Que Espejo Público está viviendo un proceso de ‘salvamización’ nadie lo duda. Su sección Más Espejo tiene en su plantel de tertulianos a un buen número de excolaboradores del extinto formato de Telecinco. Con Gloria Camila, Alonso Caparrós y Gema López como últimos fichajes, la mesa de corazón cuenta también con Nando Escribano, Laura Fa, Pilar Vidal y Beatriz Cortázar. Eso sin contar que esta sección es dirigida por Alberto Díaz, otrora director de Sálvame.
Los temas de corazón han tomado un cariz ácido y con un tono más irónico. Sin embargo, este pasado miércoles 20 de septiembre, el programa tuvo un momento polémico tras lanzar un vídeo sobre los varios funerales a los que ha tenido que acudir recientemente José Manuel Parada. El expresentador del desaparecido Cazamariposas tiraba de humor negro, señalando al colaborador de Fiesta como alguien “gafe”.
“José Manuel Parada se está quedando solo y no porque se lleve mal con su entorno, sino porque sus amigos directamente se están yendo al otro barrio. En un mes ha dicho adiós a cuatro. Todos a su alrededor están estirando la pata a un ritmo frenético y eso está obligando a Parada a hacer parada en todos los tanatorios existentes de España”, narra Escribano en el vídeo.
“El trajín que lleva es tal que, si montase su propia funeraria, en unos años sería el más rico del cementerio. ¿Tiene Parada mala suerte o ser su amigo trae mala suerte? ¿Quedará alguien vivo para despedirlo a él?”, prosigue el colaborador de Espejo Público. Un vídeo que ha provocado fuertes críticas en redes sociales, por banalizar sobre la muerte.
Lejos de parar la polémica, ésta ha ido a más después de que Escribano, este pasado viernes, apareciese por los pasillos de Atresmedia con un cartel de ‘Se busca’ con la imagen del antiguo presentador de Cine de barrio. “Ay, no, por favor, otra vez Parada. No aprende, este hombre no aprende, eh”, señalaba Susanna Griso, quien ha intentado desligarse de la controversia. "Lleva varios días desesperado, desde que se emitió el otro día el vídeo, lleva intentando hablar con Parada por teléfono, por WhatsApp. Ha intentado disculparse", aclaraba Gema López, consciente de la polémica.
Y es que es la presentadora quien está recibiendo más críticas por el vídeo. “Esto no puede ser, Nando es reincidente. Hace un vídeo sobre Parada que lo inventó él, buscando a Parada en todos los tanatorios de España y entonces la gente me critica a mí en las redes y Nando se salva. Y ahora va encima y lo busca por los pasillos de Atresmedia. Es que estos amigos nuevos que he hecho me complican mucho la existencia”, confesaba en el plató.
Y claro que la polémica ha ido a más. El propio José Manuel Parada se ha pronunciado en redes sociales, cargando duramente contra el magacín matinal. “Han dicho en la televisión que estoy desaparecido, que mi familia no me puede localizar. ¡Por favor, más seriedad! Mi familia y mis jefes mis verdaderos compañeros y mis amigos saben perfectamente que después de trabajar todo el año me he permitido el gran lujo de pedir unos días de vacaciones”, compartía en un post en Instagram.
Mi familia, amigos y compañeros han conectado conmigo altamente preocupados por si me había ocurrido alguna desgracia. Tranquilos que no me ha pasado nada malo. Sólo tener que despedirme en muy pocos días de tanta gente que ha formado parte de mi vida personal y profesional durante tantos años”, proseguía para remarcar “que parece ser que a Susanna Griso y a su programa Espejo Público en Antena 3 les hace mucha gracia y se dedican a reírse de una desgracia ajena tan triste”.
“Incluso se atreven a insinuar si soy tan gafe que ser mi amigo equivale a morirse. Totalmente lamentable. Está claro que este programa con sus fichajes aspira a ser el nuevo Sálvame. No todo vale por aumentar audiencia. Y las noticias lo son cuando se contrastan y confirman. Si no, son simplemente chismes. Así que quede claro que hoy por hoy vivo y sana y no [estoy] desaparecido. Volveré a mi trabajo la semana que viene. Y en Juntos, Buenos días, Madrid, En boca de todos y Fiesta nos vemos muy pronto”, concluía, con un tono claramente dolido.