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Si hay un pescado que tenemos como saludable en el imaginario colectivo, puede que sea el salmón. Su llamativo color y unas cuantas buenas campañas de marketing han hecho que a casi nadie se le escape que este pescado es una fuente de proteínas y de ácidos grasos omega-3, los que son buenos para el corazón.
Su textura, algo más compacta que la de otros pescados, también ayuda a que el salmón sea el único pescado que comen los que son poco amigos del pescado en general. Pero tanto si se es amante del pescado como si no, la clave para disfrutarlo es que éste esté cocinado en el punto correcto. Precisamente, por esta textura compacta, si le damos una cocción inadecuada, se nos puede quedar seco, algo que no deseamos.
Existen múltiples técnicas para cocinar el salmón conservando su jugosidad, desde la cocción al vacío a baja temperatura hasta las cocciones al horno o al vapor, pero, a veces, no hay opción de aplicar técnicas que requieren de controles precisos de temperatura o uso de aparatos especiales y los buenos cocineros tienen trucos para eso.
[5 técnicas que necesitas saber ya para cocinar el salmón más jugoso que hayas probado nunca]
El chef británico Gordon Ramsay, mundialmente conocido por ser jurado de MasterChef en Estados Unidos y estar al frente de la versión anglosajona de Pesadilla en la Cocina, cuenta en la actualidad con siete estrellas Michelin en sus restaurantes y, a lo largo de su vida, ha compartido sus recetas en numerosos libros y programas de cocina.
Para cocinar un salmón perfecto sin más herramientas que una sartén, Ramsay dice que es clave conservar la piel que, en el caso de este pescado, es totalmente comestible. El pescado debe cocinarse primero sobre la piel, que quedará crujiente y deliciosa, pero también ayudará a mantener la jugosidad de la pieza de pescado.
[El truco para que el salmón al horno quede superjugoso y en su punto]
El truco del chef para que la piel se quede crujiente y el pescado se cocine rápido sin darle tiempo a resecarse consiste en hacer una serie de incisiones en la piel, apenas llegando a la carne tal como se puede apreciar en el vídeo compartido por el programa The F Word que os dejamos a continuación.
Ingredientes para hacer salmón al estilo de Gordon Ramsay
- Lomo de salmón con piel, 1 ud
- Sal
- Pimienta
- Ajo, 2 dientes
- Tomillo, unas ramitas
- Mantequilla, 2 cucharaditas
- Aceite de oliva, 1 cucharada
Paso 1
Dejamos atemperar el lomo de salmón para que no esté frío de la nevera en el momento de cocinarlo.
Paso 2
Con ayuda de un cuchillo muy afilado, le damos unos cortes paralelos en la piel penetrando ligeramente en la carne.
Paso 3
Salpimentamos generosamente el lomo de salmón masajeándolo bien para que los condimentos penetren por los cortes que hemos hecho.
Paso 4
Ponemos a calentar una sartén y, cuando esté caliente, echamos el aceite. Ramsay recomienda no poner el aceite con la sartén fría porque, si lo hacemos así, para cuando se caliente la sartén, el aceite se habrá quemado.
Paso 5
Ponemos el lomo de salmón en la sartén por el lado de la piel y lo cocinamos aplastando la pieza ligeramente con una espátula para que la piel quede lo más plana posible y totalmente en contacto con la superficie de la sartén.
Paso 6
Cuando la piel empiece a dorarse, damos la vuelta y cocinamos un minuto por el otro lado.
Paso 7
Damos otra vez la vuelta, dejándolo de nuevo sobre la piel, y añadimos los dos dientes de ajo pelado, las ramitas de tomillo y la mantequilla.
Paso 8
Cuando la mantequilla se funda, bañamos el salmón con la mantequilla fundida hasta que termine de hacerse.
10 razones para consumir salmón
Según explica la Fundación Española de la Nutrición en el Libro de la Alimentación Española, el salmón contiene altas cantidades de ácidos grasos monoinsaturados y omega-3 y es una fuente de proteínas y de algunas vitaminas del grupo B. También destaca el aporte de vitaminas D y E.
1. Es un pescado rico en ácidos grasos omega-3
El salmón es una buena fuente de ácidos grasos omega-3, esenciales para la salud del corazón y el cerebro. Estos ácidos grasos ayudan a reducir la inflamación, disminuyen la presión arterial y reducen el riesgo de enfermedades coronarias.
2. Contiene muchas proteínas
El salmón es una fuente de proteínas de alto valor biológico, al contener todos los aminoácidos esenciales. El consumo de proteínas es fundamental para la reparación y construcción de tejidos, así como para la producción de enzimas y hormonas.
3. Aporta vitaminas y minerales
Se trata de un pescado rico en vitaminas B12, A, D y E, además de minerales como el selenio, potasio y magnesio. Todos ellos son nutrientes necesarios para el correcto funcionamiento del sistema inmunológico y la salud ósea.
4. Mantiene el cerebro sano
Los ácidos grasos omega-3 presentes en el salmón también aportan beneficios a la salud de nuestro cerebro. Pueden mejorar la memoria y reducir el riesgo de trastornos neurológicos. El salmón es rico en triptófano, un nutriente que desempeña un importante papel en la síntesis de algunos neurotransmisores como la serotonina y la melatonina, que tienen un cometido importante en el bienestar emocional y en la calidad del sueño.
5. Es antioxidante
La astaxantina es el compuesto responsable del intenso color naranja del salmón, pero también es un antioxidante que puede ayudar a proteger las células del daño oxidativo y reducir la inflamación. La astaxantina también puede contribuir a la salud de la piel y protegernos contra los efectos dañinos de los rayos UV. Aquí hay que aclarar que el consumo de salmón no sustituye a otras medidas de protección de la piel frente a la radiación solar.
6. Protege la salud ocular
Los ácidos grasos omega-3 y la vitamina A son buenos aliados de la salud ocular. Pueden ayudar a prevenir enfermedades como la degeneración macular relacionada con la edad y el síndrome del ojo seco.
7. Ayuda a controlar el peso
El salmón es un alimento nutritivo y saciante. Su alto aporte de proteínas y grasas saludables produce sensación de saciedad evitando la ingesta de otros alimentos menos nutritivos.
8. Ayuda a controlar el colesterol
El consumo regular de salmón, así como de otros pescados azules, puede mejorar la salud cardiovascular al reducir los niveles de triglicéridos y aumentar los niveles de colesterol HDL (el conocido como colesterol bueno).
9. Para lucir una piel bonita
Los nutrientes y antioxidantes presentes en el salmón, como los ácidos grasos omega-3 y la astaxantina, pueden mejorar la salud de la piel, reducir la inflamación y ayudar a mantener la piel hidratada. Si, además, se consume la piel, tendremos un extra de colágeno.
10. Es muy versátil en la cocina
Su textura firme y el hecho de tener muy pocas espinas puede que sean alguna de las razones por las que este pescado es tan valorado en la cocina. Puede consumirse crudo en sushi, sashimi, tiradito, ceviche o tartar. Puede cocinarse al horno, al vapor, a la brasa o a la plancha utilizando solo una sartén.