Este carpaccio de remolacha con burrata, piñones y aceite de hierbabuena es una opción refrescante y original para disfrutar de una ensalada diferente y llena de contrastes. Esta receta es muy fácil de hacer, en apenas cinco minutos se prepara, y combina la suavidad de la burrata con la dulzura terrosa de la remolacha, los piñones crujientes y el toque fresco del aceite de hierbabuena. Esta hierba se podría cambiar perfectamente por albahaca o hinojo también.

Para conseguir esta deliciosa ensalada, es necesario empezar por preparar la remolacha. Se puede utilizar remolachas crudas o cocidas, dependiendo de la preferencia de cada uno. Si se opta por las remolachas crudas, hay que asegurarse que al cocerlas quedan tremendamente tiernas para poder lonchearlas de forma fácil. Si se quiere ayuda al respecto, siempre se puede optar por una máquina corta fiambres

A continuación, se disponen las rodajas de remolacha en un plato, formando una capa en el fondo. Sobre las rodajas de remolacha, se coloca la burrata en el centro, desmenuzándola ligeramente para que se distribuya de manera uniforme. La burrata, con su cremosidad y sabor suave, aporta un contraste perfecto. A los amantes de este queso italiano tan famoso también les gustará la ensalada de calabacín asado y burrata, la sopa de tomate y burrata o los tacos de boniato, burrata y pesto de rúcula.

Para los amantes de este formato vegetal, también funciona muy bien el carpaccio en crudo con calabacín, que podría llevar por encima zumo de limón, tomate seco y un poco de queso parmesano. Otra opción podría ser el carpaccio de champiñones o boletus, estos quizás únicamente aliñados con un buen aceite de oliva, algo de pimienta negra recién molida y un poco de sal.

Dicho todo lo anterior, es cierto que a la remolacha o la amas o la odias. Hay muchísimos detractores de esta por ese sabor terroso que se ha mencionado, pero hay varias formas de enmascararla ligeramente para que empiece a gustar a todos. Un ejemplo de ello es regarla con cítricos que distraigan ligeramente su sabor y otro es aportarle un toque ahumado o bien con aceite de humo o dorándolas en una brasa o parrilla. Los que la aman seguro que ya han probado recetas tan deliciosas como la sopa de remolacha, la ensalada de remolacha con huevo y sésamo, los espaguetis con pesto de remolacha, la ensalada de remolacha con hinojo y caqui o el tiradito de salmón con yuzu y remolacha. 

Cómo hacer carpaccio de remolacha y burrata

Paso 1

Si no tuviésemos las remolachas ya cocidas, habrá que pelarlas bien, quitar los tallos y cocerlas en abundante agua con un poco de sal, a fuego suave, hasta que al pincharlas estén tiernas. Si disponemos de ellas ya cocidas sólo tendremos que lonchearlas finamente, para que quede como un carpaccio de ternera. La gracia es simularlo.

Paso 2

Disponer todas las rodajas de remolacha en el plato, como a cada uno le guste, lo ideal es que una esté superpuesta a la otra ligeramente.

Paso 3

Escurrir bien la burrata del agua en la que viene y poner en el centro del plato, abriéndola ligeramente para que se desparrame un poco encima de la remolacha.

Paso 4

Picar la hierbabuena finamente y añadir al aceite mezclando bien con un poco de sal y de pimienta negra. Regar la remolacha y la burrata con este aceite.

Paso 5

Terminar el plato añadiendo los piñones por encima. Si se quisiera, podrían ser piñones tostados ligeramente sobre una sartén o al horno.