El kebab es una carne habitual en lugares como Turquía, Irán, Pakistán o La India. Se caracteriza por estar picada y adobada y procede normalmente de la ternera o el cordero, ya que en la idiosincrasia de estos países no está permitido consumir cerdo.

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El más conocido en España es el döner o dürüm kebab, donde la carne se cocina ensartada en un pincho a las brasas que se va girando para que se caliente bien por todas partes. Posteriormente, se usa para rellenar un pan de pita abierto por la mitad o un pan plano enrollado que se condimenta con salsas y verduras. 

Este tipo de carne con dicha presentación es muy popular en nuestro país, por tratarse de un alimento que suele gustar a todo el mundo y que resulta muy económico, por lo que su consumo suele ser bastante frecuente, especialmente entre la gente más joven, y podemos encontrar tiendas de kebab en numerosos puntos de las ciudades. 

En el caso de Barcelona, hay una tienda de kebab en concreto que destaca especialmente sobre las demás y que recomienda el youtuber Ibai Llanos. Se trata de la cadena Mustafa's Gemüse Kebap, con tres establecimientos en la capital catalana: uno en la calle Creu Coberta (el primero que abrió), otro en la calle Nou de la Rambla y un último en la Rotonda de Sant Antoni. 

Se ha hecho conocido porque se dice que es el el mejor kebab de todo Berlín. Mustafa, el propietario, inauguró allí su primer puesto y poco a poco fue ganando popularidad entre los vecinos. De hecho, se dice que suele tener un tiempo de espera mínimo de 30 minutos y se ha podido ver a famosos como Kanye West y Bianca Censori degustándolo por las calles berlinesas.

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Lo que les hace brillar sobre otras marcas es su ensalada iceberg, su salsa picante, sus patatas asadas estilo panaderas y sus verduras a la brasa (calabacín y pimiento), que agregan en grandes cantidades. Además, para adobar la carne emplean una mezcla original de especias y hierbas que ofrece un sabor distintivo a sus kebabs. 

Los dürüm de kebab se venden en torno a los cinco euros y también ofrecen alternativas vegetales con falafel por cerca de cuatro euros. Los clientes suelen destacar su sabor a brasa vegetal que se diferencia enormemente de los que pueden degustarse en otros lugares.