¿Quién dijo que el vino tinto no va bien con el pescado? El tanino de los tintos ayuda a arrastrar la sensación grasa de determinados pescados y mariscos, potenciando sus sabores yodados y salinos. Los pescados grasos como el atún o el salmón y las elaboraciones al horno, a la brasa, incluso algunas salsas, armonizan a la perfección con tintos jóvenes, con maceraciones carbónicas e incluso con aquellos que tengan un leve paso por barrica.

Vino tinto y pescado, ¿por qué no?

Todo depende del tipo de pez y de su preparación. La clave del maridaje perfecto es elegir un vino que no reste protagonismo al plato. Pero las reglas están para romperlas. Si hace unas semanas desmontábamos algunos de los mitos y clichés más extendidos en lo que respecta al servicio del vino, nos atrevemos ahora a buscar en el recetario de Cocinillas las mejores recetas de pescado para armonizar con vinos tintos muy especiales. ¿Te atreves?

Aistear con bonito marinado al curry

Aistear significa ‘el viaje’ en gaélico, y es un vino obtenido de viñedos viejos de las montañas más orientales y occidentales de Rioja Alavesa. Viñas que comparten una misma voz pero que aportan los distintos matices de cada terruño. Bodega 202 selecciona la mejor uva tempranillo vendimiando únicamente las partes más altas de las laderas.

Aistear.

El resultado es un rioja moderno, equilibrado, fresco, complejo y a la vez divertido de degustar por su riqueza aromática, que después de pasar 12 meses en barrica preparándose para envejecer en botella el tiempo que haga falta, es capaz de acompañar todo tipo de recetas del mar, sobre todo las de atún o bonito.

Llenca Plana con rape a la naranja 

Afrutado, fresco, elegante, profundo y cosmopolita. El vino tinto elaborado por Terra de Falanis en la zona tarraconense de Montsant redescubre las fantásticas posibilidades de esta privilegiada tierra y ofrece una versión diferente y moderna de la tipología de la zona.

Llenca Plana Montsant.

Frutal y con cuerpo, esta mezcla de cariñena y garnacha con un paso corto por barrica, explosiona en la boca en una combinación fresca, rica y dinámica, que lo hace perfecto para armonizar con pescados semigrasos como la trucha, la dorada, el rape, la merluza o el bonito. Pescados blancos menos grasos y azules más suaves que van muy bien con tintos jóvenes, ligeros y con la frutalidad muy marcada, como Llenca Plana.

Citius con porrusalda de bacalao

Diego y Hugo Ortega se han ganado a pulso el apodo de ‘los locos de la Pinot Noir’ en España. Y es que sólo ellos han conseguido posicionar uno de los pocos monovoarietales de esta uva tan difícil de cultivar en España entre los mejores pinot noir del mundo. Si nos parásemos a nombrar todos los premios internacionales que Alta Pavina ha conseguido estos años, necesitaríamos otro artículo.

Citius.

El cuerpo medio de la añada 2016 de este atípico pinot noir de la Ribera del Duero, el buque insignia de la bodega, resulta especialmente expresivo junto a pescados grasos como el salmón o el atún. O, por qué no, con sardinas, caballa, boquerones o anchoas. A lo loco.

La Finca con pulpo con almogrote

La primera añada del vino más personal de Bodegas El Sitio es la expresión del terroir de la parcela que rodea a esta bodega canaria. Un tinto nacido de las exclusivas cepas de vijariego negro y syrah plantadas tiempo atrás en los aledaños del edificio, situado en el barranco de San Juan, en el municipio de Tacoronte, y que cumple el deseo de elaborar un ‘vino de finca’ de alta calidad en Tenerife.

La Finca.

Un vino sorprendentemente versátil, que refleja el carácter volcánico e indomable de las islas, cuya crianza sobre lías en barricas francesas durante 10 meses lo hacen perfecto para acompañar todo tipo de comida, especialmente las recetas canarias. Pescados como el jurel, el mero, el cherne… En escabeche, frito, adobado, a la espalda, a la sal o al horno.

Castell de Santueri con suquet de pescado

Saltamos de archipiélago para descubrir una joya balear fresca y gastronómica. El pariente mallorquín de los creadores de Ànima Negra, surge de la unión de un grupo de amigos viticultores con una filosofía común: la recuperación de variedades autóctonas y el amor por el terroir.

Castell de Santueri Rouge.

Castell de Santueri es un coupage de callet, mantonegro y cabernet sauvignon, que pasa 6 meses en barricas de roble francés y americano para convertirse en un vino complejo, influenciado por las brisas marinas y con marcado carácter mediterráneo. Un tinto que recomendamos poner a prueba con bacalao, lubina, lenguado, rodaballo o corvina. Porque galanes y papagayos solo nadan en sus costas.