Efectos intervenidos en la operación Cane Bianco

Efectos intervenidos en la operación Cane Bianco Policía Nacional de Burgos

Burgos

Gran golpe contra el tráfico de drogas en Burgos: dos detenidos y 40 kilos de cocaína y hachís intervenidos

Además, se han incautado más de 127.000 euros, dos pistolas, un inmovilizador eléctrico y cuatro vehículos, entre otros efectos. 

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La Policía Nacional de Burgos, en colaboración con el Servicio de Vigilancia Aduanera con sede en esta capital, ha asestado uno de los mayores golpes contra el tráfico de drogas de los últimos años en Burgos. 

La Operación Cane Bianco se ha saldado con dos detenidos por tráfico de drogas y blanqueo de capitales, que han ingresado en prisión preventiva, el descubrimiento y neutralización de un laboratorio clandestino, perfectamente preparado con todos los útiles necesarios para el tratamiento de las sustancias, donde el principal investigado manipulaba y cortaba importantes cantidades de droga, así como con la incautación de más de 40 kilos de droga, en concreto, 6.6 de cocaína, 33 de hachís y 8 de sustancias de corte. 

Del mismo modo, los agentes encargados del caso han intervenido 128.000 euros en efectivo, distribuidos en cinco fajos de billetes, dos pistolas, una de ellas real y otra simulada; un inmovilizador eléctrico tipo taser; cuatro vehículos, uno de ellos provisto de caleta o receptáculo para ocultar la droga; un reloj de lujo valorado en más de 10.000 euros y cinco teléfonos móviles. 

El inicio de la operación se remonta a principios de verano del año pasado, cuando los agentes de la Policía Nacional de Burgos, se pusieron tras la pista de un vecino de la ciudad, tras tener sospechas de que podría estar implicado en actividades ilícitas relacionadas con el tráfico de drogas. 

Así, tras meses de diligencias policiales conjuntas, a principios de este 2025 desplegaron un operativo en las inmediaciones del domicilio del investigado, una vivienda situada en el distrito oeste de la capital.

Tras detectar una 'cita' con un hombre desconocido y ante las sospechas fundadas de que entre ambos se estaba produciendo un intercambio de droga por dinero, se interceptó y registró al presunto 'correo' de la sustancia, localizando en su poder cinco fajos de billetes con un valor total de 125.000 euros.

Por ello, se procedió a su inmediata detención por un presunto delito de tráfico de drogas.

Tras ello, los agentes registraron la vivienda del receptor de la droga, encontrando en su interior cinco paquetes de cocaína perfectamente cerrados, que arrojaron un peso en bruto de más de 5,6 kilogramos.

El investigado, que se encontraba en su domicilio, fue detenido y está siendo investigado por los delitos de tráfico de drogas y blanqueo de capitales.

Una vez asegurados tanto el emisario como el receptor de la droga, se procedió no sólo al registro del domicilio del vecino de Burgos, sino también al trastero anexo a la vivienda, así como al de un segundo trastero alquilado por el detenido.

En el primero de ellos, la Policía Nacional y los agentes del Servicio de Vigilancia Aduanera hallaron 33 kilogramos de hachís, perfectamente empaquetados y precintados.

Por su parte, en el segundo de los trasteros registrados, además de cantidades de cocaína envuelta en bolsas, cuyo peso total sumó cerca de un kilo más de droga, se localizaron efectos que constituyen un laboratorio provisto de los útiles, instrumentos y sustancias necesarias y suficientes para elaborar, cortar y distribuir la droga de manera profesional.

Según ha explicado la Guardia Civil, en su interior se localizaron importantes cantidades de sustancia de corte, como acetona, lidocaína, fenacetina, y otras pendientes de analizar; una empaquetadora de vacío, una prensa hidráulica para compactar las sustancias, moldes de diferentes tamaños y básculas de precisión, entre otros efectos.

La hipótesis de los investigadores concluye que el detenido, una vez recibida la cocaína de una pureza alta, se dedicaba a cortarla con las sustancias apropiadas, para posteriormente empaquetar de nuevo y vender la misma, doblando sus beneficios.

De esta manera, lograba engañar a otros traficantes dentro de la cadena de distribución, con el riesgo añadido que esto suponía para la salud de los consumidores finales.