Llevamos tres semanas de cuarentena y todo apunta a que vamos a estar como mínimo otras tres semanas más. Los expertos dicen que los humanos tardamos tres semanas en adquirir hábitos nuevos, por lo que, en teoría, la parte más dura de este aislamiento obligado ya la hemos pasado. Aún así, cuando hablamos de hacer la compra no debemos olvidar lo especial de esta situación y tomar conciencia de cuáles son las mejores opciones a la hora comprar en el súper.
Hace unos días os contaba, en líneas generales, cómo organizar la compra semanal de alimentos y hacía hincapié en los tipos de alimentos y cantidades que necesitaría un adulto para alimentarse correctamente durante una semana. A algunos puede pareceros poca cosa, pero es que un adulto con una actividad física moderada, que salvo excepciones, es la situación que tenemos todos estos días, no es necesario comer más.
Alimentos a evitar durante la cuarentena
Por un lado, ahora que no nos queda más remedio que estar en casa a la hora de comer, aunque tengamos más o menos en función de si tenemos que continuar trabajando en casa, lo tenemos mucho más fácil para cocinar y es algo que deberíamos aprovechar para hacer elecciones saludables. Es el momento de probar nuevas recetas con esas alimentos saludables que probaste alguna vez pero no te hicieron demasiada gracia, de empezar a retirar gran parte del azúcar de la dieta haciendo tus propios dulces en los que puedes controlar el tipo y la cantidad de azúcares tanto como quieras.
Productos ultraprocesados
Lo primero es no confundir productos procesados como puede ser una conserva de legumbres, pescado o verduras al natural que son perfectamente válidos para llevar una alimentación saludable y que son muy cómodos cuando se dispone de poco tiempo para cocinar y los alimentos ultraprocesados que contienen grandes cantidades de féculas, azúcares y sal como sucede en el caso de platos precocinados y de muchos fiambres. Pensad por ejemplo en el fiambre o jamón de York, que solo tiene un 55% de jamón... imaginaos qué es el resto. En general, los embutidos curados y las chacinas suelen tener mejores composiciónes nutricionales.
Mención especial requieren aquellos precocinados que para su consumo necesitan pasar por la freidora, pues con los fritos el número de calorías se dispara.
Los snacks tipo patatas fritas también son un peligro estos días, por eso es mejor dejarlos en la estantería del supermercado. Si te entra el antojo, tira de estas patatas fritas de microondas que no llevan apenas aceite, o de estos chips vegetales o incluso de unas palomitas de maíz natural hechas en el microondas sin nada de grasa y que puedes sazonar a tu manera -si las rocías con un poco de zumo de lima y unas vueltas de pimienta recién molida están que te mueres de lo ricas que están-.
Bebidas azucaradas
Las bebidas azucaradas, para empezar añaden un volumen y peso a tu compra que si vas tu solo a comprar -que así debe ser por ley- y vas andando al supermercado del barrio -que también debes hacerlo así, porque debes evitar en lo posible el ir de un supermercado a otro a no ser que en el primero no haya nada- te dificultarán mucho el poder comprar para varios días.
Por otro lado, se trata de bebidas que no te aportan nada bueno, así que es un buen momento para que las destierres de una vez por todas de tu dieta. Y si eres de los que te cuesta beber agua sola, siempre puedes saborizarla y aromatizarla con ingredientes naturales para hacer tus propios refrescos caseros sin burbujas y con burbujas.
Bollería y pan industrial de harina refinada
A juzgar por le número de bizcochos y panes caseros que estamos viendo estos días en las redes, parece que esto ya está bastante claro. Aún así, no está demás recordar que la bollería industrial suele estar cargada de grasas y azúcares y ni siquiera está tan buena cuando la comparas con cualquier bollo o pastel hecho por ti.
Algo parecido sucede con el pan, si decides comprar intenta que sean panes integrales de calidad y si te animas a hacerlo, mejor aún. Desde ya te digo que el primer pan que salga de tu horno, a pesar de los defectos que pueda tener, que seguramente los tendrá, te va a gustar mucho más que cualquier pan supuestamente especial por el que te hayan cobrado una fortuna en el pasado.
Pescados que no estén en temporada
A la hora de comprar pescado, es cierto que muchos supermercados no disponen de pescadería y la única opción para comprar pescado es la sección de congelados. En ese caso daría igual si el pescado está o no en temporada, pero si tienes opción de adquirir pescado fresco de temporada no lo dudes, por ejemplo, este mes las caballas están en su mejor momento y su carne recuerda en sabor y textura a la del bonito, por lo que puedes usarla para cocinar a la plancha, al horno, en guisos e incluso cocinarla en aceite para guardarla en conservas como si fueran de atún y usarla para ensaladillas, empanadas, etc