Cuando Victoria Beckham vivió en España se le atribuyó una frase que, en realidad, ella nunca llegó a decir, así que no sabemos qué es lo que opina exactamente la famosa 'Spice Girl' sobre el ajo. De lo que sí estamos seguros es de que, si llegase a probar estas sopas de ajo, la probabilidad de que acabase pidiendo la receta sería muy alta.

La de las sopas de ajo es una de las recetas de aprovechamiento más populares de nuestra cocina. Desde su versión más humilde con un caldo al que se le da sabor con un sofrito de ajos y pimentón y que se 'engorda' cociendo en él unas cuantas rebanadas de pan duro. A partir de ahí, podemos seguir hasta donde la imaginación (y el presupuesto) nos lleven.

Tenemos la sopa castellana, a la que se le suelen añadir unos taquitos de jamón; o la zurrukutuna, unas sopas de ajo con bacalao típicas del País Vasco. Con el mismo concepto nos encontramos otras recetas como la açorda portuguesa, menos caldosa, o esta sopa de pan y albóndigas inspirada en una receta de Oriente Medio.

La receta que os proponemos hoy está inspirada en todas ellas y, además, añadimos una yema de huevo sobre las sopas calientes en el momento de servir para que se cocine con el calor residual. Podría ponerse también un huevo poché o escalfarlo dentro de la propia sopa cascando el huevo dentro de la misma un par de minutos antes de retirarla del fuego.

A modo de consejo, recordar que el pan duro se corta muchísimo mejor con un cuchillo de sierra, lo que viene siendo un cuchillo para pan.

Cómo hacer la sopa de ajo más fácil (y rica)

Ingredientes

  • Ajo, 4 dientes
  • Cebolla mediana, 1 ud
  • Pimiento verde, 1 ud
  • Pimiento dulce, 1 cucharada (o mezcla de dulce y picante)
  • Comino, 1 cucharadita
  • Caldo de pollo o verduras, cantidad suficiente
  • Pan duro, 1/2 barra
  • Huevos, 1 por comensal
  • Chorizo, 1 ud
  • Jamón ibérico, 2 o 3 lonchas
  • Aceite de oliva virgen extra, 2 cucharadas
  • Sal, al gusto

Paso 1

Hacer sofrito

Paso 2

Añadir chorizo y especias

Paso 3

Añadir pan y caldo

Paso 4

Terminar con el huevo y el jamón

Paso 1

En una olla (o en un cazo grande si no vamos a cocinar muchas raciones) ponemos a calentar el aceite de oliva virgen extra con los ajos muy bien picados a fuego bajo.

Cuando el ajo empiece a 'bailar' y a desprender su aroma, añadimos la cebolla y el pimiento verde cortados en brunoise, subimos un poco el fuego, salamos al gusto y cocinamos a fuego medio hasta que las hortalizas estén pochadas.

Paso 2

Cuando la cebolla y el pimiento estén tiernos y hayan empezado a dorarse, añadimos el chorizo en rodajas, el pimentón dulce (o una mezcla de dulce y picante si así lo preferimos) y el comino. Si este último no te gusta, pues simplemente no se lo pongas.

Mezclamos todo y dejamos que se cocine todo junto durante un par de minutos más.

Paso 3

Añadimos el pan duro cortado en rebanadas finas, mezclamos todo para que el pan se embadurne con el sofrito que acabamos de hacer. Añadimos el caldo. Más o menos cantidad en función de si queremos una sopa más líquida, tipo sopa castellana, o más espesa, tipo açorda portuguesa; el único requisito es que haya caldo suficiente para mojar todo el pan.

Tapamos y dejamos cocinar a fuego bajo durante unos 12 - 15 minutos.

Paso 4

Separamos las claras de las yemas de los huevos. Reservamos las yemas y echamos las claras en la sopa mientras removemos sin parar. Retiramos del fuego, servimos inmediatamente y, en cada plato, ponemos encima una yema de huevo y una loncha de jamón ibérico cortada en trozos.