Preparación: < 2 min  Cocción: 1 h  Dificultad:  1/5  Raciones:  2  Coste:  < 8 €

Si vivís fuera de Galicia es muy probable que nunca hayáis oído hablar de la Carne ó caldeiro – carne al caldero-, pero aquí en mi tierra es algo tan popular como el caldo, el lacón con grelos o la empanada.

De hecho yo lo considero la versión carnívora del pulpo á feira, pues son recetas muy similares en cuanto a preparación. Bueno, a decir verdad, en las recetas de cocina gallega en las que lo que importa es destacar la materia prima no nos complicamos mucho la vida con adornos y las elaboraciones son sencillísimas.

Preparación de la Carne ó caldeiro

Si la hacemos en olla normal a fuego lento necesitaremos unas dos horas de cocción a fuego lento o un poco más si dejamos los trozos muy grandes, pero se ahorra tiempo si se hace parte de la cocción en olla a presión.

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En la olla a presión ponemos la carne cortada en trozos, la zanahoria pelada, el apio y los tallos de los puerros, cubrimos con agua y añadimos sal al gusto -aproximadamente una cucharadita rasa por cada litro de agua-.

Cerramos la olla a presión, esperamos a que suba la válvula y cocinamos durante el tiempo que indique el fabricante de la olla. En mi caso lo dejo 40 minutos.

Apartamos del fuego, dejamos que salga el vapor y abrimos la olla. Comprobamos que la carne esté ya casi hecha, porque lo que buscamos es que cuando hayamos terminado de cocinar las patatas que añadiremos ahora, la carne esté tiernísima.

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Echamos las patatas peladas y cortadas en mitades. Y un truco, si la carne ya estuviese muy tierna cortamos las patatas en rodajas para que se hagan antes, si no, pues en mitades o incluso enteras si vemos que la carne todavía necesita más tiempo. Mientras se cuecen las patatas no cerramos con presión, sino que colocamos la tapa tal y como veis en la foto.

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Cuando las patatas estén cocidas, servimos echando un chorrito de aceite de oliva virgen extra por encima, espolvoreando con pimentón de La Vera, dulce o picante, según se desee y, opcionalmente, se pueden añadir algunas escamas de Sal Maldon.

Resultado

Que no os eche para atrás la sencillez de la receta, pues si se trata de una carne de calidad, esta carne ó caldeiro es un plato que disfrutaréis muchísimo en los días de frío.

Por supuesto, el agua de cocción guardadla como oro en paño, que será una delicia si se usa como base para cualquier sopa o un buen arroz.