Cómo saber si alcanzas los nutrientes clave para tu salud ósea y articular

Ingerir los nutrientes necesarios en la dieta es fundamental para mantener una buena salud y cuidar nuestro cuerpo, dado que todos los necesitamos para realizar una variedad de funciones vitales, desde el crecimiento y la reparación celular hasta la producción de energía y la regulación de procesos metabólicos.

El calcio, por ejemplo, es uno de los nutrientes más importantes para el cuerpo humano, dado que tiene un papel imprescindible a la hora de prevenir diferentes enfermedades. Además, resulta fundamental para ayudarnos a mantener los dientes fuertes y saludables, regular el ritmo cardíaco y garantizar una función muscular y nerviosa adecuada. 

Además del calcio, nutrientes como el magnesio, la vitamina D y la vitamina C también influyen significativamente en el mantenimiento de una buena salud ósea, muscular y articular. Sin embargo, el 80% de la población española no alcanza las ingestas diarias recomendadas de estos nutrientes, según indican los resultados del Calciometro, la calculadora online original de Puleva que han completado ya más de 150.000 personas para conocer la cantidad de calcio que consumen.

Esta herramienta fue desarrollada por el Instituto Puleva de Nutrición, entidad que ha dado un paso más en su estrategia y ha lanzado recientemente el Calciometro Plus, una evolución de la calculadora online que, a diferencia del Calciometro original, está diseñada para medir también otros nutrientes fundamentales.

Esta versión avanzada no solo evalúa cuánto calcio consumimos diariamente, sino que también considera otros nutrientes, como el magnesio y las vitaminas C y D, esenciales para el mantenimiento de una estructura ósea robusta y de la funcionalidad muscular y articular. Así, con esta herramienta los usuarios pueden ser más conscientes de cómo su dieta afecta a su salud.

¿Cómo funciona? Los usuarios que accedan al Calciometro Plus realizarán una pequeña encuesta sobre sus hábitos alimenticios, donde se incluyen preguntas sobre la cantidad de leche, quesos, bebidas vegetales, legumbres, pescados y huevos que consumen semanalmente. Y, en función de la edad, la herramienta calculará qué porcentaje de la recomendación diaria está consumiendo cada persona, indicando si está por encima o por debajo de la ingesta recomendada.

Leche enriquecida como alternativa

Tras el lanzamiento del Calciometro original, se pudo observar que cuando la leche consumida era clásica (entera, semidesnatada o desnatada), tan solo los niños de 4 a 9 años alcanzaban las recomendaciones de calcio, dado que el resto de los rangos de edad estaban por debajo, especialmente las mujeres embarazadas, que apenas alcanzaban el 65% de la ingesta recomendada.

Como solución a la falta de calcio y otros nutrientes nace la leche enriquecida de Puleva. De hecho, la marca ha observado que existe una relación directa entre la penetración de las leches enriquecidas en calcio, vitaminas y magnesio en los hogares y en qué edad se alcanzaban las recomendaciones. 

Concretamente, se ha podido comprobar que las ingestas diarias de calcio aumentaban en el tramo de 65 años, especialmente cuando se consumen leches enriquecidas, cifras que coinciden con los datos de penetración ofrecidos por la consultora Kantar. Así, este tramo de edad se convertía en el segundo segmento de la población con más hogares consumidores de leches enriquecidas, después de los niños. Además, cabe destacar que el 60% de la población de más de 65 años declaró haber comenzado a tomar medidas para ir incorporando alimentos con mayor contenido de calcio en su dieta. 

En definitiva, consumir leche enriquecida con calcio se ha convertido en una solución, más que evidente para alcanzar las recomendaciones diarias. De hecho, al sustituir un vaso de leche normal por otro de leche enriquecida con calcio, magnesio y vitaminas C y D, como la leche Vita Calcio de Puleva, se ha observado que sí se alcanzan las recomendaciones de ingesta diaria, excepto en el caso de las mujeres embarazadas, que se quedaba en el 90%, y en el de las personas mayores de 65 años, que llegaban al 91%.