El epidemiólogo y secretario del comité de expertos de Castilla y León frente al covid, Ignacio Rosell

El epidemiólogo y secretario del comité de expertos de Castilla y León frente al covid, Ignacio Rosell

Sanidad

Los sobrecogedores recuerdos de los expertos que gestionaron el Covid en CyL: "No estábamos preparados, pero lo dimos todo"

El secretario del comité de expertos de la Comunidad frente al Covid, Ignacio Rosell, revela cómo trabajaron en esos "momentos críticos y de agotamiento" que vivieron desde dentro.

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Puede parecer increíble, pero ya han pasado cinco años del Covid, de aquel aterrador e inesperado suceso que causó millones de muertes y dejó a España y al mundo entero sumido en una mezcla de sentimientos en los que la pena, el pánico, la incertidumbre y, sobre todo, la desolación, desempeñaron un papel protagonista. 

Una terrorífica realidad que dejó calles vacías, hospitales colapsados, familias desoladas por no poder despedir a sus seres queridos, víctimas de la terrible enfermedad, y profesionales sanitarios y Fuerzas y Cuerpos de seguridad del Estado completamente saturados. Una auténtica pesadilla para todos los ciudadanos. 

Parece que fue ayer cuando empezó todo. Cuando el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció la declaración del estado de alarma en toda España y, con ello, el confinamiento de todos los españoles. Tal día como hoy hace cinco años.

Una enfermera en una UCI durante la pandemia en imagen de archivo.

Una enfermera en una UCI durante la pandemia en imagen de archivo. EP

En todo este tiempo, mucho se ha comentado sobre cómo vivió la pandemia la gente de a pie y cómo lo hicieron sanitarios, policías, militares, farmacias, trabajadores de supermercados... Pero ¿cómo lo vivieron quiénes lo gestionaron? ¿hicieron realmente todo lo que estaba en su mano?

De todo ello ha hablado el epidemiólogo y especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública, Ignacio Rosell, secretario del comité de expertos que se creó en Castilla y León frente al Covid y, por tanto, una de las voces de referencia en el asesoramiento y adopción de medidas sanitarias durante los meses más duros de la pandemia en la Comunidad. 

Era día 2 de marzo de 2020. Rosell trabajaba en la Dirección General de Salud Pública, y el comité, presidido por la que fuera consejera de Sanidad, Verónica Casado, con Carmen Pacheco, la entonces directora general de Salud Pública, como vicepresidenta, afrontaba su primera reunión. 

Días antes, cuando afloraron los primeros casos de Covid en Castilla y León, le llegó la propuesta de formar parte del comité de expertos, también integrado por empleados del Sistema Público de Salud y Sacyl, desde médicos de familia y enfermeros, hasta epidemiólogos, especialistas en medicina preventiva y cuidados intensivos, internistas y microbiólogos. 

Un comité creado con el objetivo de "planificar actuaciones y respuestas de cara al Coronavirus", también conocido como Covid-19.

El epidemiólogo no se lo pensó. "Por supuesto que sí, lo que haga falta", respondió. Todo, con la intención de aportar su granito de arena en una intensa batalla que recuerda como "muy dura, dramática y aterradora". 

"Todavía no había mortalidad ni otras informaciones que pudieran haber hecho planteable crear el comité con mucha más antelación. Además, lo hicimos más o menos en paralelo con el resto de comunidades autónomas y el Ministerio de Sanidad, o sea que los tiempos fueron más o menos los adecuados", asegura. 

Ese primer encuentro, al cual se enfrentaron en un momento de "mucha incertidumbre y sin saber el tsunami que se nos estaba echando encima", fue el punto de partida de una experiencia en la que tanto él como el resto de sus compañeros vivieron "momentos críticos, de agotamiento y de sentirnos sobrepasados". 

"De lunes a domingo"

Rosell explica que el trabajo del comité consistía en coger información de todo lo que se iba publicando, tanto por parte de la Organización Mundial de la Salud como del Ministerio de Sanidad y la "literatura científica" sobre el virus, "que al principio era muy confusa".

Tras ello, la analizaban, valoraban qué medidas tenía sentido aplicar y cuáles no, e iban "planificando la respuesta adecuada para cada situación". 

"Se trataba de ir acumulando la evidencia de lo que se tenía, para trasladarlo lo antes posible a los centros sanitarios y tomar decisiones comunes sobre cómo hacer las cosas". 

También de "defender la importancia de que hubiese equipos de protección para todos y buscar la forma de adquisición para hacerlos llegar". "Fue una guerra por conseguir material", recuerda.

Y así, hasta el 30 de diciembre de 2021, cuando se celebró la última reunión del comité de expertos, el cual, según Rosell, "jamás se ha disuelto". 

Personal sanitario del hospital Virgen Vega de Salamanca en el aplauso a los sanitarios de cada tarde.

Personal sanitario del hospital Virgen Vega de Salamanca en el aplauso a los sanitarios de cada tarde. Efe

En definitiva, una labor que les suponía trabajar "de lunes a domingo" sin descanso y a la que se sumó "el impacto psicológico de ver cómo se iban complicando las cosas", afirma.  

En el caso del epidemiólogo, él, además, sufrió el virus en primera persona y en el momento más indeseado, en las primeras semanas de pandemia. "Caí enfermo a base de reunirme con tanta gente, me tuvieron que ingresar en el hospital y fue muy duro", confiesa. 

Sin embargo, consiguió superarla y nada más salir volvió a trabajar con "una sensación de no tener claro lo que iba pasando, de que los casos, poco a poco, iban aumentando, y de que el virus estaba empezando a hacer daño". No dejaba de preguntarse "cuándo iba a parar esto". 

Pero eso sí, sin perder la consciencia de lo importante que era en aquel momento "tomar decisiones prioritarias", y ya no solo para proteger a los ciudadanos, sino también a los profesionales sanitarios. 

"Porque si caían ellos, nadie iba a poder atender a los enfermos, y si esto ocurría, la situación, que fue absolutamente dramática, podía volverse drástica", apunta. 

"Auténticos héroes"

Haciendo balance del trabajo desempeñado, el experto, que señala el día en el que murieron 1.000 personas en España como el más desesperante y el que empezó la vacunación como el mejor de toda la pandemia, reconoce que, aunque intentaron por todos los medios proteger a todos los profesionales y pacientes, "no fue así en todos los casos". 

"Ojalá hubiésemos podido evitar un caso más. No puedo asegurar que se logró un éxito en ese sentido porque hubo momentos de acierto y otros en lo que no se acertó tanto, pero se intentó todo lo posible. Muchas veces no había recursos suficientes y, además, había muchas cosas que no se sabían", señala.  

En este sentido, reconoce que, con la evidencia que había en cada momento, desde su punto de vista, hicieron todo lo que debían hacer. 

"No estábamos preparados para todo aquello, pero yo estoy satisfecho con lo que hicimos porque lo dimos todo, aunque eso no quita que todos tengamos un gran dolor por el drama que supuso esta enfermedad", añade. 

Así, ha querido mencionar a personas "que nadie sabe su nombre, pero que han sido auténticos héroes de la pandemia".

Ha puesto como ejemplo al secretario general de la Consejería de Sanidad, Israel Diego Aragón, "que dormía en la Consejería para trabajar en el horario chino, intentando la adquisición de equipos de protección hora tras hora". 

Una de muchas personas que "parecía que no estábamos haciendo nada porque no estábamos en el hospital, pero que intentamos, en lo posible, minimizar los daños de lo que luego fue un tsunami tremendo", reconoce Rosell. 

Un trabajo que, aunque sí vio que fue agradecido por muchas personas, lamenta que otras tantas lo criticasen participando en "momentos de acoso muy duros con insultos de todo tipo y condición". "Hubo de todo, pero por supuesto me quedé con lo bueno", confiesa. 

Con todo lo expuesto, el epidemiólogo asegura que, en su opinión, Castilla y León "está mejor preparada para otra pandemia". 

"Ahora hay unas reservas estratégicas más importantes de materiales de protección y la propia experiencia también nos hace estar más preparados", reconoce. 

Si bien, también considera que "hay otras cosas de las que no hemos aprendido lo suficiente", como en invertir en recursos epidemiológicos, pues, lejos de reforzarse, "se han debilitado".

"A veces da la impresión de que nos estamos olvidando poco a poco de todo lo que pasó", ha concluido.