Alessandro Lequio, sin piedad con Tamara Falcó: "Vende una imagen de monjita ultracatólica"
Alessandro Lequio, sin piedad con Tamara Falcó: "Vende una imagen de monjita ultracatólica"
El colaborador de 'El programa de Ana Rosa' ha criticado el comportamiento de la marquesa de Griñón por no ser coherente con sus creencias.
29 septiembre, 2022 13:21Alessandro Lequio ha cargado duramente contra Tamara Falcó en El programa de Ana Rosa. El colaborador ha comentado la turbulenta ruptura de la marquesa de Griñón y su prometido, Íñigo Onieva, y no ha dudado en atacar a la influencer pese a ser la víctima de esta mediática historia.
El espacio matinal de Telecinco comentaba el viaje que Tamara hará este fin de semana a México para participar como ponente en un foro católico. Joaquín Prat apuntaba entonces que se trata de un viaje "muy oportuno" para poner tierra de por medio en su peor momento personal.
Sin embargo, Lequio no estaba de acuerdo con el presentador: "Sí, claro, para seguir vendiendo su imagen de monjita en contacto permanente con Dios", apostillaba el tertuliano.
"¿A quién le han sido infiel dos semanas antes de anunciar su compromiso?", espetó Joaquín, recordando que no es Tamara quien debe recibir los ataques. Pero el italiano insistía: "Si algo tenemos claro en esta historia es que por fin tenemos confirmado que hacían vida conyugal bajo el mismo techo y eso no encaja con la imagen de monjita en contacto permanente con Dios que Tamara ha intentado vendernos".
"Lo que han hecho es lo normal", prosiguió Lequio, "pero Tamara se vendía como una mujer en contacto permanente con Dios y la Iglesia no ve bien la convivencia prematrimonial".
"Sí, viven en pecado, pero sigue vendiendo esa imagen de ultracatólica que para mí es un bluf", sentenciaba Alessandro. Sandra Aladro intervenía entonces para argumentar que "hay una parte de la Iglesia que algo ha evolucionado". "Ayer la visitó en su casa por segundo día consecutivo el sacerdote amigo de la familia porque probablemente le ayude a encontrar una paz que ahora le está costando tener", añadía la colaboradora. Pero Lequio remataba con un "¡a buenas horas!".
