Barbas de Gata 2017 

José Manuel Borella es insultantemente joven, pero lleva media vida junto a Martín Berasategui. Empezó su andadura gastronómica en el negocio familiar de sus padres siendo un niño y a los 14 años ya daba servicios de boda en su Cáceres natal. La oportunidad de hacer prácticas en el tres estrellas Michelin vasco macó un antes y un después en su carrera y en su vida. Las realizó, y ya no se marchó. Berasategui le ofreció un puesto de trabajo como jefe de rango y poco a poco fue ascendiendo hasta convertirse en jefe de sala en 2013. Tan extremeña como él es esta garnacha de Ribera del Guadiana, cuyas cepas centenarias crecen en un pequeño viñedo en la Sierra de Gata a 900 metros de altitud. Un vino elaborado respetando los métodos tradicionales de la zona, interpretados por esta bodega cacereña a partir de procesos completamente manuales, levaduras autóctonas y muy poca intervención, y con una crianza de 12 meses en barricas viejas francesas abiertas.

Álvaro Loza 2020

Álvaro Loza es el integrante más joven de Martes of Wine, la nueva generación de pequeños productores riojanos, defensores del terruño, que no hay que perder de vista. A pesar de haber nacido en Haro, Loza no viene de familia de elaboradores, pero eso no le ha parado a la hora de lanzarse a la aventura de hacer vino en su tierra. Tras estudiar un año de ingeniería mecánica se pasó al grado superior de vitivinicultura y se fue a recorrer mundo. Ha aprendido en bodegas de Borgoña, California, Ródano o Champagne y ha vuelto a casa para convertir las cuatro parcelitas de viña que conservaba su abuelo en Haro y Labastida en la base de su proyecto. Este coupage de tempranillo y viura toda una declaración de intenciones: viñedo trabajado en ecológico, fermentación en depósitos abiertos y crianza en barricas de roble francés usadas de diferentes dimensiones durante 16 meses. Puro reflejo del terruño en el que nace.