El nutricionista Pablo Ojeda continúa dando consejos de salud a través del programa Más vale tarde de LaSexta, donde responde a las preguntas de los espectadores a través de su consultorio 'Pregúntale a Ojeda', en el que los televidentes le trasladan muchas dudas acerca de la alimentación.
Uno de ellos preguntó al experto en nutrición acerca del ayuno intermitente, cuestionando si es tan saludable como dicen muchas personas. Esta es una forma de estructurar la alimentación y el horario de comidas que está muy de moda y que consiste en ayunar durante varias horas al día y comer en ciertos periodos de tiempo.
Al respecto de este método de alimentación, Ojeda ha asegurado que los estudios científicos recalcan que el ayuno intermitente "tiene buenas propiedades", y que, "al tener una ingesta menor de calorías, lógicamente vas a perder peso", si bien ha revelado una condición indispensable para poder adelgazar con esta forma de alimentarse.
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Para ello, el experto ha recalcado que antes se debe cambiar la forma de comer, ya que antes de afrontar un ayuno intermitente considera imprescindible que se haya aprendido a comer bien, ya que, si no, los resultados distarán mucho de ser los deseados, además de que podría llevar a sufrir algunos problemas de salud.
Por otro lado, Pablo Ojeda explicó que el ayuno intermitente no es para todo el mundo, ya que la nutrición debe ser individualizada, sobre todo cuando los trastornos de la conducta alimentaria son una de las principales causas de enfermedad crónica entre los adolescentes en la actualidad. También recalcó que la forma de ayuno intermitente con más beneficios es el 16/8, en el que durante 16 horas no se come nada y en las 8 horas restantes se comen las calorías que correspondan.
Beneficios del ayuno intermitente
El ayuno intermitente tiene diferentes beneficios para la salud, entre los que tenemos que destacar uno por el cual son muchas las personas que deciden ponerlo en práctica, que es el de ayudar a adelgazar, aunque para ello, tal y como recuerda Pablo Ojeda, es fundamental combinarlo con unas buenas prácticas alimentarias. Si se deja de cenar y el cuerpo está al menos 12 horas sin recibir alimento, el organismo recurrirá a las grasas para quemarlas y usarlas como energía.
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Por otro lado, ayuda al organismo con la autofagia, es decir, que ayuda a las células para que estas se regeneren y se encuentren en un óptimo estado de salud, además de contribuir a unas mejores digestiones. Darle cierto respiro al tracto digestivo es positivo para poder sufrir menos gases, así como una menor pesadez estomacal y mejores digestiones, reduciendo la inflamación de la barriga y de los órganos vinculados con el sistema digestivo, que descansan más tiempo y se reparan.
A todo lo anterior hay que sumar sus ventajas para reducir los triglicéridos en la sangre y los niveles del colesterol "malo" (LDL), por lo que el ayuno intermitente puede ser un aliado para regular el colesterol. También se ha relacionado esta forma de alimentación con beneficios frente a las enfermedades autoinmunes, para prevenir enfermedades neurológicas, de cara a reducir el trastorno por déficit de atención y los ataques epilépticos, para prevenir y tratar el cáncer e incluso para poder disfrutar de un aumento de la longevidad.
Contraindicaciones del ayuno intermitente
Sin embargo, no todo es positivo cuando hablamos del ayuno intermitente, donde podemos encontrar diferentes contraindicaciones comunes, comenzando por el hecho de poder sufrir dolor de cabeza e incluso mareos. Este problema se da porque los niveles de insulina bajan a causa del ayuno, provocando que puedan darse efectos secundarios como los indicados, que son más frecuentes al comienzo de la dieta, y que, a menudo que se va adaptando el cuerpo, son cada vez menos habituales.
Por otro lado, puede provocar diarrea, sobre todo cuando se hace ayuno tras haber consumido una gran cantidad de hidratos de carbono, así como problemas para ganar músculo. Si estás llevando a cabo una rutina de entrenamiento enfocada a hacer crecer tus músculos, el ayuno intermitente puede perjudicarte, ya que para incrementar la masa muscular es necesario que exista un superávit de calorías, sobre todo de proteínas, y en este método de alimentación es posible que no se llegue a conseguir.
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A los problemas mencionados hay que sumar el mal aliento, que puede venir dado por la cetosis que tiene lugar en el interior del cuerpo, y la quema de grasa, que al metabolizar los ácidos grasos puede derivar en un problema de halitosis.
También podría llegar a ocasionar problemas de ansiedad, ya que aquellas personas acostumbradas a comer 5-6 veces al día, pueden tener complicado adaptarse a este cambio de hábito, siendo más evidente sobre las horas de ayuno. Aunque se pueden tomar infusiones sin problemas durante el ayuno, no se puede ingerir comida y esto puede hacer que no se descanse bien durante la noche o que lleguen a elevarse más de lo deseado los niveles de ansiedad, con lo que ello puede suponer para la salud.
Relacionado con todo lo anterior, hay estudios que hablan de cambios de humor e irritabilidad al comenzar con el ayuno intermitente, aunque al igual que sucede con otras de sus desventajas, en algunos casos tan solo se dan en las primeras fases, en las que el cuerpo debe acostumbrarse a un nuevo patrón de alimentación. En todo caso, conviene ponerse en manos de especialistas antes de afrontar una dieta de este tipo.