Con la llegada de los primeros días soleados, de la misma manera que apetece quitarse los abrigos y las botas, apetecen recetas más ligeras y sencillas, más verduras de temporada -eso no significa comer ensaladas a todas horas- y recetas que llenen nuestros platos de color.
Las frutas de la primavera
Con la llegada del buen tiempo hacen su aparición en los mercados algunos de los alimentos que más suelen gustar y ahora es el mejor momento para consumirlos.
Las frutas más típicas de la época primaveral se caracterizan por tener colores intensos y ser muy fáciles de consumir. Las fresas, las cerezas, los arándanos o los nísperos, entre otras, son algunas de las piezas más comunes entre los meses de marzo y junio.
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Fresas. Las fresas son uno de los alimentos de temporada en primavera por excelencia. De hecho, las fresas en sí mismas, nos recuerdan a la primavera. Una fruta fresca, colorida y muy, muy sabrosa que nos aporta mucha vitamina C, tiene pocas calorías y un gran contenido en agua.
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Nísperos. Los primeros nísperos de la temporada suelen llegar en abril, aunque mayo es el mes por excelencia en el que los podemos encontrar más ricos. Además, son muy apropiados para quienes no comen fruta por la pereza de pelarla, pues la piel del níspero es sencillísima de quitar.
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Cerezas. Las cerezas, otro de los alimentos de temporada en primavera por excelencia, suelen llegar a los mercados algo más tarde que las fresas. Es en mayo cuando empezamos a encontrarlas ricas y sabrosas, y son todo un lujo para el paladar.
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Arándanos. Los arándanos son otros de esos alimentos de temporada en primavera que llega ya cuando esta época llega a su fin. Son antioxidantes y antisépticos, y seguro que habéis escuchado que son muy recomendables para prevenir (que no curar) las infecciones urinarias. Además, su característico sabor y color otorga a esta fruta silvestre una personalidad única.
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Albaricoques. Los albaricoques empiezan a hacer acto de presencia al final de la primavera. Aunque son muy consumidos como fruta fresca, también suele prepararse con ellos mermelada de albaricoque. Esta la podemos tomar en tostas, pero también para preparar salsas de acompañamiento a la carne. Le da un punto dulce riquísimo.
Las hortalizas de primavera
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Habas. Las primeras habas llegan con el comienzo de la primavera, y para muchos son sus preferidas, pues estas primeras remesas de habas son de menor tamaño, normalmente. Puede que no sean uno de los alimentos de temporada en primavera preferidos de la gente, pero se les puede sacar mucho partido. Son una gran fuente de fibra para el organismo.
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Guisantes. Los guisantes son también uno de los alimentos de temporada en primavera. Las vainas de guisantes salen para esta época, y son, igual que las habas, muy ricos en fibra.
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Espárragos verdes. Probablemente en la actualidad puedas encontrar espárragos verdes o trigueros todo el año, pero su temporada local es la primavera. Están riquísimos salteados con diferentes productos, como jamón, foie, setas… O también en pizzas, cremas o como guarnición de acompañamiento a muchos platos.
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Alcachofas. Aunque la apariencia de la alcachofa no sea la más atractiva, su carne es tierna y sabrosa como pocas verduras. Y sí, es otro de los productos típicos de la primavera. ¿las has probado, por ejemplo, fritas? ¡Toma nota!
Las carnes y los pescados de primavera
Pero no solo las frutas y verduras tienen su propia temporada. Las carnes y pescados, también. Y es que los animales cuentan su propio ciclo biológico, lo que provoca que sea más apropiado consumirlo en una época u otra del año. Las carnes y pescados de temporada se caracterizan por disponer de más carne y de mejor calidad y, además, debido a los ciclos de reproducción, suele haber más ejemplares disponibles para su caza o pesca.
Pescados
La primavera y el verano son las estaciones ideales para consumir pescados azules en temporada. Es el tiempo del atún, las anchoas, la caballa, las sardinas, los jureles… También podemos disfrutar de bacalao fresco, merluza, lenguado, rape o congrio. En cuanto al marisco, podremos disfrutar del final de temporada durante las primeras semanas de primavera, pero llegado el mes de mayo habrá que despedirse de él hasta finales del verano.
Carnes
Si hablamos de carnes, lo cierto es que la disponibilidad suele ser continua a lo largo de todo el año. Y esto es así porque la mayoría de las explotaciones ganaderas son intensivas (para entendernos, más industriales y ciertamente artificiales).
Sin embargo, debemos tener en cuenta que existen unas vedas de cazas en todo el país que marcan en cierto modo la temporada de los productos de caza, como la liebre, las codornices, el conejo de monte o el jabalí, por ejemplo.
En primavera podemos consumir las últimas piezas de carne fresca de cochinillo, así que, si nos gusta este producto, debemos tenerlo en cuenta. A partir de estos meses los cochinillos crecen y dejan de ser cochinillos, por lo que la carne suele ser congelada.
11 recetas de primavera para chuparte los dedos
La sopa agripicante de verduras de primavera, no deja de ser una sopa de verduras (como podría ser una de aquí o una minestrone), pero con el añadido especial de vinagre y del picante que más os guste, que se sirve de la temporada y de aquellos restos que tenemos dando vueltas por la nevera y que no sabemos muy bien qué hacer con ellos. Pero es que, además, es ideal para salir de la rutina, vegetalmente hablando, y para tomarla en esta época que todavía sigue acechando el fresco.
Los huevos revueltos son una de esas recetas salvavidas que sirven para cualquier momento y en cualquier época del año, pues admiten muchos ingredientes dependiendo de la temporada. Icono de los desayunos de los domingos por excelencia, lo mismo sirven para sorprender a nuestra pareja con un almuerzo digno de los dioses o para solucionarnos una cena rápida en la que no tenemos muchas ganas de cocinar.
La carbonara es una de las recetas más populares de Italia, al menos fuera del país de la bota. Sin duda alguna, es una de las recetas de pasta por la que se ha dado a conocer su maravillosa gastronomía.
Para esta receta se necesita poco tiempo, ingredientes de calidad y ganas de trasladarse a Italia sin la necesidad de comer pasta. Las judías verdes así, a la carbonara, quedan increíbles.
Para preparar huevos revueltos hay varias técnicas y en esta receta utilizamos un poco de nata añadida a la mezcla de los huevos que ayudará a dar cremosidad y una cantidad superior de yema que de clara de huevo. La razón de esto es que las yemas tienen una temperatura de cuajado superior que las claras y nos permiten una cocción mayor y más suave sin convertirse en tortilla.
El congrio en salsa de azafrán es una de esas recetas clásicas y añejas de la cocina tradicional española que poco a poco van perdiéndose y que vale la pena reivindicar para que no vayan desapareciendo paulatinamente de nuestros fogones de nuestras casas. Si te encuentras un congrio en el mercado, recuerda esto y dale una oportunidad a esta receta.
¿Has hecho un asado para comer y te ha sobrado algún trozo? Si es así, estás de suerte, porque te vas a chupar los dedos a la hora de la cena con esta tosta de jamón. Cocina de temporada también es aprovechar las sobras.
Aunque si no tienes sobras, esa lata de atún que tienes perdida por la alacena también te va a permitir relamerte de gusto con esta otra tosta de atún. Que no todos los días tiene una tiempo de pasar por el mercado.
Con vistas a esas nuevas rutinas primaverales, lo que más se agradecen son recetas fáciles de preparar, sabrosas al paladar y consideradas con el bolsillo como esta crema de puerros y guisantes, que se puede tomar templada en estos primeros días de calorcito o caliente si es que alguna noche refresca, pues la temporada de puerros dura hasta el final de la primavera.
Otra opción de crema de verduras de primavera que puede tomarse fría o caliente según nos apetezca en ese momento.
Un sabroso plato de cuchara con aires marineros: un delicioso guiso de sepia con salsa de verduras, que acompañaremos con unas alcachofas frescas y unos guisantes.
Esta no es una receta cualquiera de pollo guisado. Sí que es una forma fácil más para cocinar pollo y triunfar y también para utilizar guisantes y menta, una combinación que en ciertas zonas de España (Cataluña) es muy utilizada.