La pasada semana, Ni que fuéramos Shhh, el nuevo Sálvame, prometía un contenido muy jugoso para este lunes. Algo que suponía una ruptura con su pasado, en lo que parecía una referencia a su etapa en Telecinco, y muchos espectadores especulaban con una renovación o alguna novedad en sus ventanas de emisión.
“Las segundas oportunidades ocurren por algo”, avanzaban en un vídeo promocional. “Y el esfuerzo y la perseverancia siempre tienen premio. Llega la hora de dar el siguiente paso y romper con el pasado”, prometían.
El programa de hoy se llamaba, precisamente, Rompemos con nuestro pasado. Y el programa avanzaba, y no pasaba nada, no se soltaba esa bomba que dejaría el pasado del programa atrás. Ya en el tramo final, en lo que se llama la Happy Hour, el programa daba la bienvenida a Úrsula, quien se presentó como tarotista.
El objetivo de su visita era hacer una limpieza energética a todos los colaboradores del espacio, que hoy eran Belén Esteban, Kiko Matamoros y Kike Hernández, además de María Patiño, la presentadora. Marta Riesco, por su parte, cubría desde la calle la celebración de España en la Eurocopa. Así, lo que parecía una bomba informativa no fue más que una suerte de brujería, similar a la que ya se había visto en el Sálvame original en el pasado.
La primera en enfrentarse a esta limpieza fue Belén Esteban. Úrsula comenzó a pasarle un huevo por el cuerpo, mientras comenzó una oración: “En el nombre de Dios Todopoderoso, por favor, que entre lo bueno y salga lo malo, que entre lo bueno y salga lo malo”. Y, tras esto, la bruja rompió un huevo en un vaso e interpretó cuáles son las malas energías de Belén. “
“¿Ves las burbujas, no? Representan energías negativas, que tú tienes acumuladas. Y los hilos de la clara, envidias, porque tú tienes una personalidad muy arrolladora y despiertas muchas envidias”, le aseguraba Úrsula. Por eso, recomendó a Belén Esteban hacer algún ritual para limpiar su casa, como quemar palo santo, y tirar cosas viejas. “Belén está tan cargada que si haces una tortilla con ese huevo, te envenenas”, aseguró la tarotista.
María Patiño ve una cara
El ritual continuó con María Patiño, Matamoros y Kiko Hernández haciendo el ritual a la vez para “acelerar el proceso”. Tras pasarse cada uno un huevo por sus extremidades, rezando la oración correspondiente, se abrió el huevo de María Patiño en primer lugar, y la invitada aseguró que también notaba envidias. Más tarde, María aseguró que estaba viendo una cara en la forma de la yema del huevo. “Puede ser Terelu”, le decían con sorna sus compañeros, pero ella insistía en que era una persona con nariz aguileña. Según Belén, sería la persona que le tendría envidia a María.
Tras la limpieza, María anunció un cambio en el plató, que también suponía una ruptura con el pasado. Originalmente, el programa se iba a llamar Ni que fuéramos Sálvame, y así rezaba un neón. pero por una reclamación de Mediaset provocó que, en el último momento, se cambiase el título a Ni que fuéramos Shhh, y, por ello, se tapó con cinta policial la palabra Sálvame. Ahora, el nuevo neón sí reza Ni que fuéramos Shhh.