La Revuelta de Broncano se rinde a Maribel 'la Placeres'
La Revuelta de Broncano se rinde a Maribel 'la Placeres' y al embrujo de 'El burro de Villarino'
- La villarinense enganchó al público cantando la canción popular más conocida y regaló almendras garrapiñadas, en un gesto cargado de tradición y arraigo hacia su tierra.
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"El burro de Silguero, como era tan mohíno, fue a buscar la novia al pueblo Villarino…". Así, con la fuerza de una voz orgullosa de sus raíces, Maribel, más conocida como 'la Placeres', consiguió que Villarino de los Aires, en el corazón de Las Arribes salmantinas, se colara anoche en La Revuelta, el programa de David Broncano.
El show, conocido por su espíritu irreverente y su capacidad de convertir lo inesperado en espectáculo, vivió uno de esos momentos que definen su esencia: la improvisación pintoresca.
Broncano, sorprendido por el gesto, no dudó en hacer de las garrapiñadas el centro de una divertida interacción que incluyó un surrealista intercambio de caquis entre Maribel, él mismo y Grison.
Maribel 'la Placeres', en La Revuelta de David Broncano TVE
Maribel, vecina de Villarino, además de ganarse al público con su interpretación a capela del tradicional 'El burro de Villarino', también llevó al teatro una parte de su pueblo en forma de almendras garrapiñadas, un dulce típico que siempre está presente en días festivos y actos sociales.
La intervención de Maribel no se quedó ahí. Antes de despedirse, pidió permiso para cantar la canción de su pueblo, dejando claro que su paso por el programa era más que una anécdota: era una reivindicación de sus raíces y una ventana para mostrar al mundo la riqueza cultural de la puerta de Las Arribe salmantinas.
Villarino, tierra del poeta José Miguel Ullán, cuya madre hizo célebres las garrapiñadas en la comarca, y de paisajes únicos bañados por el Duero, encontró en Maribel una embajadora espontánea y carismática.
Con humor y mucho orgullo, recordó a los millones de espectadores de la apuesta de TVE, que Salamanca es historia, monumentalidad, tradición y carácter.
"Soy de los Arribes del Duero y de Villarino de los Aires", dijo Maribel con la misma convicción con la que cantó, arrancando los aplausos de todo el público. Salamanca y su cultura popular se volvieron a colar de lleno en La Revuelta gracias a esta vecina que, con humildad y picardía, logró que el programa viviera una de esas noches donde lo pequeño se hace grande y lo local se convierte en universal.
