El bar de Terrassa que recupera las mejores tapas de los años 80: caracoles, pinchos y brazo de gitano
La taberna, abierta desde 1952, está a cargo del cocinero Artur Martínez.
7 febrero, 2024 06:00El negocio familiar del chef Artur Martínez (al frente de Aürt en Barcelona, con una estrella Michelin) inicia nueva etapa. El restaurante El Buen Gusto, inaugurado por sus abuelos Juan e Isabel en Terrassa allá por 1952, quiere recuperar la cultura de bar de los años 80 ofreciendo a los clientes las tapas más tradicionales. "Esas recetas de toda la vida, muchas en extinción, ya no se encuentran en los bares de hoy en día", lamenta Martínez.
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Así pues, el objetivo es convertir el local en "un punto de encuentro para nostálgicos del vermuteo y el tapeo tradicional", una costumbre que antiguamente se disfrutaba mientras se echaba una partida de dominó o se jugaba a las cartas.
En sus inicios, el bar de los abuelos de Artur sobresalía por sus platillos de elaboración casera que acompañaban con vinos, cañas y vermuts, como los que ahora elabora el chef junto al Celler Can Morral del Molí. De todas aquellas recetas transmitidas de generación en generación, Martínez ha seleccionado para esta nueva fase las que le recuerdan a su infancia y a la época en la que se enamoró de su profesión.
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Por tanto, de ahora en adelante en El Buen Gusto podréis encontrar bravas como las de antaño, pinchos morunos, caracoles, pulpo en salsa, huevos y calamares rellenos, mollejas de pollo al ajillo o brazo de gitano, entre otros bocados. Y, sobre todo, la joya del restaurante: su croqueta de pollo asado, un éxito en ventas incluso cuando el negocio funcionaba sólo como tienda durante la pandemia. "Platillos que forman parte de mi genética como cocinero y que quiero recuperar en El Buen Gusto para el disfrute también de las generaciones más jóvenes", ha expresado Martínez.
El Buen Gusto, que ya se encuentra abierto las noches de miércoles a sábado y los sábados y domingos a mediodía, están presentes dos profesionales de la máxima confianza de Artur Martínez: Rodrigo Quijano y Raúl Navarro, que estarán a cargo de la cocina y la sala. Este nuevo periodo para El Buen Gusto significa también el relevo generacional del negocio, puesto que los padres del chef pasarán a disfrutar de su establecimiento sólo como clientes. La renovación de El Buen Gusto es el primero de los muchos proyectos que Artur Martínez tiene previstos para este año, como han anunciado desde la organización.